En estos días hemos estado pendientes de los resultados de la reunión que en la ciudad italiana de Roma sostendrían el día 19 de marzo (Día de Fiesta en Elorza, en el corazón del llano apureño) unas delegaciones de los gobiernos de los EEUU y Rusia encabezadas por el Enviado Especial del Gobierno de Trump para Venezuela, Elliott Abrams y el Vicecanciller de Rusia Sergei Riabkov, para tratar la situación actual de Venezuela y las posibilidades de buscarle salidas negociadas a la grave crisis que nos afecta diariamente como parte de la gran mayoría social. Después de conocer las apreciaciones de las reuniones y sus resultados, expuestas por cada uno de los representantes de estas Potencias con reconocido Poder Global, podemos señalar que es posible que se esté logrando abrir algunas pequeñas rendijas que permitan evitar una guerra fatricida, como la que se le inoculó desde afuera y adentro a Yugoslavia, esa gran nación ubicada frente al Mar Adriático, que luego de los múltiples conflictos condimentados con tóxicas narrativas étnicas, religiosas, tribales, territoriales y linguisticas excluyentes e intolerantes, terminó invadida, bombardeada e intervenida con las armas y las tropas de la OTAN, dividida en 6 naciones y una séptima (Kosovo) que actualmente reclama tener también esa condición. Son naciones pequeñas surgidas con graves debilidades y una impagable Deuda Externa hacia los países que le bombardearon sus puentes, hospitales, universidades, autopistas, carreteras, edificaciones dedicadas a la enseñanza educativa pre-escolar, primaria y secundaria, industrias, cultivos familiares e industrializados, urbanismos de viviendas unifamiliares y multifamiliares, además de edificaciones públicas y privadas. Después de esa intervención de "salvación humanitaria", fue invadida, dividida y se le asignaron las respectivas alícuotas de la enormes e impagables deudas externas por TODOS los gastos de la guerra invasora con sus respectivos intereses. Las secuelas psicológicas, psiquiátricas, emocionales, económicas, territoriales, familiares están allí junto a las áreas ruinosas que dejaron los "bombardeos humanitarios" en Croacia, Bosnia-Herzogovina, Serbia, Montenegro, Macedonia, Kosovo.
En un artículo publicado en aporrea el 27-02-19 y cuyo título es "La preservación del Estado-Nación Republicano de Venezuela en el escenario geopolítico de la multipolaridad mundial" sugeríamos que en …"Venezuela es necesario que los actores internacionales con reconocida capacidad de Potencias Globales como Rusia y China por un lado y EEUU y UE por el otro, lleguen a los acuerdos necesarios para ayudar a canalizar y garantizar negociaciones entre las fuerzas políticas venezolanas ubicadas en el gobierno y en la oposición. Eso pasa por negociaciones que logren suspender todas las medidas de cerco y asfixia económica contra Venezuela, así como respetar todos los activos del país y dejar que fluyan las compras y ventas de productos entre el sector público y privado venezolano con empresas internacionales. Conjuntamente con esas medidas acordadas me parece que se pueden (y se deben decimos ahora 20-03-19) pactar/acordar condiciones para unas elecciones presidenciales y parlamentarias para realizarse unos 6 meses después del levantamiento supervisado de estas medidas. Intentar promover cualquier tipo de elecciones en medio del asedio económico, diplomático, institucional, militar y con presión violenta de calle es un escenario por lo menos absurdo y alejado del sentido común".
Hoy miércoles 20 de marzo de 2019 podemos agregar que un proceso electoral de cualquier tipo (elecciones presidenciales, parlamentarias o algunas de las opciones de referendo popular contemplado en la Constitución vigente, CRBV) en las circunstancias actuales del país, ahora con saboteo intenso y recurrente de los servicios públicos como la energía eléctrica, sería como promover un juego de futbol entre un equipo con zapatos/tacos profesionales y otro equipo con alpargatas o cholas. Imaginemos un juego de beisbol entre un equipo de 9 jugadores con guantes para atrapar las pelotas y el otro sin guantes, es decir con la mano pelada. También podría ser equivalente a organizar una pelea de boxeo profesional donde un boxeador utiliza sus dos brazos y manos y el otro es obligado a pelear con un brazo amarrado.
En ese mismo artículo propusimos que los venezolanos tenemos la obligación de …"presionar para evitar convertir a Venezuela en el escenario de inicio de un verdadero Incendio de las Praderas, Serranías, Sembradíos, Caseríos, Ciudades que comenzaría por acá y se extendería por una parte de América Latina y el Caribe. Nosotros pondríamos los heridos, mutilados, muertos, infraestructuras a destruir….mientras otros se aprovechan de nuestros recursos y nuestras debilidades posteriores como pequeñas y destruidas Repúblicas. Si dejamos que nos impongan esa agenda de guerra y destrucción sólo debemos leer un poco sobre Yugoslavia, Irak, Afganistán, Sudán, Yemen, Libia, Siria…Colombia con sus guerrillas y narco-paramilitares entre la década de 1940 y la actualidad…"
A esta lista podemos agregarle los casos de las guerras que han sido inducidas entre miembros de las poblaciones de Mali, Niger, Chad, Nigeria, Santo Tomé y Principe, Liberia, Somalía y otros escenarios del mundo donde también los intereses económicos transnacionales que buscan acceder y asegurar el control de importantes recursos energéticos, mineros o vías estratégicas de tránsito, junto a planes geopolíticos de Potencias Globales y/o Regionales, siempre en alianzas con grupos locales ambiciosos de poder militar, político y definitivamente económico, han obstaculizado y en muchos casos destruido las posibilidades de avanzar hacia niveles institucionales de vida y bienestar para las mayorías de los habitantes de esos países que forman parte de las 192 naciones representadas formalmente en la Organización de Naciones Unidas (ONU). En muchas de estas guerras participan mercenarios que provienen de otros escenarios de conflictos, disfrazados como miembros de grupos religiosos extremistas, los cuales son trasladados y armados por los intereses económicos y geopolíticos que se benefician con el desarrollo de estos conflictos, su permanencia y sus desenlaces.
