Tarcila Crítica de Todo Bello estaba sentada en el mueble leyendo el periódico. Su esposo, Jacinto Todo Bello, descansaba en otro mueble pensativo, hasta que llegó la hora de irse a la cama.

-Vamos a dormir – le dijo Jacinto Todo Bello-. Tarcila lo miró de reojo por encima del periódico.

- Andá vos, Jacinto, toavía es muy temprano, no tengo sueño.

- Vamos, que a lo que te dé una buena ajusticiada, te quedáis dormiíta como un lirón.

- ¡Ay sí quién lo oye, apártate ahí, súper Jacinto Todo Bello!… si esa regorgalla tuya se la pasa toa engañotá

-Pero eso no lo decís cuando te tengo hasta los tequeteques, Tarcilita Crítica.

- ¡Cuidao, ve!

- ¿Qué, son mentiras? Vos sabéis que yo soy el rio crecido que desborda ese caño sediento.

- ¡¿Rio crecido?!… alabancioso…cuatro gotas y ya perdieron hasta la pega…Jacinto toy leyendo argo en el periódico que no entiendo, la lavativa esa de la guerra de cuarta generación.

-Ya te vais a meter con mi presidente Nicolás Maduro…

- ¡No chico!, pero ¿vos sabéis qué es eso de guerra de cuarta generación?

- ¡Claro! Dicen los que saben de esa molleja, que es así como esta que hacen contra nosotros, sin balas ni bombas ni misiles, too son puros brollos por la prensa, por la radio, la televisión, por las redes sociales.

- ¡Miarma, Jacinto, ¿una guerra sin tiros?!

- Bueno y fíjate, es igual de destructiva que esa que llaman convencional que son a plomo limpio, porque no rompen el cuero ni la carne con balas, pero le esmollejan la mente a las personas con las vainas escritas.

- ¿Cómo, Jacinto Todo Bello?

- Así como pasa con vos, Tarcila Crítica, ahí te tan metiendo en la cabeza una pila de basura, y vos te la tai comiendo toita, toita.

- ¿Y vos por qué no decis lo mismo cuando veis a VTV?

-Porque VTV no es así, ese si es un canal que dice lo que es.

- ¡Sí cómo no!, a mí también me parece que este es un periódico serio!

- No sé si es serio, Tarcila Crítica, pero hay unos que nada más son cobas pa dañale el cerebro a la gente…Los que son de la oposición tan metíos en esa guerra. La idea es controlar la mente de las personas con mentiras y vagabunderías. Lo que los diablos de los gringos hacen con nosotros, con esas industrias mollejúas de la información que tienen.

- Bueno, Jacinto, a mí mi presidente Chávez me enseñó a interpretar toas esas cosas que veo, escucho y leo por la prensa, no me van a engañar muy fácil.

- De toas maneras hay que tener cuidado, Tarcila… Y las redes sociales son peores, tuite, feibus, guasá, Intagrán. Son puros feique niusa.

- ¡¿Feique niusa?!

-Sí, así le dicen los espertos en inglés a las noticias falsas, a toos esos embustes que aquí en Venezuela nos mantienen como palo e gallinero.

- ¡Ay no sé, Jacinto, ¿una guerra sin muertos?! No me cabe en la cabeza.

- ¿Y quien te dijo que no había muertos, Tarcila Crítica? ¿O vos no sabéis de la gente que en Venezuela muere en los hospitales por falta de medicinas, de comida, que se suicida desesperada por este mollejero económico que han provocado los empresarios y comerciantes opositores en el país?

- ¡Ahhh…!

- Las sanciones económicas, el bloqueo financiero, too eso forma parte de la vaina esa de la guerra de cuarta generación en contra de nosotros, Tarcila Crítica, de too este despelote.

- Ajá, ¿y cómo se combate esa lavativa, Jacinto?

- Igual, a través de los medios y las redes sociales, pero con la verdad como hace nuestro presidente Nicolás Maduro. En la cosa mediática, política, diplomática. Y garganteando, porque en ese foleo, mija, el que tenga más saliva traga más fororo.

-Bueno y con la mentira también la combaten, porque te voy a decir argo, Jacinto Todo Bello, pero no te vais a calentar que ya te veo con la nariz pará.

-Decime Tarcila.

-Yo esta mañana me metí en el tuiter, en el feibus y en el Intagrán de los gobernadores y arcardes y decían como ellos taban trabajando, mirá con fotos y too, que país más lindo, provocaba vivir en él, pero uno sale a la calle aquí en Maracaibo y esto es un desastre, una ciudad toa esmollejá. Y así deben estar sino toas, la mayoría de las ciudades de Venezuela.

-Te habías tardao mucho en metete con los arcardes y gobernadores, Tarcila Crítica.

-Es que son unos zánganos los bichos esos, Jacinto Todo Bello, pa mí aprovechan esa guerra que decis vos, pa envainar a mi presiente Maduro. Por las redes sociales dicen que too está bien, pa que él los vea, y too es mentira…Claro, como saben que mi Presidente ta entretenío en Trump y los malayos esos del cartel de Lima y la Unión Europea, aprovechan. Pero ve, juro y no me condeno, Jacinto Todo Bello, que los arcardes y gobernadores tienen fuñío a Maduro a costillas de esa guerra de cuarta generación. Yo que te lo digo, mijo.

- ¡Coño, Tarcila, es que a vos no se te pone nada bueno en esa cabeza!

- Jacinto es que yo veo que lo gobernadores y arcardes no hacen nada. Maduro tiene que estar bajándoles cobres ¿y qué los hacen? No se los gastan ni a los municipios, ni a los estados, ni tampoco al pueblo. ¿Entonces?

-No sé, Tarcila.

- Esos gobernadores y arcardes si no toos, casi toos, son cortaos con la misma tijera, mijo.

- ¡Coño Tarcila Crítica, es que cuando a vos se te mete una molleja en la cabeza ¡no joda, que arrecho!

- Pero no te pongáis bravo, mi bello, vais, vení pues, yo sé lo que vos queréis.

- ¡No, no, ya yo no quiero un coño, no me lo deis un coño!

Jacinto se levantó de un salto y se metió al cuarto indignado, sin querer saber nada de su esposa Tarcila Crítica, por lo menos, esa noche.