Los ambientalistas son esenciales en la sociedad actual. Sus pensamientos y propuestas, sus acciones, sus verdades incomodas, sus ejemplos, sus denuncias, como promotores de la organización social, su trabajo voluntario o remunerado, sus investigaciones y descubrimientos. Son múltiples los aportes de los ambientalistas, ecologistas o conservacionistas. A continuación señalaremos algunos de ellos:

1. Un nuevo pensamiento que impulse un cambio de era. El pensamiento ambientalista promueve el desarrollo sustentable, la racionalidad en la utilización de los elementos naturales, la coexistencia con otros seres vivos, los derechos humanos ambientales y los derechos de la naturaleza, los derechos animales. Son los visionarios de una nueva civilización. Por eso sus ideas son incomprendidas o chocan con el "estatus quo", algunas veces parecen disparatadas; pero el tiempo nos ha dado la razón.

2. Promueven nuevos valores: Son predicadores de una nueva sociedad, basada en lazos de respeto a todas las formas de vida, valores como el humanismo, la solidaridad, la igualdad incluso con otras especies (el principal choque con los no ambientalistas), entre otros valores. Volvernos a considerar unas criaturas más en la trama de la vida y no los amos del universo.

Los Guardaparques Voluntarios y otros grupos ambientalistas promueven planes vacacionales y actividades de recreación y educación ambiental en las comunidades que conviven con los parques. Fotografía Iván Piña.

1. Sus verdades incomodas: Cuestionan nuestros estilos de vida. El consumismo desenfrenado, el derroche, el consumo sin sentido, las modas, el acumular riquezas sin una finalidad, esto les genera a los ambientalistas constantes choques y diferencias incluso con miembros de su familia, de la comunidad, en el trabajo y a todas partes donde van. Con la verdad ni temo, ni ofendo*

2. Sus denuncias: Los militantes realizan denuncias formales ante las autoridades competentes y las refuerzan en los medios de comunicación. Es necesario que todos los defensores de la vida formalicen denuncias para no dar excusas a los "organismos competentes" de que no actúan porque la ciudadanía no denuncia.

3. Promotores de la organización social: Los defensores de la vida, no deben actuar solos, primero porque la albor es muy compleja, excesiva y también porque ser ambientalista puede ser peligroso en algunas latitudes. Los ecologistas promueven la organización, expansión y consolidación de grupos, brigadas, fundaciones y asociaciones civiles, a esto va acompañada de la capacitación y motivación permanente. Ofrecen una gama de actividades para las personas en general. Por ejemplo muchas personas conocen algunos parques, museo y lugares de interés gracias a que un movimiento local, organizó la actividad a un costo muy bajo, e incluso gratuitamente. Los conservacionistas deben promover que la ciudadanía visite las áreas protegidas en visitas guiadas para sensibilizarlos.

El rescate animal y la sensibilización es tarea de los ambientalistas Fotografía Iván Piña.

1. Apoyo a las autoridades: Gran parte del trabajo ambientalista, consiste en reforzar o apoyar la labor de las autoridades ambientales locales y nacionales. Ciertamente somos críticos de la gestión ambiental, de la corrupción, la ineficiencia y el burocratismo; pero también somos los primeros que extendemos nuestras manos para colaborar con reforestaciones, inspecciones, charlas en instituciones, participación en actos, eventos de toda clase, investigaciones, etc. Es una relación de amor-odio o apoyo-critica que desarrollamos con los entes ambientales; pero siempre con buena intención y con un saldo positivo entre los reclamos y la participación. El asunto es que a ningún gobernante, ni responsable de instituciones les gustan las críticas.

Visitas guiadas y sensibilización a todas las edades es otra de las tareas asumidas, siempre apoyando a las instituciones. Brigada Guardaparques Voluntarios en el Parque Temático Bosque Macuto. Fotografía Iván Piña.

1. Liderar con el ejemplo**: Somos el ejemplo viviente de las cosas que proponemos. Muchos son veganistas para promover la alimentación sana, muchos reciclan, ahorran agua y energía, cosechan agua de lluvias, practican la agroecología y/o agricultura familiar, no comen carnes de animales silvestres, visitan con frecuencia las áreas protegidas, participan en diferentes iniciativas de conservación. Vivimos los que proponemos, ojalá muchos empresarios y políticos tuvieran la misma coherencia entre la palabra y la acción que tienen los ambientalistas. **Este es el lema de los Guardaparques de Fundación GUARDEAM aplicable a la vida.

