Ciudadanos del mundo que, como éste su anfitrión que en lo adelante ejercerá sin restricción ninguna, la presidencia encargado de la RBV y, como presidente de la noche a la mañana a su consideración y esfuerzo, hace constar que los medios para ejercer el mandato que vino de otras tierras unidas en una sola voz como voz del imperio y, como voz esperada por la nueva reluciente AN, os declara al pie de la letra que cumplirá con el tutelaje sugerido a un joven luchador que se ha forjado en la vanguardia de la oposición sin desmayo ni descanso en tantas batallas ganadas que le dan altivez y sabiduría de emplazamiento a su ejecutoria, por lo que se hace saber, a la audiencia pública que en lo adelante será y, así se decreta que:
El señor presidente será: Argentino, brasilero, canadiense, chileno, colombiano, costarricense, guatemalteco, hondureño, panameño, paraguayo, peruano, guayanés, santaluceño y, que sus coordenadas estipuladas políticamente están bien asentadas en el tiempo y en el espacio y que se reserva la ciudadanía venezolana y mexicana para su debido tiempo que, se espera que no sean tiempos difíciles, ya que en la unión está la fuerza y, por tal motivo, se le exige al secretario de la OEA que reúna a la brevedad en ese organismo: al tribunal supremo de justicia en el exilio para su juramentación que, debe ser breve sin ambigüedades ni protocolos que en vez de acercarlos al pueblo los alejan de él y la idea es estar unidos en esta hora de desagravio que se tiene la fortuna de ser poder, poder bien logrado sin revolución ni actos incómodos que dejen diferencias marcadas que no sean del desahogo de una enmarcado diálogo sin fronteras, sin vencidos ni vencedores.
Al expresidente Maduro que, en lo adelante residirá en La Orchila cumpliendo su tiempo de extremaunción política al resguardo de sus actos fuera del poder político, y sin remordimiento ninguno debe sentirse a sus anchas dentro de la legalidad democrática de esta AN que, tiene los pies sobre la tierra como los tiene su presidente Guaidó, por los momentos haciendo antesala en los EEUU, llamado de urgencia por su jefe Trump desde la Casa Blanca que, de acuerdo por los aires que soplan será condecorado con la orden "lacayo del imperio en su segunda clase" por lo que Pompeo sea ha visto en coagulante necesidad de hacer tripas corazón para coadyuvar al entretenimiento del señor presidente Guaidó que está nervioso, en grado acompasado por su alta investidura ganada con el sudor de los gringos que han luchado por el porvenir del triste pueblo venezolano antes, en la garra de un "dictador".
Y como el presidente Guaidó es alérgico a los estimulantes dislocantes, posiblemente habrá que sedarlo con gratas palabras, para que no pierda el rumbo que él mismo sabrá emprender mientras que se decida entre Julio Borges y Ramos Allup, ¿quién de ellos será el embajador en los EEUU?, ya que la canciller sin eufemismo ninguno será la señora María Corina como mujer pundonorosa, arraigada de consuelo y tertulia africanizada que la hace más cercana al cargo dentro de los méritos más leales que es de su propia libertad de mujer libre, altanera e integrada a los principios integracionistas que la acercan a Bolsonaro que ya es mucho decir. Y como Guaidó es la maravilla que nos ha mandado Dios a través del esfuerzo mancomunado de la CEV satisfechos deberíamos de sentirnos, ya que Dios está en todas partes y por primera vez nos desampara a nuestra suerte de la que saldremos vencedores con Guaidó y su furia de gobernarnos, aunque no llueva, no truene ni relanpagueé, pero así es la nueva vida del venezolano que anda fuera de Venezuela en esta hora sombría de alegría compungida.
Mientras que la unidad de las fuerza opositoras está hoy más compactada, se teme que alguna fisura deje a la tentación que se filtren deseos incaicos que no son de provecho ninguno como se lo dijo Iván Duque a Guaidó cuando lo aconsejó que ser presidente no es nada fácil si no se está con los gringos y sin trastorno ninguno con régimen de autoridad le impuso: ponte duro y si ellos te piden cacao, dale caco y cuando te amenacen baja la cabeza que mejor es un cocorronazo que un mazazo de Diosdado.
Como la temperatura política en el país está que arde y Guaidó está como en AN permanente con un clima que no se sabe si lloverá o temblará, pero lo cierto es que tenemos nuevo presidente que desde la OEA, Luis Almagro proclamó: ¡Ya era hora carajo! Venezuela libre para los EEUU. Que hace que Guaidó no duerma bien, no coma y está perdiendo kilos, pero con una ambición desconsiderada, bien oportuna y bien terrible, quiere ser presidente y en eso anda con el peligro que la fosforito anda detrás de él que así venga carnaval -dice ella- no lo pela.