Debo referirme a un grupúsculo que mancilla el nombre de nuestras FFAA, no a los que actúan como un bloque monolítico en defensa de la institucionalidad y la Constitución, ni aquellos que cuando salieron a cruzar fronteras lo hicieron para llevar libertad a pueblos. Me refiero a esas individualidades que cuando actúan lanzan por la borda el lema que los simboliza como "el Honor es su Divisa". Que desdice de los valores que le impartieron en las diferentes instituciones militares. Son esos militares que actúan en flagrancia, siendo permisivos con el contrabando y la droga; contra nuestros hombres y mujeres del campo cuyo único sustento y trabajo es contribuir a llevarle el pan a su familia y a su pueblo que hoy más que nunca lo necesita. A esos militares que actúan a espaldas de la Ley y del Código Militar.
Eustoquio Rosales Molina es un hombre de las entrañas de estas tierras llaneras, con un rostro curtido por el sol, por allá en los años mozos lanzo su mirada al campo de las que nunca se ha separado. No es terrateniente, ni ha recibido crédito de gobierno alguno; pero ha batallado solo en su conuco, de sol a sol, enfrentando el alto costo de la vida, el costo de la mano de obra, la compra de fertilizantes, fungicidas, la inseguridad, etc. Nos contaba Eustoquio que por allá en su finquita en el Nula, parroquia San Camilo, municipio Paez del estado Apure el dia 07/12/2018, siendo las 3 pm se presentaron un comisión de la GNB del destacamento 353, donde tenía un camión cargado de 9.522 kilos de yuca, que iban a ser trasladados a la ciudad de Caracas, concretamente a Coche, según consta en el permiso numero Vo7121840030335794400273, que había sido expedida por el INSAS de el Nula.
Esta comisión sin mediar palabras lo traslado al Destacamento antes descrito; porque según los funcionarios existía la "presunción" de que iba a ser llevada a Colombia, cuando de ahí a la frontera existe una hora de recorrido. Lo cierto fue que la yuca desapareció como por arte de magia y el camión logro ser recuperarlo por su dueño el dia 14/01/2019; luego de infructuosas mediaciones. De este hecho tuvo conocimiento el Fiscal 12 Dr. Ronald Reyes de Guasdualito del estado Apure; pero no hizo absolutamente nada. En todo caso Eustoquio es un resiliente de convicción que no se le aguo el guarapo ante la adversidad. Allá sigue adelante echando en el morral de los recuerdos este pasaje de ingrata recordación.
Actuaciones como esta deben ser investigadas en aras de la trasparencia y los derechos de un hombre humilde del campo que se vieron pisoteados por funcionarios inescrupulosos.