2. La mayor parte de su labor es voluntaria: El ambientalismo es muy ético. Tanto que la labor es voluntaria, la gente milita en las organizaciones sin esperar un pago. En aquellas fundaciones o corporaciones que contratan personal, el pago es realmente inferior a lo que podría ganar en otros trabajos. En el caso de los Guardaparques, trabajadores del aseo urbano, técnicos y funcionarios de entes ambientales públicos, investigadores y docentes universitarios, los sueldos son miserables, pero el compromiso y el nivel de conciencia mantiene a gran parte de los defensores haciendo esfuerzos para llevar su labor a la par de buscar otras fuentes de ingresos para mantener a sus familias. Este es el "talón de Aquiles" del trabajo ambientalista en el mundo: la falta de una remuneración digna y el voluntarismo eterno, que hace que los militantes y profesionales ambientales al no poder satisfacer sus necesidades elementales, renuncien o se retiren del activismo en las organizaciones e instituciones, (no así de la práctica cotidiana en sus hogares) por lo que con frecuencia se pierde el talento humano en el movimiento ambientalista.

3. Producción de materiales, contenidos e innovaciones: Con frecuencia las organizaciones ambientalistas editan publicaciones (revistas, periódicos, libros, manuales, afiches, folletos, etc.) generan contenidos audiovisuales, innovan en técnicas de educación ambiental, recreación o comunicación. Todo esto con el fin de llevar el mensaje ambiental a más personas y estimular la participación ciudadana.

Fundación GUARDEAM, ha editado varias publicaciones Fotografía Iván Piña.

1. Investigaciones: El conocimiento de las especies, ecosistemas sitios de interés turístico se deben a los naturalistas e investigadores, que en diferentes épocas de la humanidad han realizado exploraciones, descubrimientos, viajes y se han esforzado en mostrar estas maravillas naturales. Gracias a esta labor se han descubierto fármacos y vacunas, desarrollos turísticos y otros beneficios económicos para las sociedades. Lamentablemente no hay una retribución a los ecosistemas y menos a los movimientos ecológicos locales.

2. Investigaciones de problemas ambientales: Las investigaciones que hacen los profesionales del ambiente y los aficionados permiten mejorar nuestra calidad de vida. Por ejemplo cuando denuncian las descargas de sustancias contaminantes en el agua de consumo, empresas que hacen emisiones o vertidos ilegales, deforestación de bosques, o cuando promueven la utilización de ciertas especies con fines medicinales o para consumo, mejorarán grandemente el bienestar de las comunidades.

Oso Andino "Guamito" (Tremarctos ornatus) rescatado herido en las montañas de Rio Claro, estado Lara, Venezuela, gracias a la acción de los Guardaparques Voluntarios, atendiendo al llamado de las Comunidad El Guamito y juntas lograron activar a las autoridades. Fotografía José De Sousa.

1. Somos la voz de quienes no pueden defenderse: Denunciamos el maltrato animal, la deforestación, la extinción de especies, los experimentos con animales, apoyamos a comunidades aisladas que no pueden acceder con facilidad a los órganos de justica, o incluso apoyamos a comunidades urbanas y/o rurales que no saben hacer una denuncia o tiene miedo de denunciar los delitos ambientales que los afectan, compartiendo con ellos los riesgos. Recordemos la cantidad de ambientalistas que han sido asesinados por enfrentar proyectos desarrollistas o mafias madereras o cazadores furtivos (Chico Méndez, Berta Cáceres, entre otros).

2. Enfrentamos proyectos desarrollistas, extractivistas, a las mafias depredadoras de recursos naturales, a gobiernos, a empresas y particulares que hacen daño al ambiente. La gente nos pregunta ¿porque asumir tantos riesgos a cambio de nada? ¿Por qué perder la tranquilidad o la vida, enfrentando proyectos que de todas maneras será ejecutados? Siempre respondemos que:

   1. Alguien tiene que luchar por la justicia y la vida.

   2. Queremos dejar un legado a las generaciones futuras.

   3. El enemigo se crece cuando la población retrocede o tiene miedo.

   4. Nuestro nivel de conciencia y compromiso no nos dejaría tranquilos, sino enfrentamos determinadas situaciones.

Algunos simplemente nos contestan que estamos locos. Y de nuevo respondemos:

¡Loco es todo aquel que enfrente el orden mundial. Sus injusticias y desequilibrios, sus abusos y hegemonías!

¡Loco es aquel que no quiere dejar al mundo tal y como está sin generar cambios positivos!

¡La normalidad es la norma del mal!

¡Loco es el que pide respeto por todas las formas de vida!

Sigamos haciendo nuestro papel como ambientalistas. Reconozcan o no, nuestra labor; lo importante es luchar por un mundo mejor para nuestros hijos.

Los riesgos no son a cambio de nada, son por la vida misma, que es invalorable.

* Frase del prócer Uruguayo José Gervasio Artigas