Sin duda que
ha pasado algún tiempo desde que escribí mi último artículo, una
semana casi si la memoria no me falla, pero por los acontecimientos
en pleno desarrollo, como lo señala el periodista Walter Martínez,
amén de tomar casi un merecido receso navideño, para venir con todas
las energías cargadas en el año 2009, año definitorio en el destino
de nuestra Revolución, año de retos, de esperanzas, de definiciones,
y es por ello, que para despedir este año y darle la bienvenida al
año nuevo, quiero hacer los siguientes señalamientos.
En primer lugar,
que como muchos, manejo ya algunas cifras con respecto al proyecto de
enmienda del artículo 230 de nuestra Constitución, el cual podrá
permitir un número indefinido de postulaciones, sucesivas, del que
sea Presidente o Presidenta de la República Bolivariana de Venezuela,
y proyecto el cual ya ha sido aprobado en primera discusión, y del
cual nos referiremos un poco más adelante, ya cuenta con un 50,75%
de aceptación entre los venezolanos y venezolanas, contra un 49,75%
de rechazo. Aquí sin duda hay algunas diferencias con las cifras que
en estos días dio nuestro compatriota Nelson Merentes, pero, resulta
que la tendencia por el SI a la enmienda del artículo 230 es de carácter
ascendente, y mucho más cuando luego de que se dé la segunda discusión
y ya la propuesta de enmienda vaya a referendo y se dé con mucho más
fragor la campaña, esta tendencia subirá. Pero estos números también
nos deben motivar y hacer que adquiramos la conciencia de que esta batalla
de la enmienda no sólo será dura, sino que no podemos ser triunfalistas,
y más cuando sinergia, ciudadanía activa y otros se están activando
para aplicar las mismas estrategias que condujeron a la derrota en el
referendo de la reforma constitucional el 2 de diciembre de 2007, hacerlo
con la enmienda.
Claro, es obvio
que en este sentido será un poco más difícil, ya que la propuesta
de enmienda es mucho más sencilla, más comprensible, más digerible,
creo que la derrota del 2D fue aleccionadora y que no cometeremos los
mismos errores. Sin embargo, no está de más hacer las advertencias
necesarias, las acotaciones, por aquello de: “En guerra avisada no
muere soldado”, y si lo mata es por descuidado.
Sin duda, agradezco
a la divina providencia, que en esta última semana, pudimos estar en
la ciudad capital, coincidiendo con los eventos históricos que se dieron
en esta semana. En primer lugar, en cuanto a la realidad caraqueña,
sin duda que el comandante tiene razón, sin desconocer el avance de
la oposición en algunas zonas estratégicas, y que hay que estar atentos,
que hay que estudiar esas causas, evaluarlas, detectar y combatir esas
fallas, y mantener los puntos fuertes, pero pese a ello, Caracas sigue
siendo roja rojita, ahora es cuando queda Revolución y Chávez para
rato, así que al oposicionismo que no se equivoque al pensar que porque
ganaron la Alcaldía Mayor, los Municipios Baruta, Chacao, El Hatillo
y Sucre, tienen, como se dice popularmente, “A dios agarrado por la
chiva”, porque se pueden estrellar de manera aparatosa, amén de que
nuestra Constitución consagra un mecanismo extraordinario y profundamente
democrático como lo es el referendo revocatorio de los mandatos de
los cargos de elección popular.
Por otra parte,
también pude presenciar la falta de respeto de los estudiantes del
movimiento estudiantil burgués, al colocar en el pleno centro de caracas,
en el corazón de la revolución bolivariana, una ofrenda floral a la
estatua de nuestro Padre de la patria, Simón Bolívar, irrespetuosa,
indecorosa, inmoral. Le colocaron una ofrenda floral con una banda
negra de muerte, con la manito blanca de la organización neofascista
otpor, ya muy conocida por nosotros, gracias a las investigaciones de
la colega abogada, y hermosa, porque no decirlo, y valiente, Eva Golinger,
y otros compatriotas, y las flores de dicha ofrenda no eran tales, sino
que era puro papel toalet pintado de diversos colores y que simulaban
ser las hojas de las supuestas “rosas”, como que si Bolívar fuera
un ser indigno, sucio, que no merece nuestra consideración y respeto,
como que su gesta de liberar a seis naciones (Venezuela, Colombia, Ecuador,
Perú, Bolivia y Panamá) no significa nada para ellos, y más para
unos jóvenes “hijitos de papi”, acostumbrados a todos los lujos
y a todas las comodidades, hijos de inmigrantes españoles, italianos,
judíos, que en los años de la II Guerra Mundial, llegaron con una
mano adelante y otra atrás, que Venezuela les abrió las puertas de
manera generosa, amorosa, que se hicieron ricos a costillas nuestras,
que montaron empresas, fábricas, que les matamos el hambre, para que
ahora vengan a denigrar de nuestro Libertador, quieran irrespetarlo
y quieran manchar su memoria. Es triste que si bien eran jóvenes como
yo los que fueron a tratar con esta presunta “ofrenda”, a ofender
la dignidad de nuestro Padre Libertador, tengan alma de viejos, de ancianos,
y que en el fondo están muertos en vida.
Trató de no
usar epítetos altisonantes, o groserías en mis escritos, pero como
decía Alí Primera, no hay peor grosería, que esta misma sociedad.
