Venezuela está amenazada de extinción. No alarmo; advierto y es en serio porque el genocidio de los indígenas nos grita la escala exorbitante de lo que el capitalismo está dispuesto a destrozar. Nunca la humanidad alcanzó una destrucción masiva de tanta magnitud. Tal vez nunca sabremos cuántos hermanos fueron exterminados en la acumulación primitiva capitalista que fue la gloriosa Conquista de América, la que nos enseñaron a reverenciar desde la escuela. Cualquiera de los cálculos habla de decenas de millones. Conmensurable con esa aplanadora es el designio mental que la cubre, recubre y encubre.
Según el Manifiesto Comunista el capitalismo ha sido formidable, consiguió destronar la hegemonía del cristianismo feudal, barbarie que a su vez había demolido ya la civilización grecolatina y al final expulsó la civilización árabe que dominó Europa durante siglos. Estos choques de trenes se resolvieron finalmente en favor del capitalismo, que confiscó el cristianismo feudal para usarlo como auxiliar espiritual de sus depredaciones. Cierto sedimento ético de la cristiandad ha llevado a algunos individuos a desmandársele, ejemplos son San Romero de América, sor Teresa Forcades i Vila, pero son anomalías en el pillaje mental capitalista. Plusvalía ideológica, decía Ludovico Silva. Los llamados Reyes Magos y El Niño Jesús son coadjutores de la orgía consumista.
Hay otros genocidios, aparte del judío, gitanos y demás, como el del Medio Oriente actual, en donde el Imperio destruye países a domicilio. El Che decía que debemos marchar «uno o dos pasos delante del caos». Un descuido y en un tris nos propinan 20 mil bombardeos como a Libia, que dejaron arruinada para desvalijarle los 200 millardos de dólares de sus reservas, su petróleo y su inmenso acuífero subterráneo. La gente en la superficie sobraba y había que masacrarla y desarticularla, por eso Libia es hoy una desolación que ríete de Mad Max. Bueno, mejor no rías porque la cosa es bien seria y Venezuela, o sea, tú, yo, estamos en el núcleo. Después de sus fracasos militares en Medio Oriente el Imperio viene arrollando para acá. Ya han logrado éxitos importantes: Argentina, Brasil…
Hoy jueves 10 de enero comienza una nueva ofensiva, es decir, un nuevo fracaso.
