Los economistas de la derecha venezolana deben estar brincando en una pata al ver que un economista del PSUV está esgrimiendo sus mismas tesis neoliberales en materia económica: liberación de precios y eliminación del control de cambios. La derecha se cansó de plantear las recetas capitalistas para su proyecto de dominación antinacional y Chávez se encargó de derrotarlas una y otra vez pero ahora desde el mismo proceso bolivariano son reivindicadas por un vocero de la derecha interna que por la calle del medio está tirando la idea socialista al cesto de la basura.
Según este economista el proyecto económico socialista fracasó y hay que adoptar la propuesta capitalista para salir de la crisis. El caos económico que le está torciendo el cuello al pueblo venezolano, supuestamente, no es producido por la guerra económica sino por no haberse adoptado las medidas recomendadas por la derecha. En otras palabras el programa de gobierno de Chávez y Maduro para la transición al socialismo hay que sustituirlo por un programa reformista y restaurador.
Este planteamiento económico disolvente de la revolución bolivariana es inconcebible. No tiene ni pies ni cabeza. Si triunfara en el gobierno esa visión temeraria habría que darle toda la razón a los disidentes del PSUV que lo acusan de ser un partido traidor al legado de Chávez y entregado al capitalismo.
Al contrario de la opinión sustentada por el economista de marras aquí lo que fracasó fue el capitalismo porque no nos han dejado todavía construir una economía alternativa al capitalismo. La estructura capitalista dominante ha impuesto las condiciones del poder económico dependiente del imperialismo para desestabilizar y crear la guerra económica contra la revolución bolivariana.
Claro con economistas como el aludido es muy poco lo que se puede ayudar al proceso transformador y sí mucho a la burguesía a imponer sus planes de entrega de la patria al imperialismo norteamericano. No podría encontrar Fedecámaras y empresariado burgués un mejor defensor de sus intereses que este economista con el mundo al revés en su cabeza.
Se abrió una espita importante de discusión entre dos corrientes de opinión bien diferenciadas en la revolución bolivariana la idea, expuesta por Jesús Faría, de fortalecer las relaciones capitalistas de producción con todas las herramientas ideológicas del neoliberalismo y por otra parte la idea revolucionaria de transitar el camino de la transición del socialismo que nos legó Chávez en el Plan de la Patria.