Pedagogía económica

Ideas para una nueva política económica en Venezuela (I)

Es evidente que Venezuela carece de una política económica sólida, coherente, capaz de hacerle frente a los graves problemas estructurales y coyunturales de la economía nacional. El país hace aguas por los cuatro costados de sus variables económicas. Se necesita, entonces, actuar en consecuencia. Surge aquí una pregunta elemental: ¿son capaces los actuales responsables de diseñar y dirigir con éxito la política económica que en estos momentos necesita, exige la nación? En este caso nos referimos a Ramón Lobo, Ministro de Economía, y de Ricardo Sanguino, Presidente del Banco Central de Venezuela como cabezas de los equipos de técnicos y profesionales de esas instituciones del Estado.

El diseño de una Política Económica debe pasar, en primera instancia, por la formulación de un diagnóstico veraz en función de los indicadores económicos y sociales disponibles. A ello va dirigido esta primera parte.

I

Escribimos para el público grueso, para lectores no familiarizados con la Ciencia Económica ni con la Ciencia Política. Por ello van por delante algunas definiciones.

Política económica. Todo gobierno en todo país tiene que tomar acciones de Políticas Públicas. Dentro de ellas unas son de fundamental importancia para la vida del país, porque involucra a todos sus pobladores.

Economía política: Es considerada una de las ciencias sociales modernas; trata del desarrollo de las relaciones sociales de producción. Estudia las leyes económicas que rigen la producción, la distribución, el cambio y el consumo de los bienes materiales en la sociedad humana, en los diversos estadios de su desarrollo. La economía política es una ciencia histórica. Revela las condiciones y causas del origen, evolución y cambio de unas formas sociales de producción por otras, más progresivas. La economía política roza los intereses económicos y políticos fundamentales de los hombres, de las diversas clases de la sociedad y, en las formaciones antagónicas de clase, es campo de una aguda lucha clasista. Por esto no existe ni puede existir una economía política única para todas las clases.

La política económica está íntimamente ligada a la economía política, se desprende de ella, de la misma toma sus principios, fundamentos, orientaciones. Toda nación independiente y soberana debe tener definida su economía política para, a partir de ella, tomar decisiones de políticas públicas en el campo de la economía, que pasan a ser conocidas como políticas económicas. Cada política económica tiene objetivos que cumplir, a través de los diferentes tipos de políticas, que son múltiples, variadas.

II

Objetivos de una política económica. Dentro de los objetivos de una política económica, se encuentran el lograr: 1) El crecimiento económico; 2) el pleno empleo; 3) la estabilidad de precios; 4) el bienestar social de toda la población.

Tipos de política económica. Al conjunto de políticas orientadas a ordenar la economía se la conoce como Política Económica. Podemos mencionar las siguientes: política fiscal, política monetaria, política comercial, política petrolera, política industrial; algunas de ellas pueden estar combinadas buscando ciertos objetivos previamente establecidos. Los actuales países desarrollados (APD), pusieron en práctica para alcanzar su desarrollo industrial, políticas de industrialización, comercial y tecnológica (PICT), e implementaron simultáneamente instrumentos legales para garantizar su éxito. Por ello, países como Inglaterra, Alemania, Australia, Austria, Dinamarca, España, EE.UU., Francia, Holanda, Japón, Italia, Suecia y Suiza, cuando estaban en vías de desarrollo, adoptaron políticas proteccionistas.

Esas políticas poco diferían en sus concepciones fundamentales: protecciones arancelarias para sus productos e industrias, políticas fiscales proteccionistas, subsidios, promociones industriales, protección a sus materias primas, promoción a la tecnología, a la formación de técnicos y apoyo en la infraestructura. Muy al contrario de lo que se cree y se difundió, sólo practicaron de manera más o menos fluida el libre comercio una vez alcanzada su industrialización. Las primeras políticas de libre comercio comenzaron a ser efectivas muy avanzada la segunda mitad del siglo XIX, especialmente por Inglaterra y Francia.

¿Deben los actuales países en vías de desarrollo adoptar esas mismas políticas? Aquellas políticas fueron adoptadas a partir del siglo XVII, y de manera más consistente después de la primera y la segunda revolución industrial en Europa, de manera que estamos a más de dos siglos de distancia de esos hechos. A la par, la productividad de las escasas industrias de los países de Latinoamérica, por caso, está muy distante de los APD, cuya experiencia, tecnología y escalas de producción nos aventajan de manera notoria, por lo que la competitividad debe venir por otro lado. Esos países imponen sus ventajas, y los tratados de libre comercio (TLC) tienen, entre otras, esas finalidades. Esa es la razón por la que los gobiernos de países nacionalistas evaden los TLC con los EE.UU y con la Unión Europea (UE).

III

El caso específico de Venezuela tiene que arrancar de un diagnóstico serio, responsable, para lo cual es necesario trabajar con los indicadores económicos y sociales que está obligado a suministrar el BCV. Éste, en común acuerdo con el Poder Ejecutivo, debe diseñar la Política Económica orientada a abatir la inflación, a lograr el crecimiento económico que ha estado en saldo rojo los últimos tres años, a lograr el pleno empleo de los factores productivos y a la estabilidad de los precios para lograr el abatimiento de la inflación.

El diagnóstico suministrará los nudos críticos que hay que atender, siguiendo una política económica coherente que atienda la política fiscal, la política cambiaria, la política comercial, la política industrial y agroindustrial y la política petrolera.

Cómo hacerlo. Una Comisión de Especialistas convocados por Unasur y presidida por Francisco Rodríguez arrojó unas premisas por demás interesantes. Lo mismo hizo la Comisión para el Análisis Económico Coyuntural del Consejo Nacional de Economía Productiva (CNEP). De esos estudios surgieron algunos indicadores, los más resaltantes de los cuales ofrecemos a continuación.

El caso específico de Venezuela tiene que arrancar de un diagnóstico serio, responsable, para lo cual es necesario trabajar con los indicadores económicos y sociales que está obligado a suministrar el BCV. Éste, en común acuerdo con el Poder Ejecutivo, debe diseñar la Política Económica orientada a abatir la inflación, a lograr el crecimiento económico que ha estado en saldo rojo los últimos tres años, a lograr el pleno empleo de los factores productivos y a la estabilidad de los precios para lograr el abatimiento de la inflación.

El diagnóstico suministrará los nudos críticos que hay que atender, siguiendo una política económica coherente que atienda la política fiscal, la política cambiaria, la política comercial, la política industrial y agroindustrial y la política petrolera.

El cómo hacerlo en próxima entrega….



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César Eulogio Prieto Oberto

Profesor. Economista. Miembro de Número de la Academia de Ciencias Económicas del Estado Zulia. Candidato a Dr. en Ciencia Política.

 cepo39@gmail.com

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