Rubén Darío, heterónomo de Félix Rubén García-Sarmiento (Metapa, Nicaragua, 1867-León, Nicaragua, 1916), el conocido "Príncipe de las letras hispanoamericanas" en "A Colón" (Madrid, España, 1892) acomete desde la perspectiva literaria una crítica harto significativa y hasta sorprendente en atención a cierta tradición hermenéutica de su producción literaria de corte modernista con una lírica supuestamente evasiva, referida a princesas y cisnes como referencias mitológicas greco-latinas y la didascálica de la belleza pura; aquí, en cambio, formula una evidente denuncia del proceso político y cultural latinoamericana y caribeña. Ello mediante el recurso de la poesía, entendida como un discurso apofántico (Ferrater-Mora, 2004).
Esto es, que, al fragor de las imágenes, los verbos, metáforas y símiles, el texto referido contiene verdades generales acerca de la personalidad moral del aborigen sometido o sojuzgado en el período colonial, que trastocó su ontología y axiología diáfana como riachuelos de límpidos manantiales; un ser virtuoso, moral y socialmente significativo; por lo cual es de una belleza admirable. Cuestión que se tenía delante como como algo patente de lo real dado desde el punto de vista de la geografía física, hidrografía y demás bellezas paisajísticas, todo lo cual hubo de ser roto como consecuencia del contacto desarticulador con la cultura europea, bélica y viciosa.
Como fuere, de ello emergió de manera traumática o en lucha desigual una cierta identidad mestiza con la preciosa lengua castellana y un imaginario político-cultural característico –un nuevo género humano, diría el Libertador Simón Bolívar en la Carta de Jamaica, 1815-, como parte de la configuración genésica-antropológica de la entidad sociopolítica de nuevo tipo denominada Latinoamérica, un subproducto de la conquista y colonización, en un interregno de tiempo que va de 1492 a la contemporaneidad; y que demanda espacios para desplegar sus potencialidades.
Sorprende inicialmente que, siendo un poema de ocasión, leído en Madrid en 1892 a propósito de la hazaña del Reino de España celebraba o conmemoraba el Cuarto Centenario del Descubrimiento e incluido luego en el volumen "El Canto Errante" (Madrid, 1907), haya presentado una propuesta que se pudiera decir iniciática de lo que hoy se conoce en medios académicos y políticos de tipo contraculturales como estudios descoloniales o decoloniales; tomando distancia el gran bardo de cualquier recurso al ditirambo que, muy probablemente el sector diplomático que invitara a Darío como delegado nicaragüense a tal evento, esperaba; esto sea dicho como parte de una especulación que se espera no sea espuria, pero constituye una hipótesis plausible. Más aún si se recuerda que en aquella época España padecería la crisis de sus posesiones de ultramar, envuelta en una guerra que desencadenaría en la crisis de identidad tratada por la llamada "Generación del 98", que revelaría lo que Unamuno dio en llamar "La España invertebrada" y también José Ortega y Gasset.
"A Colón", de acuerdo con Arturo del Villar en "Rubén Darío y la crítica del descubrimiento" (disponible en línea) comprende 56 versos dodecasílabos de seguidilla y 14 serventesios, representa un "Lamento por América"; aunque también una vez leído desde una perspectiva sociocrítica puede ser considerado una reafirmación americanista que ya había iniciado don Andrés Bello con su Silva a la agricultura de la Zona Tórrida; por su parte Rubio (2014), analiza técnicamente el referido poema de Rubén Darío de manera amplia, pero que no es este el lugar ni el momento de citar in extenso en este aparte.
Salvador Bernabéu Albert al referirse a ese contexto destaca que:
"Es entonces cuando aparece en el horizonte el año 1892 y desde diversos colectivos, asociaciones, grupos culturales, periódicos, etcétera, apremian a los políticos para no desaprovechar la ocasión del IV Centenario del Descubrimiento de América con el principal propósito de impulsar las relaciones internacionales, patrocinar eventos de impacto universal y consolidar la Monarquía y el sistema político de la Restauración. En España, el IV Centenario coincidió con un proceso de elaboración de la memoria colectiva que subrayó ciertas épocas y sucesos claves, privilegiando el reinado de los Reyes Católicos, reverenciados como fundadores de la nación española (Álvarez, 2001). Además, si la memoria era considerada como la fuente de toda identidad, se va a «construir» la española como cabeza y madre de una comunidad de naciones hispánicas en torno a tres ejes: la lengua, la religión y el glorioso pasado imperial. La España de 1892 se vuelca con el Centenario no sólo como un ejercicio erudito y de rescate del ayer, sino como una viga maestra en la construcción de la identidad nacional y una apuesta por la superación del aislamiento y el ostracismo internacional (Marcilhacy, 2010)".
