El viaje poco placentero, que marcó el recorrido de Bush hijo, por algunas países de Latinoamérica, y entre los cuales se encontraba la querida República del Brasil, llevaba la propuesta de producción del biocombustible etanol a gran escala, a partir de extensas producciones de caña de azúcar y maíz (convirtiéndolo mas bien en agrocombustible), marcado en sí, desde una óptica inhumana a favor del hambre, tratando de crear asimismo, un alejamiento político entre países hermanos de Latinoamérica, enmarcados en los principios de la unión de Sudamérica como polo energético y liberador de nuestros pueblos. Brasil, poseedor de unas de las mayores extensiones territoriales del planeta, es conocido por la producción y utilización de etanol, desde hace mas de 20 años, a venido desarrollando este combustible con fines de sustitución energética y avance tecnológico a futuro, Venezuela, que incluso ya ha firmado anteriormente convenios con Brasil, en la producción de etanol, incorporando además en ello, la palma aceitera africana, lo hace desde una perspectiva con visión controlada del espacio de la tierra y su aprovechamiento, que cubra las necesidades del consumo del ser humano en primer lugar, y el resto para el desarrollo energético, de allí, la diferencia con Estados Unidos, desde el punto de vista de la producción y que busca alejar a Venezuela del avance en el desarrollo y unión de los pueblos latinoamericanos. Tan abominable fue el paso de Bush por Latinoamérica, que al exponer las necesidades del etanol para Estados Unidos en su feroz consumo de energía, y con solo mencionar el uso de materia prima como el maíz, logra disparar de manera impactante sus precios y la desmesurada cotización de los mercados bursátiles del capitalismo salvaje, alejando poco a poco para el futuro de los pueblos humildes, las harinas de tortillas de maíz y arepas, así como una infinidad de productos derivados, acostumbrados a su consumo humano y animal de tradición milenaria en estas tierras.
Actualmente existen otras fuentes de energía no contaminantes distintas al petróleo, algunas se emplean hace unos años en el planeta, tales como: la energía solar, eólica, geotérmica, biomasa, hidráulica, nuclear, etc...se han descubierto igualmente, grandes reservas de hidratos de gas metano, que se encuentran en los fondos marinos y capas polares y que además se mantienen congelados en grades cantidades. Son tan impresionantes estas reservas, que por solo mencionar a Estados Unidos, se ha asegurado que las aguas que lo bordean, contienen alrededor de 200 trillones de pies cúbicos, suficientes para cubrir las necesidades energéticas y discriminadas de esta nación, por al menos 2 mil años, si tomamos como referencia el consumo actual. A propósito de la I Cumbre Energética Suramericana realizada recientemente en la Isla de Margarita, donde se despejaron todas las dudas respecto a la posición de Venezuela frente al tema del etanol, el Presidente Chávez comentó, que las reservas de gas natural que bordean las aguas del Caribe Venezolano, poseen al menos más de 1 trillón de pies cúbicos, para desconocimiento de muchos venezolanos, pero en el claro entendido de inventario contable por parte de Estados Unidos. Ahora, muchos expertos preveen el agotamiento en las reservas de petróleo para los próximos años por venir, por ello, es necesario implementar el plan del gas, que después del petróleo y el carbón, es la fuente de energía más inmediata en ser utilizada como recurso. Estamos de acuerdo con el etanol como biocombustible del desarrollo estrictamente necesario, lo que desechamos en nuestros pueblos, es la irracionalidad en el plan del etanol como agrocombustible, el etanol del hambre...el de Bush hijo, el ocupante de aguas y tierras ajenas...
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