Observando la página que publica BBCMUNDO referente al 4 de Febrero de 1992 en la cual le pide a los lectores su opinión sobre la fecha, de vaina no eché la bilis sobre la alfombra de coleto donde coloco mis pies al levantarme. Todos aquellos “sufridos opinadores de oficio escribieron sobre el terrible dolor que sintieron por la patria y de los que murieron en tal fecha”. ¿Dónde se encontraban los susodichos cuando el Caracazo, la criminal tragedia de Yumare, de Cantaura, las torturas de la Digepol y la Disip, la muerte de jóvenes lanzados desde helicópteros, los torturados en Los Chaguaramos, los muertos de El Porteñazo y del Carupanazo, la tortura y muerte de Alberto Lovera, de Rudas Mezzone, de Noé, de Jorge Rodríguez, de los centenares de desaparecidos que provocaron los “morochos” AD y COPEI, invadiendo apartamentos en el 23 de Enero y en otras partes de la ciudad, asesinando a adolescentes que manifestaban en las calles. Además de los perseguidos políticos de AD y de COPEI. Las inmoralidades de los ADECOS DESDE MIRAFLORES CON SUS BARRAGANAS DE TURNO, los NUEVOS RICOS de Prados del Este, de Manzanares, de Santa Fe, de Caurimare, de Santa Paula (no todos, por favor). Esos también fueron criminales de la patria que se enriquecieron robando las arcas del Estado y compraron lujos que nunca habían tenido. La Revolución debe comenzar a indagar sobre estos hechos de corrupción y ladronismo, donde elementos que vivían modestamente de pronto comenzaron a adquirir riquezas gracias a que los colocaron donde “haiga”. La Revolución debe hacer un censo, que lleve al país, a la sociedad sana a saber de dónde sacaron esos nuevos ricos tan inmensos recursos monetarios. Antes de caer Pérez Jiménez, el país venezolano no contaba con tantos miserables ladrones de cuello blanco. AD Y COPEI los financiaron. Mientras los pobres se hacían menesterosos, los usureros, los ladrones, los patriarcas, los personeros de la politiquería puntofijista, se convertían en elementos del libro Forbes. Ésos son los padres de los que escriben en la página de BBCMUNDO. No queda la menor duda de que BBCMUNDO supo escoger a sus “opinadores”, para que el mundo crea la estúpida mentira, matizada de odio, de pensamiento marceliano, de injurias, de maquiavelismo. Empero, la realidad es otra. El 4 de Febrero de 1992, gracias a la heroica acción de un grupo de militares rebeldes, el país despertó del letargo. ¿Y cómo rebelarse sin entender que en el hecho se puede perder la vida? Solamente un imbécil va a la guerra creyendo que regresará sano y salvo, si no que se lo pregunten a los familiares de los tres mil y pico de soldados estadounidenses muertos en Irak, porque eso es la guerra. Los soldados VENEZOLANOS que murieron en la acción, fueron hombres valientes, de profundo corazón patriótico. Entendieron el riesgo que significaba sacarse el yugo que oprimía a la patria. Los que murieron el 4 de Febrero de 1992 no pueden llamarse muertos, porque gracias a ellos otros viven, alimentados por su accionar bolivariano. Esos soldados no eran “niños de papá”, eran, eso sí, muchachos de los barrios, de la provincia… los únicos que componen los batallones de la gloriosa Fuerza Armada Nacional. Ninguno de los querubines que escribieron en BBCMUNDO sabe lo que es un ejercicio militar, porque en Venezuela los hijos de los ricos no van al servicio militar. Por eso nos resulta hipócrita el llantén que dicen sentir. En este mes de febrero a esos jóvenes que dieron su vida en pro de la patria, se les hizo un gran honor militar, en donde el pueblo civil se hizo partícipe junto al otro pueblo uniformado. Conjunción que denota un hecho: PUEBLO Y FUERZA ARMADA EN BUSCA DE UN MEJOR DESTINO para la patria Bolivariana. “Oligarcas dejad que reposen en paz, aquellos que jamás tuviste el honor de conocer”.

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