Esta información fue recibida casi con estupor, por padres, madres, representantes y miembros de las comunidades aledañas a esta emblemática institución educativa de Valencia, con presencia de docentes, por voz clara y directa de la ciudadana directora, Licda. Maritza Villasmil, dando la impresión de un dantesco descaro, cuando asistimos a una asamblea viernes 19 de los corrientes, que previamente había sido solicitada para tratar el tema de la baja en el rendimiento académico de los estudiantes y por la situación de violencia juvenil casi generalizada.
En esta asamblea se expusieron en toma y dame, un sinfín de argumentos y señalamientos de culpabilidad; por un lado hubo docentes, con la Directora incluida, leyendo artículos de la LOPNNA que establecen responsabilidad, le achacaban la “culpa” a los padres y representantes, acusándolos de no estar pendientes de sus hijos, según distraídos, desinteresados y apáticos, cuando, a pesar de contar hasta con el PAE, actúan como si no supieran o no quisieran estudiar. Algunos padres y madres, haciendo uso del derecho a réplica o para no quedarse con eso, aducían que existen docentes que no cumplen con sus clases, mientras que existen materias que no tienen profesores asignados, además, que hay algunos que tratan mal a los alumnos.
No faltaron señalamientos relacionados con amenazas de asesinato a docentes y demás personal, así como del consumo y distribución de drogas en matinés y su relación con la violencia semejante a los otros liceos; se habló de juegos ilícitos, pornografía, de piedras, botellas, bombas molotov, armas blancas y de fuego, de gorras y bolsos camufladores, de bandas juveniles que actúan a sus anchas sin que haya autoridad u organismo del Estado en materia Educativa, Policial o Protección de NNA, que intervenga satisfactoriamente, ante la gravedad de la situación.
En este escenario de debates con acusaciones mutuas, donde en el fondo se eludían las responsabilidades de todos, se planteo la necesidad imperiosa de declarar emergencia académica e intervenir el liceo, solo así se podrá investigar y revisar las conductas de todos los miembros de la comunidad educativa, entendidos directivos, docentes, administrativos, padres-madres y representantes y los propios estudiantes y las otras autoridades del Estado, quienes conociendo la problemática existente, hacen caso omiso, sin dejar de confrontar por la vía institucional y directa a los medios de in-comunicación TV, Cine, Internet y todos sus mecanismos, que como instrumentos del sistema de consumo y sin importarles el daño que le hacen a la juventud en general, no escatiman recursos en capturarlos para que sirvan a sus perversos intereses de ganar ganar.
Es aquí donde debe participar usted, ciudadana Ministra, por ello le pregunto, que siente usted, cuando hablando de los logros evidenciados y proyectados en su discurso para anunciar al país lo bueno obtenido en materia educativa, cuando aparecen nubarrones como los que tenemos en el Liceo Enrique Bernardo Núñez que empañan todo?
gusclaret@hotmail.com
Colectivo: La Voz Comunal
(*) Abg.