Que puede resultar mejor detener la Guerra haciendo esfuerzo por la paz, o sencillamente invocar la guerra en tono desafiante, desplegar una verborrea antiimperialista para luego esconderse, sin evitarla, sin medir las consecuencias para el pueblo, perder los estribos, no ser prudente, como si no hubiera suficiente cordura, juicios critico y revolucionario para frenar los intentos imperialistas de quienes amenazan al país. Prudencia y mas prudencia, es la política de Nicolás Maduro, unir las fuerzas sociales y revolucionarias, alistar millones de milicianos, movilizar el pueblo en la calle, hacer actos de fuerza y conciencia, asistir a los cuarteles, a las academias militares, realizar ejercicios militares, calentar músculos, disuadir al enemigo como parte de la panoplia política que desenvuelve el presidente en jefe de la revolución bolivariana.

Asi simplemente no son simples peticiones, como la Carta por la Paz y la Soberanía, documento que escribe Maduro dirigido al Gobierno de los Estados Unidos, advirtiendo de las consecuencias de una guerra, del "peligro de invasión", este documento tiene un destinatario claro, pero de igual modo, al Pueblo de los Estados Unidos, a los pueblos de buena voluntad, con tal de frenar las malas intenciones imperialistas guerrerosas, y creo que quienes somos revolucionarios, asumimos el partido de la Paz y no de la guerra, asi que es irresponsabilidad ante la historia, es traición a la Patria, no firmar por la petición, que no es ruego, ni tampoco somos mendigos de la paz, estamos comunicando públicamente nuestra voluntad millones de personas partidaria de la paz, quienes no lo haga, tal vez porque no "saben otra cosa que hacer, no se les ocurre nada, no saben pedir, no saben luchar, ni saben quien es su enemigo" son unos irresponsables, claro y raspao.

La invasión militar no es ninguna amenaza, es tan cierta como real, nos ninguna amenaza de "invasión dulce", las declaraciones de los funcionarios de Estados Unidos lo manifiestan, sus intenciones son claras, la violación del derecho internacional los delata, así que "no es excusa del gobierno de Maduro". La estratagema del imperio del cual hace uso el imperialismo de los Estados Unidos, es servirse de un gobierno paralelo, de unos funcionarios títeres de la Asamblea Nacional, crear una fisura de los poderes públicos, fisura de la unidad de los poderes del Estado, debilitando asi la cohesión nacional antes de una "invasión con portaviones, marines en las playas de la Goaira". Esa invasión o interferencia en los asuntos internos se ha cumplido, esa flagrante violación del derecho internacional, la injerencia en los asuntos políticos internos, en el desconocimiento de los poderes públicos para crear un clima de caos político en el país, un clima de preguerra.

Pero que v{a, no ha asustados al Gobierno de Maduro, lo acompaña no solo todos los poderes públicos, se han unidos en torno a él, las fuerzas armadas se han vuelto mas consciente, mas antiimperialistas, la propaganda de injerencia, amenaza, --el decreto de Obama--, las insolentes amenazas de D. Trump y sus funcionarios atestiguan quien es el enemigo de Venezuela, sus sanciones económicas, el bloqueo comercial, la guerra del dólar, apunta a saber quien está detrás del estrangulamiento económico y social del pueblo venezolano. Así que se ha acrecentado el apoyo a Nicolás Maduro, se ha fortalecido la unidad nacional, hay que ver como el pueblo concurre masivamente a firmar la Carta por la Paz y la defensa de la Soberanía.

Personajes como Toby Valderrama Antonio Aponte, en su articulo "Nosotros no firmaremos esa irresponsabilidad", Aporrea, 07-02-2019, revela su autor ciertas lagunas, primero su desprecio al ignorar que recoger firmas constituyen una manera de movilizar al pueblo, hacerlo participe y protagónico mediante un acto de conciencia política, de lucha por la paz y la defensa de la soberanía, una clara posición frente a lo que amenaza al país, el pueblo está claro, frente a las incertidumbre del político Valderrama frente a la invasión militar: "recoger firmas a no se sabe quien pidiéndole no se sabe que", ceo que el que el desconoce la realidad es el mismo. Además llama tácitamente "invasión Dulce" la estratagema del imperio de designar a su peón político, Juan Guaidó, presidente impostor, para que le haga el trabajo sucio ante los medios de información, de falsear la realidad, de crear incertidumbres, dudas, caos en la opinión pública.

Es de Bolívar el pensamiento aquel, que la primera de todas las fuerzas "es la opinión pública", si es asi, entonces el pueblo está en lo cierto con Maduro, movilizando al pueblo con "La Petición" y Valderrama ha retrocedido hasta la inacción, sus opiniones se hacen retrogradas, se ha quedado en la cola de los eventos, rezagado de la conciencia política, Maduro siendo asi, por todos los argumento anteriores que son notorios y públicos va a la vanguardia, sigue gobernando el país, pese a los errores, los retrocesos, las debilidades, sus contradicciones internas, gobierna para el pueblo, aunque con menoscabadas capacidades, continúa en defensa de la revolución bolivariana, la soberanía e independencia nacional, se ha plantado firme frente al imperialismo de los Estados Unidos y la Comunidad Europea, no retrocede en sus posiciones de dialogo, paz y defensa de la Constitución. El gobierno de Maduro no conoce de miedo.

Miedo por el contrario siente Valderrama, llama al Gobierno de Maduro de que "está caído", si fuera asi, asi, ya tendríamos al impostor gobernando, "al copresidente" como lo llama Valderrama, vale decir, si entendemos el sentido del lenguaje, Valderrama reconoce al Juan Guaidó, como "un copresidente" es decir, un presidente de facto, impuesto por los Estados Unidos y ratificado por la Asamblea Nacional en desacato, ésta renunciado al ejercicio de la democracia, sostiene una dictadura, un presidente de la AN a la par del poder ejecutivo, quien asumiría "la dictadura con ropaje democrático para restituir la dominación capitalista" a modo de resolver la crisis mediante la fuerza frente a la cual "el chavismo si logra levantarse de la sepultura …..vuelva a transitar los caminos de la disputa del poder". Tal es el escenario que nos pinta Valderrama.

"Gobierno caído, Maduro caído", "chavismo sepultado", "invasión dulce, Guaido copresidente", tales son las cavilaciones de Valderrama, las dudas, las incertidumbres políticas de Valderrama, la pregunta es, Será que está tan senil Valderrama para no poder hacer lectura política d elas movilizaciones chavistas, o son simples almas vivas recorriendo las calles del país, corriendo detrás de Maduro, buscando a Chávez?. Estas son las graves y grandes incógnitas políticas de Valderrama, verdades sin miriñaques como dice, puesto que se ha demostrado es público que Maduro goza de un "apoyo religioso del pueblo, un religiosidad por Chávez, cada mitin de Diodado o maduro es una gran movilización popular como lo es también el acto de la firma de la Carta en cada Plaza Bolívar del país.

Firmar la Carta Por la paz, la Soberanía y la Independencia no es un acto de irresponsabilidad, al contario, es un acto de alto deber cívico-militar, es demostrar, "una alta dosis de conciencia del deber social", del deber patrio, de sentido de pertenencia, de identidad no solo a la sociedad venezolana, y más allá de la frontera, un acto de solidaridad e internacionalismo socialista, es un acto de mover a la primera de todas las fuerzas, la opinión pública contra el imperialismo y sus amenazas, invasiones e intervenciones groseras y crueles. No firmar es una puñalada al corazón de la Patria, al socialismo y por tanto, a los sueños de Bolívar.