Karl Marx, el paneconomista, manifestaba que dentro de una sociedad capitalista, burguesa (la mujer era la esclava del esclavo), igualmente Marx visualizaba que la liberación de la mujer reposaba en su independencia económica y que mientras la mujer no participaba a los medios de producción quedaba reducida a ser la subordinada del subordinado.
Esa subordinación se sellaba a través de un contrato llamado matrimonio.
Karl Marx, el del llamado a abolir las clases sociales, sin embargo, indicaba que la sociedad más revolucionaria era la sociedad capitalista debido al carácter de competencia propia de esta corriente. La competencia conducía a una constante dinámica de renovación: renovación por la búsqueda de mercados y por mantenerse en ellos frente a la competencia y a su vez en pro de la expansión del mismo. Esa competencia que genera una orgánica de renovación, conlleva posteriormente a que la estructura capitalista comience a incorporar, a la esclava del esclavo que, dicho sea de paso, ha sido históricamente la mitad de la población humana. La incorpora en la fuerza de producción como necesidad mercantil frente a la competencia, como recurso de ganancia, lo cual es la razón de ser del capitalismo.
El capitalismo irrumpe con su articulado fraude publicitario académico-intelectual y mediático. Se impone como la esencia del silogismo. Incorpora al otro grupo genital a la fuerza de trabajo bajo el manto publicitario de…la liberación de la mujer, la participación de la mujer…, y en muchos casos hace de ella un macho, es decir a que repita los patrones del macho fálico.
A manera de síntesis, mientras el pensamiento socialista incorpora a la mujer como esencia de la igualdad humana, el capitalismo posteriormente la incorpora como una necesidad mercantil.
La historia ha tenido su historia con el hombre y no con la mujer. La historia es la historia del hombre. El feminismo se plantea ser una contribución al humanismo, ser un pensamiento de justicia social global y se traza la participación de la mujer para provocar la ruptura de la historia macho, es decir, fin de la dominación de la mujer e igualmente fin a toda las formas de dominación humana, contra el imperialismo, contra todas las formas de explotación y discriminación racial, políticas de limpieza étnica, genocidios, etnocentrismos, supremacías. El feminismo que condena su propia sociedad ante las negativas prácticas de arraigo cultural, religiosas e imperiales, ocupacionistas, racistas etc y de no sumarse a sus aberraciones sino todo lo contrario: participar para combatirlas.
La cuestión no se trata de alienarse con la participación… que…si las mujeres somos capaces… ¿capaces de qué….? De lo que se trata es precisamente de participar en pro de una conciencia contra la barbarie. No hacer elogios a la mujer por ser capaz de fabricar bombas atómicas y luego decir: “sí, en mi sociedad, la mujer tiene voz y participación plena…. Y por ende somos una sociedad avanzada, progresista…”. Eso es un fisco humanista y doblemente macho.
Estamos incorporando a la mujer pero no necesariamente combatiendo el machismo. La disyuntiva es que la participación de la mujer en muchos casos no es más que la continuación de la histórica praxis machista, por ejemplo podemos citar algunas de nuestra historia reciente: Biljana Plavsic, diputadas iraníes, Golda Meir, Madeleine Allbright, Margaret Tatcher, Imelda Marcos, Tzipi Livni, Condoleezza Rice.
Sarah Palin, vinculada y admiradora del racista católico pro-nazi, Pat Buchanan aunque la misma hoy ligada al lobby sionista (esto es una lista muy larga dentro de la sociedad política americana, pro-nazi y pro Israel). Sarah Palin se opone al derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo, es decir, se opone a la opción del aborto, sin embargo está de acuerdo con la pena de muerte. Se opone al derecho de la diversidad sexual, es decir, al matrimonio gay. Es miembro distinguida de la Asociación Nacional del Rifle, asociación ésta que promueve valores de supremacía racial. Exigió sin éxito censurar autores como Gabriel García Marquez, W. Shakespeare, Walt Whitman etc., de la biblioteca pública en su periodo de alcaldesa, exigió sin éxito a los funcionarios públicos de no dar declaraciones a la prensa frente a muchos conflictos. El calentamiento global sostiene que no es debido a la acción del hombre sino como castigo de Dios, por lo tanto promueve la explotación de reservas de gas en Alaska en detrimento del ambiente, promueve la caza ilegal aérea de lobos.
Es una demente religiosa que afirma que la guerra contra el pueblo iraquí es en el nombre de Dios, es una tarea encomendada por Dios. ¿Qué diferencia hay entre Sarah Palin y Osama Ben Laden? La única diferencia es genital, los dos son unos drogos de la religión (la religión es el opio de los pueblos. K. Marx), claro que la censura mediática llamará al fanático de Ben Laden fanático y a la fanática de Palin, conservadora. Los dos hacen llamados a la Guerra Santa, los dos portan una puerca visión religiosa…
Israel, quien posee cerca de 400 bombas atómicas, un régimen colonial, segregacionista que practica la limpieza étnica contra la población nativa palestina etc. Para Sarah Palin es vital defender a Israel ya que es el pueblo elegido por Dios y defender a Israel es defender la voluntad de Dios, defender a Israel es el camino al paraíso celestial, América debe defender a Israel. El genocidio que se comete contra el pueblo palestino no guarda ninguna misericordia para esta neo macho vaginal….más bien todo lo contrario: la misericordia está en su genocidio, en su genocidio hay belleza, Israel es la voluntad de Dios, entendamos el orgasmo del opio celestial de la Palin.
Orgullosa de que su hijo vaya a la guerra contra Irak a matar hijos de otras mujeres…Irak el pueblo del profeta Abraham, Irak el pueblo hebreo que hoy arios sionistas asesinan, sionista antisemitas…!
La historia nos enseña que nada nos enseña, repetimos…existe oportunismo, pragmatismo, alienación, manipulación e hipocresía en torno a la participación de la mujer. Que nuestra participación no sea por la continuación de la historia sino por la transformación de la misma. Somos muchas las mujeres y hombres que buscamos hacer del feminismo un aporte al humanismo.