Si la Asamblea Nacional Constituyente (ANC 2017) no resuelve el gravísimo problema del dólar paralelo, no habrá logrado sus objetivos económicos. Mejor dicho, habrá fracasado, porque continuará la inflación rampante, récord mundial, origen de todos los males que padecemos desde 2012. La ANC tiene que examinar cuidadosamente las opciones que prometen eliminar el dólar paralelo y las variadas tasas Bs./$. Llevo varios años analizando el problema y he llegado a la conclusión de que sólo existe una estrategia que realmente resolverá el problema: abandonar el Bolívar y pasar al Yuan, o sea, yuanizar nuestra economía. Así eliminaremos el dólar paralelo y lograremos la unificación cambiaria.
Como señalé en un artículo anterior (https://www.aporrea.org/economia/a248620.html), el problema del dólar paralelo no tiene solución en el ámbito del dólar, porque existe un poderoso magneto que apoya día y noche el alza del dólar (posicionamiento), constutuido por los cuatrocientos mil millones de dólares ($400.000.000.000), que un grupo de venezolanos tiene depositados en bancos extranjeros (Tax Justice Network) y porque nuestra moneda no tiene protección internacional contra variaciones excesivas, como la que ofrece International Monetary Market, Chicago Mercantile Exchange y London Stock Exchange, a las monedas duras (dólar, libra, yen, euro, yuan). Además, el dólar paralelo carece de racionalidad económica: la tasa Bs./$ que publica en internet no está apoyada por ninguna bolsa monetaria, sino en razones especulativas. Si añadimos la escasez oficial de dólares, como resultado de la baja de los precios del petróleo, tenemos cuatro razones por las cuales han fracasado todas las estrategias oficiales que hasta ahora se han ensayado, incluyendo el actual Dicom.
La solución está en el cambio de moneda, en abandonar el Bolívar, porque, a pesar de su honroso nombre, no conviene a nuestros intereses nacionales. El Bolívar es una moneda débil, con muy bajo volumen internacional, desprotegida (fácilmente atacable) y actualmente profundamente devaluada con respecto al US$ (lo que no quiere decir que sea su valor real). Dada su importancia y sus efectos a largo plazo, el cambio de moneda es una decisión que debería tomar la ANC, con la asesoría del BCV. Las alternativas prácticas son dos: dolarizar o yuanizar.
Dolarizar no tiene sentido y mucho menos en la situación actual. No luce aconsejable adoptar la moneda de un país que nos ha declarado oficialmente "una amenaza inusual y extraordinaria". Además, dada la profunda devaluación que tenemos frente al US$ (el dólar paralelo ronda los Bs. 8.000), la tasa de cambio Bs./$ que nos ofrecería EEUU para cambiar al dólar los bolívares existentes, arruinaría, de verdad verdad, al 95% de los venezolanos: por cada Bs. 8.000.000 depositados en el banco darían aprox. $1,000.
Un panorama muy distinto presenta la yuanización. Dados los planes internacionales que desarrolla en la actualidad y nuestras excelentes relaciones comerciales, China estaría muy interesada en contar con Venezuela como vitrina mundial del Yuan, por lo que nos ofrecería la mejor tasa de cambio Bs./Yuan, un mejor programa de cambio de moneda, un "aterrizaje suave", tomando en consideración nuestras reservas petroleras y auríferas, que China conoce, así como nuestros planes de producción y exportación.
¿Tienes otra opinión sobre cómo eliminar el dólar paralelo y lograr la unificación cambiaria? Estoy muy interesado en conocer tu opinión. Si no tienes tiempo para escribir y publicar, escríbeme por email y yo publico a tu nombre. Considero el dólar paralelo el Problema Nacional No. 1 y la ANC 2017 la oportunidad para resolverlo.
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