Si hay un tema que lamentablemente no pasa de moda dentro de la sociedad venezolana, es la violencia física y mental en contra de la hermosa mujer de Venezuela, sin embargo, aunque la violencia nunca jamás resuelve un problema de la vida, a veces la legendaria vida terrenal justifica el uso de la violencia.
En menos de un minuto, el hombre puede pasar de una suave caricia de terciopelo en el estado Anzoátegui, a un salvaje puñetazo lleno de arrechera en el estado Zulia, y en menos de un segundo, la mujer puede pasar de un simple hematoma en el estado Carabobo, a un traumatismo craneal en el estado Táchira.
Claro que hay violencia en contra de la mujer de Venezuela, pero a veces hay que llegar a la génesis de la existencia humana, para encontrar el origen del pecado.
Yo quiero que el pueblo cristiano venezolano, que realmente aceptó a Jesucristo como su único amor, como su único salvador y como su único Dios, hoy decida analizar tanto el machismo como la violencia en contra de la mujer, desde una perspectiva bíblica, comprendiendo que la Santa Biblia es la Palabra de Dios.
Alguna vez te has preguntado el motivo por el cual nuestro señor Jesucristo, no tuvo novia, no tuvo esposa, no tuvo hijos y no formó su propia familia de sangre.
Ni durante su adolescencia, ni durante su juventud, ni durante su adultez, Jesucristo nunca tuvo novia, nunca tuvo relaciones sexuales con mujeres, nunca quiso contraer matrimonio, nunca quiso ejercer la paternidad, y Cristo nunca quiso reproducirse biológicamente, durante sus 33 años de vida en la fértil Tierra.
Jesucristo era totalmente un Ser Humano, su cuerpo masculino estaba capacitado biológicamente para sentir el placer sexual, pero Cristo rechazó caer en la tentación mundana del sexo, y como Dios encarnado fue muy casto en la Tierra.
Aunque Jesucristo gozó de gran aceptación entre las mujeres que conocieron su ministerio y sus milagros, la Santa Biblia no reconoce que Jesús se enamoró sexualmente de ninguna mujer, y de hecho, la Biblia demuestra la castidad sexual de Jesús hasta su muerte en la Cruz, demostrando su eterna virginidad, pues aunque Jesús pudo haber tenido coito con un gran número de mujeres, nunca jamás usó su órgano sexual ni para copular, ni para penetrar, ni para fornicar.
Desde las sensuales prostitutas de las calles hasta las sensuales damiselas del Imperio Romano, todas las mujeres querían quitarle el calzoncillo, desnudar y amar sexualmente a Jesucristo, pero mi amado Cristo nunca jamás permitió que una mujerzuela le quitara su calzoncillo, nunca jamás permitió que una mujer desnudara su sagrado cuerpo, y nunca jamás permitió ser amado por una mujer.
Cristo Jesús nunca fue mujeriego, nunca fue casanova, y Jesucristo siempre fue sexualmente un hombre virgen, nunca derramó su semen en vagina de mujer.
Yo creo que el verdadero cristiano debe reflejar la personalidad de Jesucristo, porque si los venezolanos decimos ser cristianos, pero hacemos cosas en nuestras vidas que Cristo nunca jamás hizo en su vida, entonces no podemos ser llamados cristianos, porque no estamos reflejando el carácter que tuvo Jesús en la Tierra.
Porque Pablo y Pedro dijeron bonitos versos e hicieron bonitas obras, pero el cristiano no debe imitar ni a Pedro ni a Pablo, el buen cristiano debe emular la vida de Jesús, y la Santa Biblia demuestra que Cristo Jesús nunca tuvo relaciones sexuales con ninguna mujer, por lo que debemos seguir solo el ejemplo de Cristo.
La gente mundana y silvestre podría preguntar: ¿Por qué Cristo nunca tuvo relaciones sexuales con mujeres? ¿Acaso Jesús era homosexual o gay? ¿Por qué Cristo rechazaba tener coito y evitaba acostarse con las mujeres de su época?
Jesucristo no fue gay, no fue homosexual, Jesucristo es el hijo de Dios, Rey de reyes, Señor de señores, un caballero que no vino a la Tierra por una pantaleta, sino que vino a la Tierra para expiar nuestros pecados en la Cruz del Calvario.
Vamos a compartir algunas citas de la Santa Biblia, que nos permitirán comprender bíblicamente, el significado de la mujer en las Sagradas Escrituras.
