Otra vez es detenido por los cuerpos represivos del Estado el dirigente sindical y secretario general del Sindicato de Trabajadores de Ferrominera del Orinoco, Rubén González, fue detenido en Anzoátegui cuando regresaba de Caracas a Ciudad Guayana, después de participar en un marcha en la ciudad capital exigiendo respeto a las reivindicaciones económicas y sociales de los trabajadores de Venezuela ante la arremetida del gobierno que deja sin efecto las contrataciones colectivas y los tabuladores salariales.
Las aberraciones jurídicas del régimen de Maduro, declarado enemigo de los trabajadores, aunque pretenda llamarse presidente obrerista, la detención de González y su traslado al Centro Penitenciario de Oriente, mejor conocida como cárcel de La Pica en Maturín, por decisión de un Juez Militar en abierta violación de la Constitución Nacional y de los Derechos Humanos, es la segunda vez que Rubén González es un preso político por sus actividades en defensa de los trabajadores, en el año 2009 estuvo preso por 17 meses cuando fue condenado a casi ocho años de presidio, con los arbitrarios cargos de agavillamiento, instar a delinquir, cierre de vías, traspasar zonas de seguridad y violación del derecho al trabajo.
Los trabadores venezolanos desde finales de agosto de este año iniciaron las protestas en todo el país reclamando un salario digno ante la hiperinflación que padecemos todos generada por las erráticas políticas económicas implementadas por el régimen cívico-militar, sumando a estos males la arremetida del patrono Estado cuando elimina los tabuladores de las convenciones colectivas e impone una tabla salarial para todos los trabajadores irrespetando sus conquistas, y logros a través de los convenios colectivos.
La pérdida de la democracia, la intervención del resto de poderes públicos por parte del Ejecutivo, la constante violación de los derechos humanos, el irrespeto a la Constitución Nacional y la desaparición del Estado de Derecho, a conducido a la perdida de la Republica, la detención de Rubén González constituye un atropello del régimen dictatorial, cuando aplica el terrorismo de Estado e involucra para este fin a FANB para crear el terror en la ciudadanía, la decisión de un tribunal militar es una violación del articulo 261 de CRBV que dice: "…La competencia de los tribunales militares se limita a delitos de naturaleza militar". Hay una abierta violación de los derechos, porque protestar y manifestar no constituye ningún delito, nadie puede ser detenido por esta acción, así lo establece la CRBV en el Artículo 68. "Los ciudadanos y ciudadanas tienen derecho a manifestar, pacíficamente y sin armas, sin otros requisitos que los que establezca la ley…" Igualmente de debe respetar el debido proceso. Porque el dirigente sindical no ha cometido ningún delito, además no puede ser procesado por un tribunal militar, lo que constituye una flagrante violación al artículo 49, numeral 4 establece: "Toda persona tiene derecho a ser juzgada por sus jueces naturales en las jurisdicciones ordinarias o especiales, con las garantías establecidas en esta Constitución y en la ley".
Lo que pasa. Es que los ex compañeros del PSUV y FBT no le perdonan que Rubén González haya tomado la decisión de luchar al lado de los trabajadores por sus reivindicaciones económicas y sociales, La maldad de los personajes como Rivero, Marcano, Spooner, Gil, Vera, Torrealba no le toleran al dirigente Sindical enfrente las políticas anti obreras del régimen de Maduro, porque para el gobierno y sus lacayos "el sindicalista o trabajador bueno es aquel que está preso o enjuiciado". Todos sabemos que desde el año 2008 el gobierno que se hace llamar revolucionario, socialista y de los trabajadores viene criminalizando la protesta sindical y practicando una política de terror para frenar de descontento popular. Violando los derechos de los trabajadores venezolanos, porque la protesta y la huelga son instrumentos legales que tienen los trabajadores para luchar contra el incumplimiento del patrono.
Para los amos del Valle, Venezuela es una finca o una granja y de todo son los dueños, los demás lo conforman los caporales o peones, escuche como hablan, como ostentan y malbaratan el erario publico, cuando nos pagan el miserable salario, nos dicen "les Regalo un Bono", "yo les doy un mes de Salario", como que los sacaran de sus propios bolsillos. Así mismos son dueños de jueces y fiscales del ministerio publico para ordenar, montan expedientes en los tribunales a los sindicalistas y trabajadores, con la idea de que el sindicalista o trabajador bueno es aquel que está preso o enjuiciado. Es una irracionalidad del Ministerio Publico y Tribunales querer asimilar el ejercicio de los derechos constitucionales de los trabajadores a un salario justo y a un trato digno con delitos comunes.
Hay que denunciar ante la comunidad internacional la responsabilidad que tiene el Gobierno Nacional por la integridad física de Rubén González y de los trabajadores venezolanos detenidos. Hay nueve trabajadores de Ferrominera del Orinoco detenidos el pasado 27 de noviembre y que el 29 del mismo mes fueron trasladados a la Cárcel de El Dorado, al sur del estado Bolívar. La denuncia de todas estas violaciones las realizo el sindicato UNETE, quienes alertaron sobre la persecución contra los dirigentes sindicales en el país.
