Mientras los académicos, analistas y operadores del mercado financiero en Estados Unidos debaten y pronostican un inminente colapso del dólar[1] como moneda de reserva mundial producto de los efectos en ese país de la crisis mundial, la más grande de la historia según el FMI, en Argentina la escalada alcista de la divisa norteamericana parece no tener fin, desnudando, por si hiciera falta, la fragilidad extrema, la crisis terminal del capitalismo local.
Como mostrábamos en un artículo reciente donde analizábamos este fenómeno[2] las medidas de reducción de retenciones a los grandes exportadores no iba a servir para detener la presión especulativa del agronegocio porque los sectores concentrados exigen más. En la semana que termina se pudo constatar en el Coloquio de IDEA que la presión hacia la devaluación no es solamente por parte del agronegocio. Son las corporaciones más importantes que actúan en el país las que pretenden esa devaluación para completar o mejor dicho profundizar el saqueo descomunal sobre el salario que se viene desarrollando en los últimos años. El otro brazo de esta pinza es el derrumbe del empleo: según el INDEC en lo que va del año se llevan perdidos 3,7 millones de puestos de trabajo, llevando la desocupación a niveles que rondan el 30% de la fuerza laboral total. No es una respuesta parcial del "círculo rojo" a los efectos de la cuarentena, por el contrario es un ataque en toda regla para descargar de manera duradera y de largo aliento esos efectos sobre les trabajadores aprovechando la pandemia. Esto se produce al limitarse el volumen para la fuga de capitales y los dólares entrantes por la especulación financiera, los aportados por el FMI y la no liquidación o mantener sin vender cerca de 10.000 millones de dólares por parte del agronegocio. A esto se le suman los enormes salvatajes en pesos para las empresas en medio de la pandemia que fueron desviados al mercado de los dólares legales alternativos, digamos de paso que ese auxilio del Estado no evito la ola de despidos. Detrás del precio domestico del dólar lo que se oculta es otra expropiación monumental a las clases trabajadoras y al país.
Colapso económico en desarrollo y crisis política a la vista
Los empresarios que especulan con el dólar son los mismos a los que el gobierno de los Fernández les viene cediendo paso a paso. Por ejemplo: La reducción de las retenciones, los enormes subsidios a los productores de energía en Vaca Muerta; el plan para seguir pagando parte de los sueldos de las principales empresas con más de 500 trabajadores[3]. Además de medidas financieras como el anunció de Guzmán en el Coloquio de IDEA de reimpulsar instrumentos financieros en pesos tipo Leliq o la flexibilización de una de las variantes alternativas del mercado cambiario, para intentar frenar la corrida al dólar. Medidas que ya fracasaron o fracasaran que no podrán frenar el colapso que comenzó en abril de 2018. Colapso que está en pleno desarrollo y tiene en esta disputa un nuevo capítulo de esa crisis. Mucho menos funcionarán las apelaciones a la comprensión del tipo de la que hizo Máximo Kirchner[4] llamando a los empresarios a entender que la economía la maneja el Estado.
La esperanza del ministro de Economía de que el acuerdo con el FMI estabilice la situación es otra ilusión, forma parte de la completa incomprensión del fenómeno que en realidad está atravesando la economía mundial. La crisis expresa, pandemia incluida, el agotamiento del capitalismo.
Pero las crisis económicas de las dimensiones de la actual no se terminan con medidas parciales dentro del mismo sistema, se convierte en crisis políticas. Que el kirchnerismo y el peronismo hayan logrado contener el estallido político y social durante el último periodo del gobierno de Macri con la perspectiva de las presidenciales de 2019, no significa que en esta oportunidad suceda lo mismo, porque la actual disputa por la renta nacional, que puede sintetizarse simbólicamente en los opuestos entre el precio del dólar y el salario mínimo y la desocupación, se trasladará a las calles y sacudirá a las alturas.
El desenlace de la situación actual va a poner a la orden del día la lucha por un programa alternativo al de las corporaciones y el capital financiero. Un programa de medidas anticapitalistas. Un programa de y para la clase trabajadora y la independencia del país.
[1] El fin del exorbitante privilegio del dólar, Financial Times. https://www.ft.com/content/46b1a230-8c6c-4feb-b617-21a520cc201b?fbclid=IwAR35rRiYjbrCg4u4wYR4QuhJArtlpwI8vGOMKu-ragZM_rxoAawx7I3IFHk
[2] Los miserables marcan el rumbo https://periodismodeizquierda.com/guzman-y-cuando-los-miserables-marcan-el-rumbo/
[3] El gobierno asistirá a empresas que reestructuren deudas https://www.pagina12.com.ar/299337-el-gobierno-asistira-a-empresas-que-reestructuren-sus-deudas
[4] Máximo Kirchner
https://www.pagina12.com.ar/299854-maximo-kirchner-hay-companeros-y-companeras-a-lo-largo-y-a-l
https://periodismodeizquierda.com/no-es-el-dolar-es-el-capitalismo/