Hoy la oposición política "venezolana" en Venezuela está reviviendo el mito de la caverna expuesto por Platón al principio del libro VII de la República, extraviada como se halla entre la ilusión y la realidad, confundida entre el bien y el mal. No atina a otear el horizonte, aclarar sus ideas políticas, llamando a destruir, a matar, arrasar los bines públicos, el transporte, los edificios, consumiendo en llamas archivos, data, incluso mutilando esculturas urbanas, como lo representa la de un líder como Hugo Chávez Frías.
Han pasado 70 días, la guarimba terrorista continua, una inmensa mayoría de venezolanos nos vemos asediados, secuestrados de nuestras viviendas, nos imponen un régimen del terror, una dictadura en las calles, ay de aquel que mueva sus parapetos, sus basuras arrojadas a la calle, sus troncos, ramas, sus destartalados objetos para obstruir el tráfico y la circulación no solo de vehículos sino también de personas, a la cual la fiscal de la República Bolivariana, se hace la ciega, la sorda y muda, mejor descripción no puede ser para una ciudadana que supone defender los derechos constitucionales pero que extravió el hilo de Ariadna.
En verdad la oposición no encuentra su Teseo, su líder capaz de salir del laberinto, un Minotauro los devora, la venganza, el odio, de manera que así no podrá liberar como se propone a Venezuela, están sumidos en la irracionalidad, los conflictos internos, la disparidad de estrategias, apuntando a recobrar el país para los capitales, el imperialismo de los Estados Unidos.
Acusa al gobierno de Nicolás Maduro de dirigir un "régimen anacrónico y corrupto", echando sombra sobre el país, condenando al pueblo a las cavernas del entendimiento, cuando de anacrónico ha sido siempre el modelo de desarrollo capitalista, un sistema dependiente, anti bolivariano, no basto un siglo para despegar el desarrollo, tan solo subdesarrollo, pobreza y corrupción a lo largo de todo el siglo XX, ahora pretende esa oposición cavernícola mirar la paja en el hombro ajeno, cuando no mira la suya en el rabo.
Un modelo anacrónico siempre ha sido el capitalismo venezolano, incapaz de crear empresarios independientes, autónomos, capaces de generar un desarrollo endógeno, independiente y libre de las importaciones, de las divisas, de los petrodólares, menos un proceso de industrialización de los alimentos, de los fármacos que necesitamos en coyunturas de crisis petroleras para evitar las llamadas por la oposición, "crisis humanitarias", por lo que la escasez de los dólares ha generado corrupción, no solo en esta clase social, la de los empresarios capitalistas sino también en algunos funcionarios públicos que se prestaron a la entrega de divisas y vaciar la botija del estado petrolero.
Así que vaciaron el Mana de los dólares petroleros, los que caían del cielo, del Estado, en tanto que la revolución bolivariana no ha sabido desmantelar el engranaje industrial y comercial, la dependencia empresarial de las divisas, continua el proceso de financiar empresarios con dólares de la nación, encareciendo los productos en el mercado, padeciendo el pueblo en sus necesidades, de un lado la falta de producción social y del otro, del lado del mercado, los precios de importación.
Asi pues; el pozo petrolero mientras se bombea tanto petróleo, menos dólares llegan, he allí parte de la crisis, al parecer no aprendemos a construir el nuevo modelo postpetrolero, urge construirlo, un modelo mixto de desarrollo, entre el capital y el trabajo, asi mismo con participación del Estado, bajo el control y seguimiento, la supervisión necesaria para evitar la desviación del objetivo, un modelo postpetrolero, capaz de generar bienes y servicios para el país.
Pero al final de esta caverna, del túnel, seguro habrá luz, el pueblo encontrará el hilo de Ariadna, que la fiscal de la República extravió, la paz se impondrá por encima de las protestas, imponiéndose el respeto a la Constitución, no por la fuerza, las armas, ni la violencia, la guarimba, el saboteo y el terrorismo, así mismo la escasez y la especulación, la oposición extravió el camino a la democracia, se halla en las cavernas con su Minotauro, sacrificando a sus víctimas, al mismo pueblo, arbitrariamente, si esperanza, sin progreso, la clase política que apoya estos desmanes se suman al terrorismo, no saben cómo salir de la caverna del Minotauro, con su ignorancia manipulada no pueden ver la luz para construir su futuro político y tener un mejor país.