Más adelante agrega que en esa época:
"Los congresos y las exposiciones fueron uno de los capítulos más interesantes del IV Centenario. En total fueron once (Americanista, Pedagógico, Geográfico, Jurídico, Mercantil, Militar, Literario, Africanista, Librepensador, Espiritista y Católico), a los que hay que añadir otros dos proyectados (Oriente y Médico). El más importante de todos fue el Americanista, inaugurado el 7 de octubre de 1892 en La Rábida. En Madrid se había celebrado años antes, en 1881, el IV Congreso, pero en esta ocasión, por lo simbólico de la fecha, se reunieron en Huelva buena parte de los mejores americanistas del momento, como ya señalamos. Y en cuanto a las exposiciones, hay que destacar la EHA7, inaugurada oficialmente el 12 de noviembre de 1892 junto a una segunda EHE8, que ocuparon las salas del recién inaugurado Palacio de Biblioteca y Museos Nacionales, situado en el paseo de Recoletos, y que quedó como uno de los edificios más importantes del IV Centenario. El 3 de febrero de 1893 se realizó un banquete de despedida en honor de los delegados americanos, siendo las colecciones llegadas del Nuevo Mundo sustituidas por una EHNE, motivo principal de esta publicación electrónica".
Es en tal contexto que nuestro poeta lee su contribución "A Colón", reafirmando con ello su tesis en torno a que el poeta se constituye en intérprete del presente, porque sus estrofas ponen en evidencia el sentido crítico de la mirada sobre el entorno. Así éste se ubica lejos de ser un "imitador", acusación formulada por Platón en el libro X de la República; por el contrario, logra penetrar una realidad velada al observador desaprensivo, pues, la rima de unos versos expresa, si bien logrados, un movimiento de la voluntad en el tiempo, parafraseando a Heidegger en su "Ser y tiempo", 1927, dado que la palabra contiene la morada del ser; pero no de manera neutra, sino comprometida, por ello Darío toma partido por una las facciones en la lucha permanente por el existir.
Así, se compromete con la suerte de Latinoamérica y la valora como entidad geohistórica, una emanación híbrida producto de la cópula de la simiente indígena o nativa, originaria, africana y europea, llegando a ser de esa suerte una nueva constelación en el sistema-mundo de la modernidad tardía cuyo sentido de la historia reinterpreta críticamente Darío en aquella época finisecular de 1892 a través de un instrumento intelectual privilegiado como es la poesía: recurso hermenéutico que siempre ha acompañado la historia de la humanidad con el fin de hacer del mundo una morada algo más digno y confortable de habitar; de tal manera que de acuerdo con las mismas palabras de Darío (1948) en el prólogo a su obra "El canto errante":
"La poesía existirá mientras exista el problema de la vida y de la muerte. El don de arte es un don superior que permite entrar en lo desconocido de antes y en o ignorado después, en el ambiente del ensueño o de la meditación. Hay una música verbal. No hay escuelas; hay poetas. El verdadero artista comprende todas las formas. Toda la gloria y toda la eternidad están en nuestra conciencia" (p. 27).
De esa manera, sostiene a su vez Pere Gimferrer (2002) que Rubén Darío "… no puede dejar de ser al propio tiempo, historicista y personal" (p. XV); esto es, que su literatura tiene de natural un dejo de nostalgia y lamento frente a la historia latinoamericana y caribeña en la línea de la experiencia subjetiva. Y, en consecuencia, descrita de forma introspectiva-vivencial y así fundada en el continente la ontología de lo actual, siempre dominada por la realidad de la colonización y el sojuzgamiento.
Sin embargo, también es al propio tiempo un canto esperanzado en que el ser negado que late en el arco existencial de las culturas aborígenes, afrodescendientes, hispanas y europeas en general, puedan en la contemporaneidad desplegar sus potencialidades creadoras de bienes materiales y simbólico-culturales, que permitan reafirmarse como entidad sociopolítica en el contexto sociopolítico actual, de allí que evoque sus antiguas glorias; una perspectiva que hoy ha venido a retomar el movimiento de la epistemología del sur que hallan uno de sus antecedentes más luminosos en los versos de los cantos de Darío y en su prosa más emotiva bien de contenido profano o mitológico e imágenes que recogen pléyades de ideas aurorales de los actuales movimientos decoloniales.
De allí que cuando en 1892 visita París para el cuatricentenario del navegante genovés que partiera hacia el mar tenebroso con bandera española (1492-1892) sostiene Gimferrer (2002) que el joven Rubén Darío:
"… se propone ser, no solo el nuevo poeta que necesitaba la América hispana, sino el poeta que España no tenía y, más aún, un poeta capaz de medirse con Verlaine. Es decir, no sólo un poeta americano, sino poeta español y europeo (y particularmente francés), todo a un tiempo. Mucho parecía para quien no conocía las obras de arte europeas (pintura, escultura, arquitectura, decoración) sino por defectuosas reproducciones o imitaciones, ni el idioma literario de la antigua metrópoli sino por lecturas, ni qué cosa era ser poeta en París sino por lo que desde Nicaragua, Valparaíso o Buenos Aires de ello saberse entonces. Que consiguiera plenamente su triple propósito –americano, español y europeo- es la prueba más elocuente de su inspiración y lucidez" (Pp. XIX-XX).
