Chucha, esto con la Corte Penal Internacional (CPI) huele mal. Por ahora Chucha, omitamos las razones que se presentaron para colocar a Maduro frente a la justicia supranacional (CPI), después que un funcionario de esta instancia viniera a Venezuela. Habrá tiempo para entrarle a estas razones.
Si Chela, se capta en esto, como una mano peluda, si el hecho lo juzgamos a la luz de otro. Si nos centramos en esto, tenemos la posibilidad de encontrarnos con la pobre e inocente ranita o de oír esa frase de la canción: sorpresa te da la vida, ¡ay Dios!
Es muy probable Chela, que algo estuviera caminando por debajo de la mesa de diálogo. Un plan B o un plan C.
Entro al punto Chucha, dejando a un lado las razones. Pretendo entenderlo y puntualizar mi hipótesis. Cálculo que esto puede resultar una puñalada trapera o una versión de la ingenua ranita. Tomo como referente, el caso colombiano. Como sabemos en Colombia Chucha, la CPI lleva más de 16 años investigando (en fase preliminar) para saber si es verdad, que en ese país, efectivamente hay fosas con ciento de muertos que todo el mundo ha visto. Yo supongo que el método de investigación que aplica la CPI en Colombia es el mismo que le aplican a Guaidó en Venezuela para precisar si ha robado o ha robado. Esta gente (CPI) no ha podido saber, si las fosas de Colombia son de allá o están en la luna. En eso tienen un montón de años y aún no tienen nada claro.
Estar ciego ante lo de Colombia y colocar a Maduro en esta situación, nos lleva a creer, que la derecha va con el plan A y B en procura de su objetivo. Si uno es capaz de creer, que la derecha no quiere compartir un gobierno de derecha con Maduro y el PSUV, entonces tiene cabida la hipótesis de la ranita o en la sorpresa que da la vida.
Maduro podemos verlo en el papel de la ranita. Prácticamente, el ex camarada Maduro hizo borrón y cuenta nueva con la oposición. Casi los liberó de sus delitos y después que los líderes de la oposición pasaron ese río, parece que le metieron la ponzoña o si prefiere Chucha, le asestaron la puñalada trapera con esto de la CPI.
Sorpresa no debía ser, pero la vida suele dar sorpresas. Si entiende Chucha, que la burguesía no quiere un gobierno de derecha con Maduro, Puede entenderse que desea matar dos pájaros con la misma piedra. Enfrenta a Maduro y trata (es el punto) de liquidar el ideario de Chávez, que a decir verdad, también se equivocó cuando se colocó de cura, perdonando a los golpistas del 11-A.
No sé qué tiempo dure esto, pero colocando a un lado las razones, creo que la CPI prendió una guarimba internacional, que mete mucho ruido. La derecha no tiene amigos y los aliados se buscan si favorecen a sus propósitos.
