Con una consigna muy original (Nixon somos todos) que refleja bastante bien el alma de la dirigencia opositora en Venezuela, se ha iniciado la campaña de defensa de un delincuente de nombre Nixon Moreno.
¡Zape! diría mi viejo. Sólo a un enfermo del alma se le puede ocurrir hacer suya la imagen, las ideas y los principios de un hombre acusado de porte ilícito de armas e intento de asesinato y violación.
Todo el que haya asistido a una universidad pública en Venezuela, sabe de esos hombres que tienen una edad muy superior al promedio del estudiantado y han hecho de la dirigencia estudiantil un negocio.
Esos son los que mercadean cupos, los que por una suma adecuada de dinero consiguen que otro estudiante apruebe una materia, los que sirven de intermediarios con profesores inmorales que aplican operación colchón, los que negocian la suspensión de actividades cuando alguien no quiere presentar un examen, los que cobran por intimidar o dar palizas a profesores… en fin, la escoria del sistema educativo.
Nixon es conocido en la ULA por poseer todas esas “virtudes” y algunas otras. Sin embargo, hay algunos estúpidos que con orgullo portan una pancarta o gritan a todo pulmón: Nixon somos todos..
Para esos admiradores de Moreno, carecen de valor las palabras de una dama que lo acusa de haberla apuntado con una escopeta, obligándola a desnudarse para violarla.
Muchos de ellos creen en las excusas de Nixon, sólo porque es un dirigente opositor. Para otros, simplemente es más importante la filiación política que la moral y la dignidad.
Ver las imágenes de la víctima de Moreno, narrando con la voz quebrada por la vergüenza, como ese gusano la manoseó, abofeteó e intentó violarla, debería producir sensaciones que van desde el asco hasta la indignación. Sin embargo, hay quienes con orgullo respaldan al delincuente y manifiestan su deseo de parecerse a él… pobres diablos, enfermos.
Que el Vaticano le conceda asilo no me sorprendería en lo más mínimo, tampoco voy a perder mi tiempo comentando las decisiones de un estado que ha cometido y avalado atrocidades a lo largo de la humanidad. A lo que sí quisiera hacer referencia es a la preocupación que me embarga por el odio que guía el accionar de muchos opositores de este gobierno.
Jamás se había visto a rectores y vicerrectores universitarios caer tan bajo, como para salir en defensa de un violador, por el sólo hecho de compartir la misma visión política.
Resulta asqueroso que medios como RCTV y Globovisión pretendan convertir en víctima política a un violador y desechen la denuncia de una dama que con humildad reconoce que se arrodilló ante el bastardo y sus cómplices para suplicarles que no la violaran.
Que interesante sería ver actuar a quienes hoy sienten orgullo por la “lucha” que libra Nixon Moreno, si alguna dama de su familia viviera una situación similar y se iniciara una campaña mediática y política para convertirla en victimaria del “pobre violador”.
Por eso es que cada día el pueblo venezolano lucha con mas fuerza para que nunca vuelvan, porque no tienen moral, porque carecen de dignidad, porque lo que inspiran es asco.
Allá ellos con su pobreza de espíritu, porque en lo que a este humilde escibidor se refiere, prefiero decirle: Más Nixon serán ustedes.
arellanoa@pdvsa.com