"He hallado que la mujer es más amarga que la muerte, porque ella es como una red, su corazón como un lazo y sus brazos como cadenas. El que agrada a Dios se libra de ella, pero el pecador cae en su trampa" Eclesiastés 7:26
"Uno de cada mil hombres es bueno, pero no encontré a ninguna mujer buena" Eclesiastés 7:28
Hermanos, el libro bíblico del Eclesiastés fue escrito por el Rey Salomón, y la Biblia afirma que Salomón tenía más sabiduría que ningún otro hombre en la Tierra, pues Dios le otorgó sabiduría, gran discernimiento y amplitud de corazón.
Salomón dijo que la mujer es más amarga que la muerte, dijo que no existe una mujer buena, y dijo que la mujer es una trampa donde caen los pecadores.
Si reconocemos que la Santa Biblia es la Palabra de Dios, y si reconocemos que Dios le dio a Salomón toda la sabiduría humana para saber discernir en la vida, entonces debemos reconocer que la mujer es más amarga que la muerte, que no existe una mujer buena, y que la mujer es una trampa donde caen los pecadores.
También tenemos el Libro bíblico llamado Eclesiástico, escrito por Ben Sirac y aceptado oficialmente por la Iglesia Católica, por lo que como millones de venezolanos dicen ser cristianos católicos, vamos a compartir algunos textos:
"Por la mujer comenzó el pecado, por culpa de ella morimos todos. No hay peor maldad que la de la mujer. Cualquier maldad es poca, comparada con la de la mujer" Eclesiástico Capítulo 25
"Vale más maldad de hombre que bondad de mujer" Eclesiástico Capítulo 42
Debemos reconocer que fue por culpa de la desobediencia de una mujer llamada Eva, que el pecado entró en la Humanidad, ya que fue Eva quien comió del fruto prohibido y desobedeció a Dios, lo cual manchó de pecado a nuestra existencia.
La perfecta creación divina de Dios, no concibió originalmente a la mujer como parte de su plan de vida en la Tierra, pero fue por la inseguridad y el aburrimiento de Adán, quien le confesó a Dios que estaba sintiendo la soledad, y debido a que en ese momento Adán como Hombre contaba con el favor y la gracia de Dios, pues fue el mismo Dios quien para complacer el capricho de Adán, decidió crear a la mujer de su costilla, por lo que lamentablemente fue por culpa de Adán que nació la mujer Eva, y fue por culpa de Eva que entró el pecado en la Humanidad, porque la primera desobediencia humana en contra de Dios fue de la mujer, aunque la sociedad generaliza el pecado en Adán y Eva.
La mujer es fuente de pecado en la Tierra, y toda criatura que nace en la Tierra por culpa de la indecencia de la mujer, nace con la suciedad de la mancha del pecado desde su propia concepción biológica y humana, por lo que todos los días se multiplica el pecado de la Humanidad, ya que la mujer fecunda y engendra el pecado a través de esa nueva criatura, que nace manchada con el pecado de la desobediencia de Eva, y aunque algunas religiones intentan borrar el pecado con el bautismo, olvidan que el bautismo es solo una señal y confesión exterior de la creencia personal, pero por dentro, el pecado de Eva es simplemente imborrable.
Por eso Jesús no se casó con mujer, no tuvo hijos de mujer, y no formó una familia con mujer, porque Cristo sabía que la mujer solo sabe engendrar y reproducir el pecado cometido en el Edén, y por eso Jesús no quiso contaminar su preciosa sangre con la mundana sangre del pecado de Eva, que simboliza la desobediencia en contra de Dios, el poder del satanismo y la condenación eterna.
Por culpa del pecado de una mujer llamada Eva, hoy la Humanidad muere por las incurables enfermedades de la Tierra, hoy la Humanidad sufre por la hambruna en la Tierra, hoy la Humanidad sufre por el virus de la pandemia en la Tierra, hoy la Humanidad sufre por culpa de la desobediencia de una mujer llamada Eva.
Por eso el buen cristiano debe vivir por y para Cristo, porque todo el Universo fue hecho por y para Cristo, así que el verdadero amor en la vida nace de Cristo.
El amor no nace por tener coito con una mujer, pues ese supuesto amor solo engendra pecado, y sabemos que el pecado se paga con la muerte del Hombre.
El Hombre hace hasta lo imposible para agradar a una mujer, pensando en conquistarla y llevársela a la cama, pero el Hombre no hace lo posible para agradar a Dios, pensando en ganar la Corona de la Vida y gozar del alma eterna.
Para muchos hombres, agradar a una mujer vale más que agradar a Dios.
Hay muchos esposos que adoran a sus mujeres, y hay muchas esposas que adoran a sus hombres, pero la adoración saludable del cristiano solo debe ser para Dios, pues el Señor rechaza la mundana idolatría de adorar a los pecadores del Mundo.
