Lo vaticinaba en 2018, clara y formalmente el exembajador de EEUU en Venezuela, William Brownfield, que las sanciones a la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) acarrearían un impacto en el pueblo entero, "AL CIUDADANO COMÚN Y CORRIENTE", con lo que estaba plenamente de acuerdo doña María Corina Machado y su banda. "Si vamos a sancionar a Pdvsa tendrá un impacto al pueblo entero, al ciudadano común y corriente de las comunidades de Venezuela. Además, aseguró que la mejor solución para Venezuela "SERÍA ACELERAR SU COLAPSO", lo cual implicaba tomar por asalto a CITGO en Estados Unidos. Sin ambages de ningún tipo, insistía: "PDVSA en este momento es la única empresa en toda Venezuela que PRODUCE DIVISAS, INGRESOS PARA EL PUEBLO VENEZOLANO. Y SI VAMOS A SANCIONAR A PDVSA QUE AFECTA SU CAPACIDAD TAN LIMITADA COMO SEA, DE HACER NEGOCIO PETROLERO, TENDRÁ UN IMPACTO AL PUEBLO ENTERO, AL CIUDADANO COMÚN Y CORRIENTE, DE LAS COMUNIDADES DE VENEZUELA", "En este momento quizás la mejor solución sería acelerar el colapso, aunque produzca un periodo de sufrimiento mayor, por un periodo de meses o quizás años".

La banda de María Corina, junto con su estafermo del Edmundo al frente, están de plácemes porque no podrá detenerse la decisión gringa de robarse nuestra empresa CITGO. El Inquieto, frotándose las manos, de modo equilibrado y totalmente imparcial, desde el diario "El País" proclama: "Agentes económicos, actores políticos y analistas financieros consideran su pérdida un hecho catastrófico para los venezolanos". En realidad, él no se conduele porque no se considera venezolano, él es sencillamente GACHUPÍN.

CITGO era la séptima empresa petrolera más importante en Estados Unidos, con tres refinerías y 4 mil 200 estaciones de servicio, con un valor de 13 mil millones de dólares, y durante Chávez sirvió hasta para financiar con calefacción gratuita para hogares pobres del propio imperio. Con sus dividendos se cubrían operaciones en clínicas del exterior (los trasplantes de médula ósea de hígado), se atendían salarios del sector público, vivienda y servicios públicos, por lo que este robo tenía como único fin tratar de incrementar los problemas sociales de Venezuela, y mediante esa tortura salir del gobierno bolivariano, tal cual como lo proclamo el vil hijo de puta de William Brownfield.

Multitud de empresas carroñeras gringas, en los últimos días se han abalanzado sobre CITGO, solicitando una tajada, de modo que de la noche a la mañana aparecieron 18 acreedores internacionales, solicitando que Venezuela les pague "21.300 millones de dólares por concepto de expropiaciones e impagos en los tiempos del chavismo".

Debe quedar absolutamente claro, que este zarpazo a la república bolivariana de Venezuela, se inició con el Decreto de Obama y se fortaleció inmediatamente después de que Trump, coronara a Juan Guaidó como el INTERINO. Pero además, se da el caso, de que Venezuela no puede ejercer la defensa de esta empresa, porque el maldito gobierno gringo no nos reconoce COMO UN PAÍS SOBERANO.

El Inquieto Mojonero de Alonso Moleiro no habla que, para implementar este despojo, Guaidó junto Horacio Medina y Carlos Jordán accedieron a la orden del Departamento, de dejar en manos de un Tribunal gringo la decisión del expolio. Incluyendo, aparentar unas series de deudas inexistente con CITGO, para hacer inviable su recuperación por parte del Estado venezolano. El plan ideado por la administración de Trump fue subastarla, por lo que el presidente de María Corina Machado, don Juan Guaidó nombró como Procurador de su gobierno a un ladrón y mequetrefe llamado José Ignacio Hernández. Desde 2019, por orden de Trump, se impidió a Venezuela recibir dividendos de CITGO.

Escribe el Inquieto Mojonero Alonso Moleiro lo siguiente, en son de guasa, celebrando el despojo: "En Caracas, la PRENSA OFICIALISTA comenta con frecuencia "EL DESPOJO IMPERIALISTA" gestado en contra de uno de los activos más valiosos del tesoro nacional, y USA LA CIRCUNSTANCIA PARA ATACAR A LOS ESTADOS UNIDOS y responsabilizar a la oposición venezolana de lo que ocurre. DE ACUERDO A ESTA NARRATIVA, la responsabilidad en la pérdida de Citgo la tiene el extinto "Gobierno interino", de Juan Guaido (2019-2021)".

El INQUIETO se cuida mucho, y hace malabarismo para no salirse de la línea que le exige los enemigos de Venezuela. Por eso adereza su panfleto diciendo que el gobierno acusa sin pruebas que Interino se embolsilló millones de dólares por entregarle CITGO a los gringos, y que todas las acusaciones contra el INTERINO circulan en forma de rumores. Y añade: "Por un tiempo, en medio de la disputa de la oposición con Maduro, las propiedades venezolanas en los Estados Unidos fueron administradas por funcionarios de Guaidó y estuvieron protegidas por resoluciones especiales del Departamento del Tesoro. Horacio Medina, presidente de PDVSA-ad hoc, niega rotundamente lo concluido por Stark. "Eso es absolutamente falso. El juez se ha dejado llevar por versiones de prensa". Medina revindica una gestión en Citgo: "superavitaria, honesta, que fue recibida con hipotecas y tiene 10 trimestres dando beneficios positivos. Ha producido 5 mil millones de dólares en utilidades". ¿Y dónde están? Pues, se los robaron los pupilos de doña María Corina Machado.

La conclusión del hijo de Moisés Moleiro, El Inquieto, es que la culpa la tiene el chavismo, no Estados Unidos, ni Guaidó ni la madrina de todo ese malandraje, doña María Corina Machado. Añade El Inquieto: "La pérdida de Citgo TIENE QUE VER CON EL AGRESIVO PROCESO DE ESTATIZACIÓN DE ACTIVOS ADELANTADO POR HUGO CHÁVEZ ENTRE LOS AÑOS 2007 Y 2012". Y todo el tinglado de esta narración de El Inquieto es para salir en defensa de los grandes ladrones canadienses de la empresa Crystalex a quien el gobierno gringo le dio autorización para que entrara en el rapiñaje de los que desde hace años buscan despedazar a CITGO.

Agrega el equilibrado y transparente Inquieto: "La actitud de Chávez con los capitales internacionales CREÓ VARIOS FRENTES JUDICIALES Y UN ACUMULADO DE DEMANDAS Y DEUDAS…", EN LA QUE LOS GRINGOS NO TIENEN CULPA ALGUNA… DE MODO QUE CHÁVEZ MISMO SE MATÓ, COMO DIJO EN SU MOMENTO TEODORO PETKOFF (el 11 de abril de 2002), ÍNTIMO AMIGO DE SU PADRE, MOISÉS MOLEIRO…