Los ´problemas centrales en el campo económico por parte de las organizaciones de izquierda en América Latina no se arreglan con una campaña propagandista y un populismo descarnado, donde toda una población necesita un sueño colectivo hacia la realidad. Seguro, esta demanda de la crisis por la que pasa el pueblo venezolano se encuentra fuera de la agenda pública y, lo que se necesita es detectar las irregularidades en el erario nacional durante los últimos veinte, (20), años atrás, donde los funcionarios originarios deben ser sancionados, como los que prosiguieron en dichos cargos por abusar del erario estadal, a sabiendas, que nos encontramos en un estado socialista y democrático hacia un viraje comunista, pero, ¿ Cuando se fortalezca la boliburguesia más junto a la banca financiera?.
Las sociedades evolucionan desde una diversidad de imaginarios y utopías. Estas últimas se nutren en las artes, las humanidades y las ciencias sociales.
Anteriormente las utopías fueron motores de la historia, más aún que la lucha de clases. En el siglo XXI ya predominan las distopías (catástrofes ambientales o económicas) sin pasado ni futuro, solo presente. Esto se revierte recreando virtudes como democracia, paz, equidad y ambiente sano. Los imaginarios más creativos evolucionan dentro de una democracia: las ideologías y las corporaciones no son conducentes a estos efectos. Esta digresión aparece más clara si recordamos que un Proyecto de País debe contener -al menos- los siguientes objetivos: Identidad, Sentido, Futuro, Ética del bien común, Sostenibilidad y Responsabilidad global.
El gran problema es que este proyecto llamado Bolivariano fue echado a un lado, cuyo legado histórico fue argumentado y tenía carácter histórico, su autor originario es el comandante Hugo Chávez Frías.
De esta forma, se pueden detectar las “causas raíz” de nuestras frustraciones y aproximar las claves de un tratamiento eficaz. Sin duda, necesitamos de nuevos líderes. En esta lógica, es importante adquirir miradas espacio-temporales y también de especie (supervivencia). Esta triple conciencia habilita imaginar proyectos -estructurales y estructurantes- compatibles con una sociedad-mundo.
El enfoque economicista presenta al crecimiento económico como fuente de todo progreso: privilegia el abordaje por síntomas y trabaja por sectores, zonas y rubros; confía en la ciencia y la técnica para alcanzar sus objetivos; desatiende lo social, ambiental y el cambio global.
El enfoque sistémico, empero, contempla la estructura del país, en términos de equilibrio, institucionalidad y sostenibilidad. Enfoca las relaciones sociedad-naturaleza (metabolismo social), satisfaciendo necesidades nacionales en coherencia con las mundiales.
Adscribiendo al segundo modelo y dada la situación actual de la Argentina y Venezuela, las tres primeras Políticas de Estado que se proponen para comenzar a discutir un Proyecto son: Ordenamiento Territorial (Desconcentración y funcionalidad), Multifuncionalidad Agrícola (Equidad y salud) y Educación Ambiental (Capital natural y ética planetaria).
La gran transformación, subyacente, es el inicio de una desconcentración y repoblamiento del interior, a través de pymes sostenibles.
Políticas equivalentes y coherentes, todas entre sí, deben diseñarse para las componentes urbanas e industriales, de turismo y de servicios. Esto se trata de política, más allá de los políticos: definitivamente, la sociedad civil tiene que ser protagonista. Por esto, la gente de izquierda exige un cambio radical en la estructura funcional del Estado, comenzando por el giro sanitario y educativo que debe existir.
Los verdaderos problemas del país no se resuelven en “modo electoral”, con un plan económico o una cosecha récord. Las herramientas que nos pueden ayudar a diseñar un futuro nos remiten a las estructuras y los sistemas.
