Una de las medidas más importantes, sino la más importante, que Venezuela debe adoptar inmediatamente es dotar al Banco Central de Venezuela y a sus técnicos de nuevos instrumentos que le permitan enfrentar con éxito y adelantándose a los acontecimientos que las sanciones y la guerra financiera tiene sobre nuestro país por los Estados Unidos.

Creo que los técnicos trabajan con lo que tienen para lograr mantener a flote la economía venezolana, pero los enemigos son poderosos y sus esfuerzos son rápidamente atacados para neutralizar los efectos positivos que se puedan lograr.

Planteo por lo tanto que es necesario salirse de los esquemas que las políticas tradicionales económicas y monetarias prescriben y avanzar hacia nuevas concepciones y usos novedosos de los antiguos instrumentos. Por ello he señalado, por las posibilidades de comunicación que revolucionariamente ofrece APORREA, cambiar hacia políticas económicas centradas en el ahorro, dentro de una serie de medidas que apoyen a los técnicos en su desempeño, de crear riqueza para el país.

La implementación de una Cesta Bolivariana de Reconstrucción financiera y Monetaria en Venezuela podría considerarse una de esas medidas con implicaciones económicas significativas, aunque su impacto y la percepción de "victoria" aunque pequeña dependerían también de otros factores.

El objetivo principal de la Cesta Bolivariana de Reconstrucción financiera y Monetaria sería controlar la inflación y estabilizar la moneda nacional, generando confianza en la economía. La Cesta estaría respaldada por reservas de una moneda extranjera estable (la cual la determinaría el Banco Central de Venezuela junto con la Presidencia de la República) a un tipo de cambio fijo.

Las Consecuencias inmediatas de la Cesta Bolivariana apoyarían los esfuerzos de nuestros técnicos a frenar la inflación inducida y estabilizar el bolívar, lo que beneficiaría a los ciudadanos al proteger su poder adquisitivo.

La Cesta Bolivariana de Reconstrucción financiera y Monetaria tendría como otro efecto inmediato el aumento de la confianza, fomentar el crecimiento económico e inclusive podría atraer inversiones extranjeras hacia un país con estabilidad monetaria.

La Cesta Bolivariana al restringir la capacidad del Banco Central para imprimir dinero y manejar la política monetaria, dejaría a la derecha sin el argumento que el gobierno emite sin ton ni son dinero inorgánico.

Sería esta una Pequeña victoria económica. Si la Cesta Bolivariana de Reconstrucción Financiera y Monetaria logra controlar la inflación y estabilizar la economía, podría considerarse un paso positivo de impacto para la economía y la vida de la población, y la imagen nacional e internacional del Gobierno de Maduro, pues sería ejemplo de cómo Maduro, siguiendo las ideas de Bolívar y Chávez logra resolver problemas que aquejan no solo a nuestro país sino también a todos los países pobres del mundo.

Sin embargo, la victoria final dependería de la capacidad del de una implementación cuidadosa y de la adopción de políticas económicas complementarias y que se tomen las medidas sistemáticas correspondientes con premios y castigos para evitar la manipulación del sistema e inclusive su destrucción.

Claro que no resuelve todos los problemas económicos de Venezuela Patria, aunque si la Cesta Bolivariana será un remedio inmediato de la hiperinflación, frenaría la espiral hiperinflacionaria, y brindaría un alivio significativo a los ciudadanos que luchan por cubrir sus necesidades básicas y al gobierno, y las empresas, y las familias para cubrir sus gastos programados.

De lograrse la estabilidad monetaria se ampliaría con hechos un mínimo de confianza en la economía, lo que facilitaría las transacciones comerciales y la planificación financiera a corto plazo. No podrán decir que somos un Estado Fallido.

Así que incluso si no representa una solución completa, la implementación de la Cesta Bolivariana de Reconstrucción financiera y Monetaria podría proporcionar un alivio inmediato y una señal de cambio innovador, y podría considerarse una "pequeña victoria" revolucionaria, en el contexto de la crisis económica venezolana.