Recordemos las citas bíblicas que explican cómo amar a Jesús en la vida.
"Y todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o esposa, o mujer, o hijos o tierras por Mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna" Mateo 19:29
"Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre y madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aún hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo" Lucas 14:26
"Estos son los que no se han contaminado con mujeres, pues son castos. Estos son los que siguen al Cordero adondequiera que va. Estos han sido rescatados de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero" Apocalipsis 14:4
"Entonces Él les dijo: En verdad os digo: no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios" Lucas 18:29
"De cierto os digo, que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o heredades, por causa de mí y del Evangelio" Marcos 10:29
Si somos sinceros, el verdadero cristiano debe vivir solo por amor a Jesucristo, pero como el mismo Cristo lo afirmó, nadie está dispuesto a abandonar los mundanos placeres carnales y sexuales, para seguir únicamente a nuestro Dios.
Tal vez alguien piense que yo soy un fanático evangélico venezolano. No lo soy. Yo simplemente permito que el Espíritu Santo me permita decir la santa verdad.
El verdadero cristiano solo debe casarse con Jesucristo y la verdadera cristiana debe casarse solo con Jesucristo, si no se casan con Jesucristo, no son cristianos.
El Mundo quiere que el hombre se case con una mujer, que tenga hijos y que construya una familia, pero Jesús quiere que abandones todo por él, que lo sigas en cuerpo y alma solo a él, que evangelices y que hagas discípulos en la Tierra.
¿Haremos lo que el Mundo quiere que hagamos o haremos lo que Jesucristo quiere que hagamos en la vida?
Por desgracia, los supuestos cristianos siempre hacen lo que el Mundo quiere que hagan, y es que la mujer soltera no quiere quedarse a vestir santos en la iglesia, y es que el hombre soltero no quiere llegar a los 40 años sin mujer en su cama, y es que todos obedecen a la ley del Diablo y todas rechazan el gran amor de Dios.
Es importante saber que hasta la madre de Jesucristo, fue una mujer que perjudicó a Cristo durante su vida terrenal, pues cuando el adolescente Jesús decidió ir al Templo en Jerusalén para ocuparse de los negocios de su Padre, su mamá María impidió que siguiera creciendo intelectual y espiritualmente, y lo obligó a regresar a su humilde casa, malogrando la independencia y la seguridad emocional que ya exhibía nuestro Jesús, durante su pubertad en el planeta Tierra.
De hecho, siendo Jesús un adulto con discernimiento, María siguió perjudicando su ministerio terrenal, y durante las bodas de Caná, María forzó a Jesús para que hiciera su primer milagro, aunque el adulto Jesús con 30 años de vida, sabía que todavía no era tiempo de hacer milagros, y se fastidió por la insistencia de su mamá María, reclamándole y diciéndole con hastío: ¿qué tienes conmigo Mujer?
Aunque finalmente Jesús cedió ante la presión de su madre, y realizó su primer milagro registrado por la Santa Biblia, convirtiendo el agua en vino, los cristianos no debemos olvidar que una mujer forzó a Jesús, para que él hiciera algo que todavía no deseaba hacer, siendo esa mujer su propia madre María.
Y es que grandes hombres han caído en desgracia por culpa de la vagina de una mujer, se han olvidado de oraciones, de acordes de guitarra y de proverbios, por culpa de la vagina de una mujer, y no hay duda que el Rey Salomón lo atestiguó en carne viva, pues terminó olvidando a Dios por mundanas mujeres del Mundo.
Por eso el buen cristiano solo debe seguir el buen ejemplo de Jesucristo, y debido a que Jesús nunca jamás tuvo relaciones sexuales con mujeres, pues el buen cristiano en la Tierra, no debe mancharse de pecado penetrando a las mujeres.
Tal vez algún pastor evangélico obsesionado con las mujeres, me diría que la Biblia exhorta a que el Hombre se reproduzca, se multiplique y termine poblando toda la Tierra, y es probable que algún otro pastor evangélico obsesionado con las mujeres, me diría que la Biblia dice que no es bueno que el Hombre ande solo por la vida, pero la realidad, es que esa bíblica palabrería no fue pronunciada por Jesucristo, y quiero reafirmar que yo no adoro y no sigo a Moisés, yo solo adoro a mi señor Jesucristo, y Cristo pide la entrega total del creyente, dejando su casa, olvidando sus lazos familiares, y negando su propia vida por amor a mi Jesús.
No hay mejor compañía en la vida que Cristo Jesús, fijemos nuestros ojos en él.