Por ello, los carajazos que pudieron haberles dado a estos “baby sitters”
de la oligarquía, bien dados están, porque hasta cuando estos nenes
malcriados van a seguir con su tónica de violencia, van a tratar de
incendiar las calles, van a tratar de desestabilizar nuestras instituciones
y acá no se haga absolutamente nada para detenerlos, no avalo la violencia,
pero aunque pudiera parecer la contradicción, no necesariamente la
violencia es el arma de los que no tienen razón, sino, veamos el ejemplo
del primer socialista de la historia, Jesús de Nazareth, que si bien
era un hombre pacífico, no era violento, más cuando vió la prostitución
del templo de Jerusalén, cuando vió a los mercaderes del templo y
a los cambistas, se sintió profundamente indignado, y con un látigo
en la mano, les volcó las sillas, mesas, etc. Y los echó del templo.
Así que no
le vamos a permitir a estos “niñitos y niñitas” malcriados que
hagan lo que les de la gana, porque también habemos jóvenes, muchachos
y muchachas que estamos con nuestro pueblo, que lo amamos, y que junto
a él estamos dispuestos a defender, incluso de ser necesario, con nuestras
vidas, a la Revolución Bolivariana, esperanza de Venezuela y del mundo
en estos instantes.
Haciendo el
necesario contraste, al día siguiente, el 18, lo que se vivió en los
alrededores del Palacio Federal Legislativo, de la Asamblea Nacional,
era alegría, era un sentimiento mayoritario, era vida, eran los poderes
creadores reunidos por todos los flancos, llegamos todos, por el norte,
por el sur, por el este y por el oeste, fuimos 4.760.485 voluntades,
que en esta primera tanda le dijimos si a la posibilidad de continuar
con un proyecto de país. Casi 5 millones de voluntades que reconocemos
un liderazgo de un hombre que lo ha dejado todo por ser útil a su patria,
a su país. Casi cinco millones de voluntades que creemos en una verdadera
unión suramericana, en una segunda y definitiva independencia, en la
libertad, en una verdadera democracia, en la consulta a la voluntad
popular, al dueño del Poder Constituyente Originario, a quien con esta
propuesta de enmienda, se le devuelve y garantizar a elegir de manera
consciente, cual es el proyecto de país que desea para los próximos
años, realmente la enmienda del artículo 230 reivindica el principio
de alternabilidad, ya que el mismo no tiene que ver con la alternabilidad,
valga la redundancia del término, de adecos y copeyanos, “cinco años
le tocaba robar a los adecos, cinco años le tocaba robar a los copeyanos”,
tanto que nos quejábamos de la falta de continuidad de los proyectos
nacionales, y ahora cuando se da la posibilidad de ahora si tener esa
continuidad, entonces los enemigos históricos del pueblo simplemente
se oponen, porque como dice una canción de un famoso cantor de nuestro
llano: “adecos y copeyanos, esos nunca volverán”.
Daba realmente
tristeza, como hasta hace poco, algunos compatriotas que fueron nuestros
“aliados”, ahora despotrican, denigran de esta Revolución. Después
que se lucraron, que se llenaron sus bolsillos, que se hicieron multimillonarios
con esta Revolución, ahora dicen cualquier disparate, se contradicen,
llaman a Chávez dictador, pierden el sentido de la vergüenza y del
ridículo. Pero bien bueno que estas coyunturas se den, porque así
las caretas de algunos pseudo revolucionarios y quinta columnas que
por ahí tenemos en una cantidad bastante grande, se seguirán cayendo
y nuestro proceso revolucionario se seguirá depurando y seguirá avanzando
a paso de vencedores y vencedoras.
A pesar, de
que como lo señala el editorial del semanario Temas Venezuela N 302
de la fecha 19/12 al 25/07, de que el oposicionismo intentará vender
este portentoso ejemplo de democracia participativa y protagónica,
el referendo aprobatorio de la enmienda constitucional, como una treta
de Hugo Chávez para mantenerse en el poder. No lo van a lograr, ya
la Asamblea Nacional, interpretando el sentir y el clamor del pueblo,
ya aprobó en primera discusión la enmienda de este artículo, y yo
estimo, que en la primera quincena de enero, luego de degustar las hallacas,
el pan de jamón, el compartir en familia, el de recargar nuestras energías
y nuestras fuerzas, será aprobada en segunda discusión esta enmienda
constitucional del artículo 230, e iremos rumbo al referendo aprobatorio
a aprobar dicha enmienda. Creo que la meta de 7.3 millones de votos,
no sólo que la podemos alcanzar, sino que le doy de ñapa 200 mil votos
más, es decir, que pudiéramos llegar a los 7.5 millones de votos revolucionarios
y aprobar esta enmienda necesaria, no sólo para permitir la continuidad
de Hugo Chávez en la Presidencia de la República, porque el oposicionismo
sabe que aprobando esta enmienda, y teniendo a Hugo Chávez de candidato
en el 2013, prácticamente sería un tiro al piso su reelección, y
eso no lo quiere esta pseuda oposición que tenemos, pero más que eso,
es la continuidad de nuestra Revolución, es la continuidad del impulso
de la verdadera unión Suramericana, de la continuidad de las misiones
sociales, de la dignificación de los niveles de vida de nuestro pueblo,
del cumplimiento de las metas del milenio, en fin, de un proyecto que
sin duda los ojos del mundo están bien pendientes y que nos han visto
como una alternativa y una esperanza.
Por último,
entraremos en un merecido receso y nos tomaremos unas vacaciones por
lo menos por unos 15 a 20 días, pero estaremos bien atentos y prevenidos
ante cualquier evento y requerimiento de nuestra Revolución. Es por
ello, que en estas últimas líneas, quiero desearles de todo corazón,
o mejor dicho, desde lo más profundo de mi corazón bolivariano, revolucionario,
solidario, socialista y combativo, a compatriotas y adversarios de nuestra
Revolución, unas Felices Pascuas, una Feliz Chavidad 2008 y que tengamos
todas y todos una Feliz Enmienda en el año 2009.
Patria Socialista o Muerte!!!
Estamos venciendo!!!