El detalle que faltó en la reunión del grupo de Rio, fue a mi juicio, aclarar con Uribe si Colombia había establecido la pena de muerte y si el debido proceso y el derecho a la defensa habían sido derogados de las leyes Colombianas. Uribe mandó a matar a unos guerrilleros que se encontraban durmiento, es decir implantó la pena de muerte, además leyó un "prontuario" de Raul Reyes, y ¿donde está el juicio que se le hizo, dónde quedó su derecho a la defensa?, bueno Uribe los derogó de su legislación al más puro estilo Busheano.
Creo que en la reunión se obvió esto y ha debido dejarse bien claro el repudio, ya no sólo a la invasión y violación de la soberanía Ecuatoriana, sino también a la instauración de la pena de muerte. Quisiera saber donde está el Gabo que armó un escandalo cuando Cuba fusiló a unos traficantes de personas.
El pueblo Mejicano quedó también muy mal parado pues su Presidente hizo un triste papel al no protestar ni siquiera timidamente por el asesinato de sus compatriotas. El Méjico de Villa, Zapata y Morelos está bien lejos, yo diría que casi que está enterrado junto con ellos.
Como si todo esto fuera poco y ya fuera del tema de la reunión, ahora Colombia legalizó el sicariato. ¿Pero no se dio cuenta el asesino que su rostro le está danto la vuelta al mundo? ¿A donde pensara esconderse? Es un cobarde que alega haber matado a su compañero de lucha para salvar su propia vida. Cosas vederes Sancho.
Volviendo a nuestra Patria, estoy bastante conforme con la Directiva Principal del PSUV, aunque a mi modesto entender sobra Elias y falta Rojas Müller. Con los suplentes ya no estoy tan satisfecha, sobra María Cristina, y Rojas Müller debía estar entre los principales. Y por qué digo que sobran Elias y María Cristina, bueno porque creo que no han servido para nada, el primero como Ministro de Economía Popular repartió dinero a manos llenas entre supuestas Cooperativas, ¿donde están?, ¿qué están haciendo?, ¿cómo administraron y están pagando los créditos otorgados?, si alguien me responde con toda propiedad mi inquietud, me demuestra mi error, con un censo comprobable de cuales, donde y que están haciendo y como va la amortización de sus créditos, pediré disculpas. Tampoco considero que haya hecho un buen trabajo en Agricultura. Nos quedamos sin azúcar por casi un año, sin contar todos los otros problemas alimentarios que de no haber sido por Chavez que los resolvió con sus Mega mercales y ahora sus Pdevales, no se que hubiera pasado. En este momento estamos plenamente abastecidos, eso es indudable, pero la producción nacional está por la calle de la amargura y en parte eso se debe a que las dichosas Cooperativas de Elías no están produciendo y porque además el Ministerio de Agricultura y Tierras casi que pasó a ser el Ministerio de las Importaciones.
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Con María Cristina igual, donde está la producción de todas aquellas Empresas a las que se le dieron créditos por la Cogestión?, por ejemplo. En el Minlisterio del Trabajo su gestión fue anodina, y en Milco no se diga, jamás pudo pero ni siquiera lo intentó controlar la corrupción en el Plan Venezuela Móvil, por ejemplo, ni ella ni su Organismo Indecu hicieron nada y dejaron eso a la deriva. Ahora parece que hemos perdido ese Plan por la enorme corrupción que generó, hicimos lo mismo que aquel señor al que le dijeron que su mujer lo engañaba en el sofá, y él vendió el sofá. Nosotros en vez de establecer los controles, supervisar y perseguir la corrupción, encontramos la vía fácil, eliminamos el plan por el cual todo aquél que no era millonario podía comprar un carrito.
Antes de irme vuelvo al tema de Río, creo que se obtuvo lo mejor que pudo obtenerse, no nos llamemos a engaño si nos hubiesemos empecinado en la dureza, al final nosotros, Ecuador y Nicaragua nos hubiesemos quedado sólos y Uribe hubiera triunfado. Y a lo interno la oposición hubiera hecho fiesta con nuestra derrota, ahora hemos obtenido un triunfo, si un triunfo aunque muchos lo duden, no hay que perder de vista el verdadero norte: el intercambio humanitario y la paz en Colombia.
Con esto que ha pasado nos hemos acercado un milímetro a ese norte, con un rotundo fracaso nos hubieramos alejados kilómetros de ello.