También señalamos en ese artículo que las actuales medidas de cerco y asfixia económica, apropiación ilegal de los recursos y activos de la Nación ubicados en el exterior, el saboteo de las transacciones para vender petróleo y minerales venezolanos, así como las acciones imperiales para frenar y afectar las compras de productos alimenticios, medicinas, repuestos, reactivos, insumos para todo tipo de actividad productiva, afectan de manera severa, frontal y total a la mayoría de los habitantes del país. Porque además las minorías que conforman las élites del Gobierno y de la Oposición en Venezuela tienen mecanismos de acceso privilegiado para adquirir productos como alimentos, medicamentos, aseo personal y del hogar, repuestos, ropa, refrigerios y hasta bebidas alcohólicas en tiendas nacionales y del exterior. La mayoría social de la población venezolana es la víctima y depositaria fundamental de los efectos negativos de todas estas acciones promovidas desde instancias del Estado y el Gobierno de los EEUU, países de la Unión Europea, naciones de América Latina y más triste aún por venezolanos que aspiran derribar al actual gobierno para acceder ellos a controlar esos espacios privilegiados del Poder Público. Mientas tanto, la mayoría de habitantes de este Estado-Nación denominado VENEZUELA padecemos los efectos de la inflación, devaluación monetaria, escasez de productos, especulación, deterioro del salario y pensiones, golpeando el bienestar y la tranquilidad emocional de las familias venezolanas.
Es tan cierto esto de las condiciones de privilegio que tienen las élites gubernamentales y opositoras en las actuales circunstancias que podemos evidenciarlos de la manera siguiente. Tenemos una cantidad importante de miembros de la élite que entre los gobiernos presididos por Hugo Chávez y Nicolás Maduro (1999-2019) se han desempeñado como parlamentarios, gobernadores, alcaldes, ministros, viceministros, directores y presidentes de importantes empresas e instituciones de gobierno que ahora pueden ser ubicados teniendo un alto nivel de vida y acceso a grandes porciones de divisas en ciudades de los EEUU, Europa, América Latina, el Caribe, Asia, Medio Oriente y Oceanía. Desde estas cómodas y holgadas estancias y haciendo uso de parte del dinero expoliado y sustraído del presupuesto del Estado-Nación, algunos de estos personajes sugieren y convocan a mayores sanciones contra Venezuela y los Venezolanos. Seguramente que esas convocatorias a la guerra entre venezolanos la realizan mientras cuentan los "tantos" o puntos de las manos del juego de dominó, entre el lento movimiento de las piezas de ajedrez (¿piezas de oro puro?) y cerca de alguna piscina o jacuzzi "climatizada" o mientras revisan los reportes electrónicos de sus colocaciones internacionales en divisas y los reportes en clave de los operadores financieros, sosteniendo en sus manos su respectivo vaso de whisky escocés mayor de edad, sus cervezas bien frías o una copa de vino tinto, blanco o champanizado de reserva y denominación de origen, acompañados con su respectivo tabaco de alto precio.
Asimismo, tenemos una gran cantidad de miembros de la élite política opositora venezolana que viven holgadamente en ciudades de esos mismos países ya señalados, con financiamientos de gobiernos, empresas transnacionales, organismos internacionales y fundaciones que sirven como fachadas de organismos de inteligencia de diversos países y de empresas transnacionales. Desde esas cómodas y confortables condiciones de vida viajan por diversos países solicitando más sanciones contra este Estado-Nación y en consecuencia contra la mayoría social que constituye la principal depositaria de TODAS esas medidas y castigos. Adicionalmente solicitan que una Potencia Global como los EEUU nos intervenga militarmente y que junto a otros países de Sur América inicien contra Venezuela una guerra fatricida donde Colombia con sus conflictos armados internos y su narcoterrorismo de casi 70 años ininterrumpidos quedaría como "una niña de pecho" frente a una violenta guerra y destrucción en nuestro país.
En la actualidad se impone para nosotros como venezolanos, el ejercicio de una conciencia crítica que nos permita, desde nuestras más diversas perspectivas éticas, políticas, religiosas y estéticas, mirar y analizar más allá de lo aparente la realidad nacional e internacional. El ejercicio de esa conciencia crítica se puede convertir en uno de los mejores antídotos contra la manipulación, el manejo de nuestras emociones, la presión social y la alienación como mecanismos para ocultar, desdibujar y disfrazar los intereses que se manejan detrás de cada construcción discursiva. Es importante leer, dudar, preguntarse, reflexionar y no dejar de leer para enfrentar la manipulación, que además es un gran ejercicio para prevenir enfermedades como el mal de Parkinson, el mal de Alzheimer, la arterioesclerosis y otras patologías degenerativas relacionadas con el sistema neurológico