Los argentinos y venezolanos -salvo honrosas excepciones- “carecemos del último hervor”: zafamos del imperio español, gringo y ahora judío, al precio de entregarnos a otro y a otro, así sucesivamente. Todos sabíamos lo que ibas a suceder con Mauricio Macri y Nicolás Maduro, nadie les obedece y los tienen como payasos, eso lo vemos en cualquier cola desde el supermercado hasta quienes van al sistema bancario a retirar sus fondos de ahorro.
Quienes ejercen funciones en la administración económica y política del Sur, son los mismos que en una forma disfrazada impondrían la “diplomacia de las cañoneras” para cobrar sus falaces “créditos de deudas externas de países expoliados por la usura de EE.UU. y la complicidad de las camarillas políticas locales. En EE. UU tienen sus vehículos Ford y quintas lujosas, son un buen número de personajes autores de este malestar latino que lograron filtrarse en las faldas de los partidos de izquierda, bajo el amparo y sosiego de sus altos dirigentes, abajo están los almohadones con un buen ligamento de dólares y euros.
Como que en aquel régimen nefasto hicieron sus prolíficas inversiones Westinghouse, Unilever y General Electric. Por eso los bombardeos de los “aliados” cuidaban no dejar caer sus bombas sobre las sedes de aquellas en la Cuenca del Ur. Discriminación positiva. Aprendan. Son las mismas manos manchadas de sangre que desde el avión B-29 “Enola Gay” lanzaron sobre Hiroshima a "Little Boy”, que pesaba 4 toneladas equivalentes a 40 millones de cartuchos de dinamita: allí fue el temible hongo blanco sobre la pobre humanidad de millones de víctimas inocentes.
El Imperio -entre otras linduras- lo tornaría perdurable en Las Vegas como “elección de Miss Bomba atómica”. Habían ensayado el Uranio. Faltaba ensayar el plutonio en Nagasaki. Después vendría -con el aporte de Dow Chemical- el gas naranja sobre millones de vietnamitas civiles. Los envenenamientos por radiaciones tras cada explosión, se propagarían “in sécula seculares”. Y siguen... En Yemen. En el “carcere duro” de Assange. En Siria con mascara de “insurgentes”. Eso sí: Maduro es un tirano. Venezuela es un peligro para EE.UU. La OEA no es el “ministerio de las colonias” del Imperio. Pero son directores del Saime, Sarem y gobernaciones, alcaldías. Traidores y desleales que incumplen sus funciones públicas, los únicos gobernadores que sí trabajan son Heredia y Rafael Lacava
Es la hora de “frangolleros” calificados de “hombres de Estado”. El pueblo mira atónito este zapping de egos e hipocresía. Hay agobio ante una ingeniería electoral con pícaros expertos en roscas. Al decir de Stephane Hessel en “Indignaos”, de esto no se sale sin indignación. Hay un lleno de leyes que ahogan el espíritu. “Legibus laburantur” (Tácito), sin el Restaurador. Un lleno de símbolos vaciados o ausentes como la escarapela en la solapa presidencial: un páramo donde no hay nada que se respete. Mas la indignación requiere urgente de la “función merecida”, lo que Buffon tomaba para afirmar que “el estilo es el hombre”.
A plenitud, tenemos que hacer un viraje político. Estamos full de candidatos garrachos que se sirven de alforjas para sí, en abundancia impúdica, el pueblo, estamos exigiendo no un reclamo a tientas. Todo se encuentra escrito, jamás estará a tientas, claro, nos encontramos indignados con Wall Street. Así que deseamos nuevos dirigentes que se salgan de la horda codiciosa y entretejer la solidaridad. El trabajo da una justa riqueza equitativa, un reparto que debe inspirar un movimiento novedoso para todos, de ninguna manera para un grupo.
Hessel defendió la causa palestina, e inspiró los movimientos novedosos de Europa, tras haber sido en 1948 el que redactó la Carta de la ONU. Hessel entronca con aquella sensata propuesta de los indignados de 1968: “la imaginación al poder”.
