Escuché las insólitas declaraciones del arzobispo de Valencia, Reynaldo Del Prette, antes del Referendo Constitucional, en respuesta a las acusaciones del Vicepresidente Jorge Rodríguez sobre la organización de las llamadas "guarimbas" en los templos católicos de Valencia. Son insólitas puesto que Del Prette argumentaba que en toda la historia de la humanidad la iglesia "jamás tuvo participación política de ninguna clase", lo que demuestra que su "ignorancia" es tan grande como su cinismo. Y yo añado que "tampoco disfrutó de privilegio alguno".
¿De verdad es así?. ¿Será que este "demonio con sotana" cree que desconocemos la historia?. Echemos mano de los recuerdos, entonces: En 1958, Monseñor Rafael Ignacio Arias Blanco, Arzobispo de Caracas, ppromovió el rechazo al régimen de Marcos Pérez Jiménez mediante una carta pastoral, leida en varios templos. ¿No es esto una participación política directa, vamos a ver?. Mi progenitor, con sus 82 años, recuerda aún que Monseñor Arias recibió de manos del propio General Marcos Evangelista una joya valiosa destinada a una imagen de la Virgen de Coromoto: era una "custodia" de oro que, en su época, debió costar el equivalente a unos 15 millones de nuestra moneda actual. Él se pregunta donde estará esa custodia ahora. ¿Quizá cargó con ella Monseñor Arias o tal vez otra persona?. Con Pérez Jiménez, Monseñor Arias Blanco disfrutó de privilegios varios. ¿Por qué entonces, "se le volteó"?. ¿Acaso le pagaron?.
No se nos olvida que Monseñor "Ofidio" Pérez Morales se le colgaba de la "sotana" a Monseñor Caldera en la campaña presidencial de 1968. Detrás, iba la gente del "Opus Dei" buscando privilegios. ¿No es esto participación política?. No se salva de la crítica, uno de los Monseñores más insensibles y falsos que he conocido: José Alí Lebrún quien hace unos 10 años tuvo las santas ganas de declarar ante un medio impreso de Maracay que el país "le debía mucho" a Rafael Caldera. Renuncio a hablar del prontuario del muy culto, pero no menos retrógrado y violento expresidente, que ríete del estúpido de "Yon Bonachón" y su cofradía de cobardes. Si esto no es "intervención en la política" y se repite muchas veces "pues no se entonces que será", como expresara Marta Colomina la ex-novia del Bachiller Marginal, Mario Silva. Por cierto, olvidaba lo de la firma del Cardenal Velasco en el acta que legitimó el GOLPE DE ESTADO propiciado al Presidente Chávez. ¿No había entonces razón para que el dia del sepelio de ese señor, se armara tal alboroto?.
Vale recordar que, fuera de nuestras fronteras, también tenemos ejemplos de la injerencia de la Cúpula Podrida Eclesial en los asuntos políticos. El primero que se me ocurre es el del apoyo que ciertos sacerdotes y obispos le dieron, una vez finalizada la Guerra Civil Española, al propio "Generalísimo" Franco, puesto en su Silla "por la Gracia de Dios" (¡!). ¡Cuantas veces esa cúpula guardó silencio cómplice frente a los crímenes de ese hombre!. ¿Cuantas veces, por mantener sus privilegios inmerecidos, un hombre como José María Escrivá Balaguer se hartaba de jamón serrano, mientras sus compatriotas más desafortunados se contentaban con sobrevivir a duras penas, como me contó una doña aragonesa?. A mi que no me vengan a decir que detrás de la canonización de este auténtico truchimán, por parte de Juan Pablo Segundo no hubo un motivo político, pues Escrivá Balaguer fue el fundador del Opus Dei, sustento de las ideologías políticas del extinto Papa y nada comprometido con el pueblo y sí con los poderosos que convirtieron a la América Latina en el "patio trasero" de abominables imperios.
Otras dos perlas más: A Francisco Javier Errázuriz, Arzobispo de Santiago de Chile, alguna vez le preguntaron acerca de la cruel dictadura pinochetista, y él no halló nada mejor que responder que sus temas "eran los del perdón y el olvido". Tú sabes, para que la sociedad chilena no siga estando tan dividida, como en la actualidad. Menuda tarea le tocará al "socialismo moderado" de la Presidente Michelle Bachelet. Y la apoteosis: ¿alguien recuerda a aquel capellán de policía de apellido alemán, hoy preso por torturador?. El ya "famoso" Cristian Von Wernich quien "de nada se arrepiente", y citamos a InfoBAE "formaba parte de la patota de torturadores itinerantes (en los centros clandestinos de detención) y un sacerdote que se maneja con autoridad ante los carceleros, entrando y saliendo a su antojo de las celdas, no es un torturador cualquiera, es uno calificado". Y eso que tendríamos que citar a Sus Ilustrísimas quienes desde la Conferencia Episcopal Argentina le brindaban su apoyo a los verdaderos terroristas de Estado que ocupaban la Casa Rosada, llámense ellos Jorge Videla, Emilio Eduardo Massera, Roberto Viola o Leopoldo Galtieri y les aceptaban toda clase de "favores económicos".
Por ello, al ver en un video de un aficionado a un par de mequetrefes, violentos y guarimberos como Alejandro Peña Esclusa y Leopoldo López, que son tan católicos como yo soy budista, llamando a la verdadera desestabilización, desde un templo católico de Maracay pienso que, mínimo, aquel uso abominable de ese local debió autorizarlo algún sacerdote que tiene que estar de acuerdo con semejantes individuos. Por eso, Monseñor Del Prette NO PUEDE SER JAMÁS un sacerdote: es un cínico de "marca mayor". ¿Esperará que le creamos que jamás de los jamases la iglesia "tuvo participación política de ninguna clase"?. ¡Que cinismo, que ni vergüenza tiene!.
¡QUE NO VUELVAN JAMÁS!.
(*) http://buenomalo.blogspot.com