Una propuesta para la Universidad Bolivariana de Venezuela, debe pasar previamente por un diagnóstico que de orientación a su contenido, por ello voy a considerar como precedentes para este documento los siguientes escritos, a los cuales se puede acceder a través de las siguientes direcciones:
http://www.aporrea.org/dameletra.php?docid=15877 El bono vacacional del rector-viceministro, “orden en la casa” y “cuentas claras” Caso UBV. Por: Nicmer Evans, Publicado el Lunes, 08/08/05.
http://www.aporrea.org/dameletra.php?docid=13932 Democratización de la UBV, Publicado el Martes, 10/05/05.
http://www.aporrea.org/dameletra.php?docid=15662 La comunicación participativa como respuesta política a la praxis comunicacional Mass mediática. Y a propósito de la UBV. Por: Nicmer Evans. Publicado el Miércoles, 27/07/05.
Con base en estos escritos, la propuesta fundamental para la recomposición estructural y valorativa de nuestra Universidad Bolivariana de Venezuela está basada en dos pilares fundamentales, la democratización y la municipalización. Sobre estos puntos paso a exponer.
La democratización no es solo un proceso de elección de sus autoridades, aún cuando pueda llevar a esto como uno de los mecanismos para su consagración. Es en sí, la apertura de espacios de participación que permitan iniciar un proceso de construcción colectiva de lo que queremos como universidad. Es aquí donde es difícil la comprensión para la operacionalización y puesta en práctica de la democratización, en especial si se gestiona bajo estructuras y dogmas autoritarios como los que predominan en la actualidad. Esto se deriva de la duda e incertidumbre de que este proceso de creación de espacios de participación protagónica, para la apertura de diálogo que genere un consenso sobre la universidad que queremos pueda ser dirigido por las actuales autoridades, que de manera velada mantienen un nivel de conflictividad entre el rector-viceministro y el vicerecto-viceministro, por el control absoluto de la UBV (fenómeno cíclico, precedido por la gestión de la Dra. Orietta).
Es por esta necesidad y este elemento que condiciona la posibilidad de la democratización, que la salida de estas autoridades, y la instalación de unas verdaderas autoridades de transición, que tengan como objetivo iniciar todo un proceso realmente participativo basada en el diálogo y el respeto a las diferencias, peor guiado por una metodología que desemboque en un referendo aprobatorio de una o varias propuestas, generaría el fenómeno de “apropiación nómica” necesaria para garantizar la estabilidad política y académica de nuestra universidad, que permita su desarrollo curricular, científico, investigativo, y de respuestas a las demandas de las comunidades, tanto en la necesidad de su formación e integración a la educación superior, como a sus demandad sociales, culturales y económicas. Esto debería llevar a la posibilidad de que la UBV produjera nuevas tecnologías humanísticas y científicas que hagan viable la constitución del nuevo socialismo.
Sobre este punto, deseo hacer la salvedad de que las autoridades de transición deberían ser escogidas por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, posterior a postulaciones de la comunidad universitaria, con un plazo establecido no mayor de seis meses para el logro de los objetivos, y no se debe descartar que salga de las propias bases de la universidad.
La segunda base fundamental de esta propuesta viene orientada por la necesidad de la masificación de la educación superior, a través de la municipalización, esta vía que no ha pegado “pie con bola” en su arranque definitivo, pasa entre otras cosas por la revisión de las políticas públicas del Ministerio de Educación Superior, pero partiendo de la posibilidad de convertir a la UBV en modelo para su arranque definitivo, la concertación con los gobiernos locales, a través de los Concejos Locales de Planificación Pública, para garantizar la presupuestación de los recursos necesarios para la constitución de espacios idóneos para el desarrollo de la educación superior, debería ser la ruta más idónea, lo que permitiría: 1.- La potenciación de los CLPP, 2.- la garantía de la participación de los sectores sociales que hacen vida activa en los distintos municipios, 3.- la disminución del impacto presupuestario de la UBV, 4.- La planificación concertada a través del diagnóstico participativo real, y no virtual, con base en estudios de escritorio que no permiten percibir en su totalidad cuales son las necesidad del municipio.
Este método para la municipalización, además, no entra en contradicción alguna con la democratización de la UBV, por lo que podría darse en paralelo, retroalimentándose del mismo proceso democratizador, para así potenciar las bondades del método.
He de mencionar que la municipalización debe estas planteada bajo un cronograma de acción más abierto (en cuanto a su montaje), pero menos flexible (en cuanto a la definición de los tiempo después de activarse en los CLPP) en sus metas, que conduzca a un logro concreto y no tan pírrico como el que arroja actualmente.
Sea este un primer papel de trabajo, para permitir que nuestra universidad logre el objetivo trazado en nuestro proceso revolucionario, no sin antes alertar que solo se podrá lograr con la participación de todos los que expresen y demuestren voluntad para profundizar el valor democrático de nuestra cultura universitaria.
Nicmer N. Evans
Profesor de la UBV/Politólogo
