Cáscara Amarga 561

Medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre

El medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el hoy es siempre todavía, y, el doctor Einstein no lo sabía, que sí lo sabía la poesía, en la voz de Antonio Machado, y, del, de él, de Antonio Machado: Busaca tu complementario que marcha siempre contigo y suele ser tu contrario en el hoy es siempre todavía. El medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre el hoy es siempre todavía y, el doctor Einstein no lo sabía, que ha de estar entre tu universo positivo y negativo, entre tu universo expansivo y contractivo, entre tu universo derecho e izquierdo, entre tu universo frontal y temporal, entre tu universo consciente e inconsciente, entre tu universo tesis y antítesis, entre tu universo exceso y defecto, entre tu universo natura y persona, entre tu universo ser y no ser, entre tu universo vida y muerte, entre tu universo comienzo y fin, entre tu universo justo e injusto, entre tu universo samsara y nirvana, entre tu universo el dolor y alegría, entre tu universo el nihilismo y eternalismo, entre tu universo somos y no somos, entre tu universo el amor y odio, entre tu universo la guerra y paz, entre tu universo y el mío, entre tú y yo, entre todos los casos correlativos límite contradictorios caliginosos Maleo 2001, entre todos los aspectos armónicos límbico antagónicos ambiguos Maleo 2001 de los mas y los más de 8 millones de plurales palabras pareadas paradójicas que margullen en la catacresis catedral y en el templo oxímoron cleuasmo quiasmo heraclitoiano en que un río no es dos veces el mismo río y es el mismo río las dos veces, y, entre tu universo similaricadente y antonimante Maleo 2001, entre tú y yo, ha de estar siempre tu justo medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el hoy es siempre todavía, y, el doctor Einstein no lo sabía, que sí la voz de Antonio Machado, lo sabía la poesía, medio maleoiano próspero proporcional profundo límbico contornado coordinado cadencioso, siempre al través y en de por medio por la calle de en medio budaiana. En lo sincrético y ecléctico el camino comino medio de Buda y lo armónico simultáneo contradictorio de Heráclito, la unidad de contrarios y la lucha de clases de Heráclito y Hegel y Marx en el avisado ejemplar presente entre el testimonial pretérito y el advertido devenir porvenir del Quijote, la sombría penumbra whitmaniana del yin y yang. Del medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el hoy es siempre todavía, y, el doctor Einstein no lo sabía, la sombría penumbra whitmaniana, entre el güevo y la gallina, desde donde han de surgir el güevo y la gallina, iguales elementos contrarios, en el lienzo pictórico blanquinegro del yin y yang, y, en el cóncavo convexo contradictorio concupiscente 69 cojedeño de Maleo 2001. El medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre, el proporcional equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático diabético, a donde confluyen las nalgas consentidas comprometidas consuetudinarias entre la guerra y la paz, el amor y el odio, la rabia y la ternura. Entre nalgas te veas, y, ahí, se han firmado todos los tratados, todos los convenios, todos los contratos, todas las conversaciones, o sea, que las nalgas pagan todos los platos rotos, ya verán lo de Ucrania y Rusia. Claro, menos dolorosos platos, que con la segunda guerra mundial, pues hoy los medios y los fines se conjugan y los títeres no aguantan el chaparro en que el dueño del circo y retablo los viste, descabezados están los títeres en el retablo de maese Nicolás y su mono adivino que le decía al oído a maese Nicolás, lo que pasaba en un lugar de La Mancha, pues entre la locura y la cordura, la rabia y la ternura, don Quijote hizo justicia profunda maleoiana 2001, entre la justicia y la injusticia, y el retablo entró en el olvido que ya no es noticia, como dice Hector Lavoe en Periódico de ayer. Ya el imperio capitalista neoliberal no convence con sus actuaciones y los pueblos están pila en defensa de sus recursos naturales y en defensa del equilibrio ecológico natural contra el calentamiento global y el cambio climático que ha derramado el imperio gringo go home, los recursos naturales de los pueblos, que es en donde está el interés del imperio endenantes y endespués. Y, los pueblos saben lo que el doctor Einstein no sabía, el hoy es siempre todavía, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre.

Con digresión y sin digresión, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre entre todos los casos correlativos límite contradictorios caliginosos de la forma ser y no ser de la enciclopedia moderna ilustrada originaria védica upanishad sánscrita. De la forma ser y no ser de la literatura moderna ilustrada de la catedral catacresis y del templo oxímoron cleuasmo quiasmo río heraclitoiano de las plurales palabras pareadas paradójicas. De la forma ser y no ser de la atesorada modernidad ilustrada originaria del yin y yang del tao de Laozi. Y, entre el ser y noser, la indeterminación védica profunda, la armonía contradictoria heraclitoiana, la sombría penumbra whitmaniana del yin y yang. El yin y yang, símbolo de la teoría de los casos correlativos límite contradictorios caliginosos con medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre.

Con divagancia y sin divagancia, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre. Y, ¡Cómo uno se ha de desprender del poeta, don Francisco de Quevedo! Por lo de las nalgas y que el Gabo asentara y acentuara, cuando le preguntaron sobre Cien años de soledad, y, el Gabo respondiera, que era cuestión de nalgas, asina asín ansí así don Pancho de Quevedo, y lo dijera en su obra Gracias y desgracias del ojo del culo. Una obra excelentemente exquisita borrosa caliginosa difusa entre nalgas, el punto crucial decisivo, el ojo del culo, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre.

Con concordancia y sin concordancia, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre, si se quiere, nace de la obra de don Francisco de Quevedo, y, el Quijote, en quien abrevara don Pancho, habla el Quijote, de la chorrera de mierda que bajaba del ojo de Sancho Panza, en la primera parte del Quijote en que gobernara El caballero de la triste figura, entre la cordura y la locura, embestía molinos, y, abríase de par en par las nalgas del asustado escudero, al ver a su señor, haciendo gala en desfacer entuertos y de hacer justicia profunda entre lo justo y lo injusto, entre la guerra y la paz, entre el amor y el odio, entre la rabia y la ternura, entre la locura y la cordura en que ha de estar en el mero ojo de don Pancho, el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre.

Si el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre es el ojo de don Pancho de Quevedo Villegas. Entonces sea dicho que el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre es el límite límbico contornado coordinado cadencioso de equilibrio dinámico dialectico difuso dialógico diplomático diabético. Ergo vergo sea dicho que en la mesa misa musa y entre nalgas consentidas comprometidas consuetudinarias de la obra de don Francisco, rusos y ucranianos, han de tener presente el ojo del ano, que es el medio maleoiano próspero proporcional presente profundo siempre.



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Miguel Homero Balza Lima


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