No es machismo, es cristianismo. No soy machista, soy cristiano.
Antes de empezar la pandemia por Covid-19 en la ciudad de Maracaibo, yo intenté evangelizar a un maracucho que vendía cepillados en la plaza Bolívar. Recuerdo que aquel hombre tenía la mala costumbre de piropear a las mujeres, e incluso, el vendedor decía chistes muy sucios para entretener a la gente en la popular plaza.
Yo intenté evangelizar a aquel vendedor de cepillados, le hablé de Cristo Jesús como su único Salvador personal, le dije que la mujer era fuente de pecado desde el comienzo de los tiempos, y lo invité a un estudio bíblico grupal el día sábado.
Pero el vendedor de cepillados se echó a reír a carcajadas, se tocó sus genitales a través de su pantalón, y textualmente me replicó en voz alta:
"Si Dios no quiere que coja, para qué me dio la verga"
La gente también se echó a reír por la mundana frase del vendedor de cepillados, y debo confesar que me sentí un poquito humillado en la plaza, pues yo sentí que la gente también se estaba burlando de mí, pero en ese instante, yo decidí mirar fijamente los ojos del vendedor de cepillados, y le dije: "Sal de allí Satanás".
Inmediatamente, el vendedor se puso muy serio, y aunque no me dijo nada, decidió llevarse su carrito de cepillados a otra esquina de la plaza Bolívar.
Dos semanas después, fui a un Mini Market de la avenida 5 de Julio para comprar una botella de granadina, casualmente, me encontré dentro de la tienda al mismo vendedor de cepillados, con quien yo hablé en la Plaza Bolívar, y curiosamente, él también iba a comprar una botella de granadina venezolana.
El vendedor de cepillados me pidió disculpas por su mal comportamiento en la plaza Bolívar. Me dijo que después que habló conmigo, no volvió a vender ni un solo cepillado en la plaza, y me confesó que pensaba que Dios lo estaba castigando, por los comentarios vulgares que hizo contra la Palabra de Dios.
Me llamó la atención que estando dentro del Mini Market, el vendedor de cepillados sostenía una Biblia en su mano, y me dijo que estaba leyéndola para que Dios perdonara su pecado, y lo ayudara a vender otra vez sus cepillados.
Tal vez por miedo o quizás por conveniencia, pero el vendedor de cepillados decidió buscar a Dios mediante la lectura de su Palabra. Yo lo felicité por su inteligente decisión, lo invité a leer primeramente el Libro del Eclesiastés, y seguidamente los cuatro Evangelios narrados por Juan, Mateo, Marcos y Lucas.
Dos meses después, yo me encontraba visitando otra vez la Plaza Bolívar, y escuché a un señor que estaba predicando el Evangelio con gran elocuencia en la mencionada plaza maracaibera, por lo que la curiosidad me llevó a levantarme de la banquita, y a caminar hasta la presencia de aquel buen predicador cristiano.
Para mi sorpresa, el buen predicador cristiano era el vendedor de cepillados, con quien yo había conversado anteriormente en la Plaza Bolívar, demostrándome que la Palabra de Dios es capaz de transformar a los corazones arrepentidos, siempre y cuando el pecador acepte a Jesucristo como único Salvador personal.
Tras terminar su predicación en la Plaza Bolívar, el vendedor de cepillados me dijo que ahora predicaba el Evangelio mientras cumplía su jornada de trabajo, y me confesó que desde que se reconcilió con Dios, ahora vendía diez veces más cepillados semanalmente, y ahora estaba ahorrando para abrir su propia franquicia de cepillados en Maracaibo, siendo un testimonio cristiano muy inspirador, para el venezolano desempleado que vive en rebeldía contra Dios.
El vendedor de cepillados, me dijo que era divorciado, que por culpa de una mujer llegó a contraer gonorrea en su juventud, y para bendición de mis oídos, el vendedor de cepillados me dijo que descubrió que el amor de pareja es una sucia mentira, porque solamente el amor de Cristo Jesús era el "único amor de verdad".
Vimos que el vendedor de cepillados, cambió su pasado lleno de chistes sucios, lleno de pecados mundanos y lleno de actitudes satánicas, por un presente donde Jesucristo es su único amparo y fortaleza de cara a las tribulaciones del futuro.
Mi querido hermano lector, no busque mujeres mundanas del Mundo, mejor busque el amor de Jesucristo, que es el camino, es la verdad y es la vida.
Debemos abrazar la vida con amor, no debemos ser machistas, no debemos violentar a las mujeres, solo debemos aprender a amar a quien merece ser amado.
Gracias por su tiempo.