¡Ah caramba! Guaidó trepó alto, voló a los cielos distraído de rabia y desde allá le lanzó una bola de humo al presidente Maduro con socarronería cuando expresó: Maduro no tiene "las esféricas" para ordenar su (mi) detención. ¿Y, ahora qué irá a decir Diosdado? De tan suculenta frase que alborota el ambiente y desparrama emociones friolentas que deja en el aire como un fogonazo afirmativo que hasta la primera combatiente debe entrar en fase de conflicto interno de "que pasaría si" como lo dijo Guaidó entre excusas supuestas.
Un dictador sin esféricas debe ser peligroso, muy peligroso, si de frente lo vemos, porque debe pensar diferente a los que si tienen cojonones -suena como estrepitoso- pero una alarma a tiempo, entonces allí Guaidó se iluminó de valentía y lo sabe, claro que lo sabe, quién lo va a meter preso, y esa valentía deja a Maduro volando bajo como viendo para otro lado, porque es que la política tiene que ser de varones, o es o no es y, ya, o déjame en paz sino vas a actuar que tu primitivismo que bien dicho por Guaidó, es como exacerbado y se vería feo en un dictador y es que razón tiene como él mismo dice que entró por Maiquetía y no pasó nada, pero entonces, sigue el fastidio, y Maduro sale ayer diciendo que Guaidó no ha ido preso porque se estaba esperando la orden de aprehensión que emane del tribunal y, después dijo: "El momento no ha llegado, pero llegará", bien parecido con similitud a lo que dice Trump que, todas las cartas están sobre la mesa.
¿Tiene razón Guaidó en molestarse para decir lo que dijo? Y usted qué piensa amigo -no vaya a decir que no tiene velas en ese entierro- que por eso estamos como estamos, claro que Guaidó sí tiene las esféricas bien puestas que deben ser dos , a no ser, no y no, no puede ser, más de dos. Y lo otro es que cuando de esféricas se trata, no sé porqué inmediatamente los profanadores del español piensan en cojones que, si a ello nos atenemos hay que pensar en hombría o machismo y, mire que demostrar hombría en política parece ser una táctica bien practicada por muchos de la oposición y de otros que salen del gobierno, porque de lo contrario no estarían fuera del país huyendo, pero en las buenas -ejemplos sobran.
¿Será verdad que la "dictadura" quedó en ridículo nuevamente con "este tipo de siembra de evidencia"? Parece ser que la razón de Guaidó pasa de largo y, su razón es razón para suponer que todo lo que brilla en política no es oro sin ideas que pongan al descubierto la apariencia de tramas, porque, no en toda cabeza cabe suponer como lo dice con toda claridad Guaidó cuando expresó: "La respuesta la dio TAP y el canciller portugués. (Debió decir, su excelencia al canciller portugués). Es imposible colocar material explosivo en una línea comercial europea. Y más allá, cuando viaja un jefe de Estado, hay reglas adicionales, implantadas todas con rigor", señaló. Anjá y quien vino en esa línea, Guaidó. ¿Y quién era el jefe de Estado? El jefe de Estado debió de ser él, pero como jefe de Estado no aparecía -dilema en puerta- . Acá hay que recordar la primera estrofa de la canción, Amalia Rosa, del Puma: "De Maracaibo salieron/ Dos palomitas volando/ Y a la Guaira volverán/ Pero a Maracaibo cuándo".
Lo que Maduro no aseguró fue para cuándo es la orden de aprehensión, si para este año, o quizás para el mes que viene, pero mientras, Guaidó juega con una y con la otra, claro, las tiene bien puestas y, ¿quién no? Si de Maracaibo salieron y, de quién es la culpa por nuestras culpas que Guaidó se violente, si él no es un asomado, tiene su nombre y en TAP se registró y debió aparecer en la lista que lo más seguro Diosdado buscó como Juancito Alimaña no sabiendo que quien venía era, Juan Gerardo Antonio Márquez. ¿Jefe de Estado? Enojo debió causarle tanta molestias y desconocimiento.
¡Qué Barbaridad! ¡Vaya, menos mal! Que los errores se pagan. Ni Maduro, ni Guaidó aprenden. Son lo que se dice, incansables. Guaidó a la ofensiva y Maduro a la contraofensiva. ¿Y, Diosdado? Esperando que llegue el miércoles para zumbar un mazazo. Mientras, mire por aquí, mire por allá, y Guaidó, libre.