De hecho, según esta fuente la bitácora comprendió el siguiente itinerario para un sueño:
"Darío en 1892 se encuentra en Guatemala como "Secretario" de la delegación que el gobierno de Nicaragua envía a España para las fiestas del cuarto centenario del descubrimiento de América. Embarca el 23 de junio en el vapor Barracuta. El 29 de julio llega a La Habana, donde pasa tres días y conoce personalmente a Julián del Casal. Llega en agosto a la Coruña, pasa a Madrid, donde conoce a Juan Valera, Salvador Rueda, Campoamor, Castelar, Menéndez Pelayo, Núñez de Arce y Emilia Pardo Bazán. En noviembre regresa, con escala en La Habana y en Cartagena de Indias" (ob cit., Pp. XXV-XXVI).
Groso modo los párrafos anteriores hacen parte de la crónica en que se enmarca el objeto de las presentes meditaciones, una las creaciones literarias más elevadas por su manifiesto logro estético y político de este nicaragüense universal, cuyo compromiso con la historia, cultura e identidad latinoamericana y caribeña se revela de manera indubitable. En esto mantenemos una diferencia con algunos académicos muy apreciados, como se puede apreciar en un texto que compartimos con el doctor Cristian Javier López (Brasil) y la doctorante Yetzabeth Pérez Anzola (ULA-Mérida, Venezuela), el articulo artículo, "A COLÓN": aproximación hacia el análisis de las resignificaciones del pasado de América y hacia una crítica descolonizadora, (FERMENTUM. VOLUMEN 31, NÚMERO 91, mayo-agosto 2021. ISSN 07983069. Editada por el Centro de Investigaciones HUMANIC, Universidad de Los Andes, Mérida-Venezuela. www.saber.ula.ve/fermentum), cuyo resumen es el siguiente:
El presente artículo tiene el propósito de establecer una aproximación teórico-metodológica a la noción de poema histórico como una expresión de la literatura híbrida de historia y ficción. El texto presenta, así, un análisis del texto lírico "A Colón", de Rubén Darío (1867-1916), desde una perspectiva crítica que lo aproxima a los presupuestos teóricos de la modalidad crítica/deconstruccionista de la novela histórica propuestos por Fleck (2017). Diferentes perspectivas de lectura del discurso literario son apuntadas con base en el uso connotativo del lenguaje de cual se vale el texto poético y de las prerrogativas de Martínez (1963), Del Villar (2017), Nuñez Ramos (2000), entre otros. El análisis permitió dar cuenta de las múltiples resignificaciones históricas presentes en torno al hecho del "descubrimiento" de América. Se concluye que, en el universo poético-ficcional del texto, el sujeto discursivo asume una postura que nos posibilita lecturas diversas en relación al pasado histórico de América, revelando así la polisemia del arte literario.
Palabras clave: Resignificaciones del pasado; Poema Histórico; Rubén Darío; lenguaje literario; Descolonización.
Referencias
Albert, S. B. (S/F). Contexto histórico: visión de Europa. Escuela de estudios Hispano-americanos. Disponible en línea. Eehaa.csic.es
Darío, R. (1948). El canto errante. Segunda edición. Colección Austral. Espasa-Calpe Argentina. S. A. Buenos Aires-México.
Gimferrer, P. (2002). Rubén Darío. Introducción y selección de Pere Gimferrer. Grandes Clásicos de la Literatura. Biblioteca El Nacional. Editorial Planeta. S. A.
Ferrater-Mora, J. (2004). Diccionario de Filosofía. 4 tomos. Editorial Ariel. Barcelona.
Heidegger, M. (1927). Ser y tiempo. Edición electrónica de www.philosophia.cl/ Escuela de Filosofía Universidad ARCIS.
Rubio, D. (mayo, 2014). Poemario. Disponible en línea. En http://poemario.com /colon/
Platón (Trad. 1968). La República. Aguilar, S. A. de ediciones Juan Bravo, 38.
Madrid. España.
Cristian Javier López, Yetzabeth Pérez Anzola, Luis Beltrán Saavedra Mata: "A COLÓN": aproximación hacia el análisis de las resignificaciones del pasado de América y hacia una crítica descolonizadora "A COLÓN": an approach towards the analysis of the re-meanings of the past of America and towards a decolonizing critique
FERMENTUM. VOLUMEN 31, NÚMERO 91, mayo-agosto 2021. ISSN 07983069. Editada por el Centro de Investigaciones HUMANIC, Universidad de Los Andes, Mérida-Venezuela. www.saber.ula.ve/fermentum.