Perón amortizado en 1973 se había encontrado con su amigo Mao en China, que le mostró la similar cueva de tierra y piedra tallada donde moraban cada noche con su esposa, como el otrora dormidero en la montaña, “para que el oropel de los Palacios no le tentara olvidarse del origen de su lucha”. Perón seguiría intercambiando cartas con su amigo el General Eisenhower; extrañando los jóvenes que cursamos sociología del poder con el General en Puerta de Hierro. Allí plasmo sus ideas en “La comunidad organizada”, tras la lección que volcó en “La fuerza el derecho de las bestias”. En 1974 culminaría en el “Modelo Argentino para el Proyecto Nacional”. Sabía que con la indignación no basta. No bastó una Atenas sin las guerras médicas. No bastó un Versalles sin el Pueblo corriendo a la Bastilla. No bastó una Forja con Jauretche y cien más, en cada esquina sembrando indignación, sin un 17 de Octubre de 1945 pasando a nado el Riachuelo.
No bastó un México robado su territorio por EEUU -fallido Estado con más de 100.000 muertos en guerra social- atravesado por carteles de la droga que el mercado yanqui necesita para aplacar las pesadillas de su maquinaria bélica e inmisericorde. Chapaleamos en la fealdad. “Perdimos la capacidad de ensueños (el “desencantamiento” ‘de Weber). Estamos “manoseados”: no hay más libertad que para consumir medios enlatados, espionajes a granel y morir de hambre, desocupados o de aburrimiento. Ya no gobierna el “domador de reposeras”. Llegó la derecha de “logias”, eso es Macri, que olvida los idiomas aborígenes del Acta de la Independencia, redactada en aymara. Pero concluyo con Hessel: con solo indignarse no basta.
A Chávez Frías, lo envolvieron y cuando menos lo pensó, estaba envenenado con la muerte cercana por no cuidarse de sus cuidadores, algunos estaban en Miraflores, la casa ignorante. Ya es el pasado, la parrilla de televisoras del Estado se encargan de esto en una de sus aplicaciones, foguean tanto al comandante para que le olvidemos y resurja una mano dura que ya direcciona el campo ideológico, más no el económico. Venezuela es libertaria, a pesar de los muertos, de un bando y de otro bando.
El pueblo pasa hambre y su población no tiene para adquirir sus medicinas y proteínas, los productos ya rayan su salario mínimo.
Necesitamos de acción, no de repulsas.
Es natural que Donald Trump, vaya en contra de todo un Continente, desde México con su Golfo, el límite de la Cuenca del Caribe con Cuba hasta Cabo de Hornos, (Magallanes). Poco hicimos por reordenar los espacios geopolíticos y territoriales. Tuvimos veinte años en resguardar nuestras fronteras de los Imperios y solo nos intereso el oro y las plantas del Amazonia, un silencio largo, donde los militares sacaron sus limitaciones y empobrecieron a un pueblo. Esto no lo permitió el máximo comandante Fidel Alejandro Castro Ruz quien aconsejó hasta el nipón peruano Alberto Fujimori, hay fotos para la historia de esta reunión, las tengo en mi archivo personal.
Es un ultraje de la izquierda impune a los pueblos del Sur. Somos parte de un proyecto y parte del mundo. De allí que, debemos desarrollar nuestras habilidades y generar oportunidades de progreso. No le sigamos dando Zarpadas a nuestra libertad como pueblo originario, deseamos retomar con alegría, nuestro camino de lucha social para lograr la verdadera paz, no solo pregonarla.
Recordemos que lo que busca la veda electoral es brindarle al elector un tiempo prudencial de reflexión para ejercer su voto con sapiencia, alejado del bombardeo mediático de la propaganda política partidaria. El voto asistido en Socialismo es el corte a la libertad. El CNE, debe transformarse, no ser apéndice de un partido político.
El problema, no está en el medio sino en los modos es porque las tecnologías trajeron un nuevo canal de comunicación, como es internet, eso es cierto y bastante antiguo. Lo novedoso, y lo que la ley debió corregir, es el modo en que nos llega la nueva publicidad política.