Pero cómo va haber crisis en Venezuela hombre, eso jamás, y además imposible y, mire usted que es tan así que, hasta una nueva AN tendremos a partir del siete de diciembre, aunque posible es que si la oposición obtiene la mayoría: pudiéramos tener un nuevo presidente autoproclamado si es que a Guaidó no le sale del forro de sus bolas pensantes hacer lo que está haciendo Trump con su país y, diga con voz proclive que, no reconoce la nueva AN por fraudulenta y se afinque en, no, no, e imponga como castigo atractivo a su medio con sentimientos políticos que corra por el mundo, que no entregará ninguna de sus presidencias que son dos y, entonces si pudiera entrar el país en una crisis institucional, emocional y personal y, lo que pudiera ser una alegría prematura esperada, se convertiría en una tragedia vivencial que como nueva, pondría a pensar a los políticos y analistas diversos, y a los que están sumamente entusiasmados e interesados con una democrática AN creada por el voto masivo del seis de diciembre, por lo que la ansiada paz pluralista se alejaría del sentir patrio y lo más seguro es que, tendrá el apoyo irrestricto de los Estados Unidos y de todas las naciones y de la mayoría opositora que están con Guaidó.
Ahora bien, verdad es que, en el país habría crisis como se quiera llamar y singularizar en lo posible, dada alguna ausencia necesaria o entredicha que desplome o acongoje el desarrollo del venezolano en cualquiera de sus formas existenciales, como por ejemplo que no tuviéramos comida, ni cualquier otro elemento que perturbe nuestras políticas de país potencia que somos -¿o no lo somos?- epa y sin reír, que la risa sobra, no es el momento pues, tenemos agua por demás para hacer con ella lo que queramos, pero, que esté mal administrada es otra cosa, pero un centenar ríos tenemos, lagunas hay y hasta subterránea tenemos una, que en Margarita no haya agua es comprensible y que llegue a las casas cada mes, también es comprensible y, quién no nos comprenda también es comprensible, pero somos un caso aislado y, tenemos mucho pescado que sacan de la mar y que no podamos comerlo por lo caro que está su adquisición, también es comprensible pues, no tenemos dólares, lo que no es comprensible, pero dólares hay y, solo los pobres, parece mentira, pero no tienen y, por qué será, no se sabe, pero es comprensible y, es que todo acá se reduce a saber, pero no es problema de crisis, porque crisis no hay, sí hay de todo, tenemos mucho mar, cielo, estrellas y muchas ganas de coexistir y mucha paza sin hambre, ¿hambre?
Tenemos gas y en abundancia, pero que esté escaso para el público es un problema del gobierno, pero solo eso que, no es para tanto, porque leña tenemos y quejarnos no parece nada pretencioso ni sobresaliente y además quemar el gas trae contaminación. Así que crisis, cuál crisis, ¿dónde está?
La gasolina llegó nuevamente para quedarse y más que se va Trump, se irá también su guerra económica, si es que la hubo y la hay, pero pronto seremos felices sin Trump y con una nueva AN -¿y quién será el nuevo presidente de la nueva AN? Piense y calle, para que no haya crisis inducida adelantada y Diosdado se puede molestar si no es él, aunque calladito lo tienen, pero Diosdado nació para eso y para combatir alguna crisis extemporánea que a veces se cuela sin que el gobierno se dé cuenta, por qué será.
¿Qué otra crisis puede haber en este país, si somos maravillosos, mejores que nosotros, quién? Entonces, algunas crisis son pasajeras, y el dólar no deja ruina, ni crisis, deja más ricos, aunque viven quejándose de lo mal que está el país, pero no ellos.
Entonces a vivir, pero eso sí, cuídese que crisis no hay, podrá haber de todo, pero crisis, dónde.
Y ni se les ocurra no ir a votar el seis de diciembre, pero para ir a votar nulo, parece increíble, pero la ira fluye libre, que de ustedes depende que tengamos una nueva AN y sin Guaidó y sin crisis.
Esteban Rojas