El Movimiento de Córdova (1918) y la revuelta conocida como el Mayo francés (1968), tuvieron como sujeto fundamental al sector estudiantil, la acción protagónica de aquella juventud, en ambas circunstancias, estuvo marcada por un sentido futurista : Libertad vs opresión, colectivismo vs individualismo, democracia participativa vs pseudodemocracia, y en ambos casos también, estuvo presente la lucha por la defensa a ultranza de los derechos humanos, estos principios marcaron inexorablemente la actuación de aquella juventud en el momento histórico en que les correspondió actuar.
El Movimiento Estudiantil Burgués venezolano (2008) es otra cosa, “las manitas blancas” lideradas por el “laureado” joven Yon Goicoechea, ven la historia por el espejo retrovisor, se conducen de espaldas al futuro, y se nutren de viejas tesis políticas e ideológicas de rancio contenido conservador, ellos promueven el capitalismo salvaje, el individualismo exacerbado, y la economía de mercado sin controles.
La coyuntura de la no renovación de la concesión al canal de televisión privado RCTV, como potestad legitima del estado venezolano, se presentó como una situación “como anillo al dedo”, para que la sociedad venezolana pudiera percibir al desnudo y --“sin las prendas intimas”-- al Movimiento Estudiantil Burgués, (MEB), en su exacta dimensión, en cuanto a la intrascendencia y la indiscutible alineación de la juventud que lo integra, en tal sentido, consideramos le diferencia entre este sifrino movimiento con los mencionados antes, es esencial, aquellos movimientos juveniles de cara al futuro, y en la corriente afirmativa y emancipadora de la historia, y el de “las manitas blancas” (MEB), a contracorriente de la misma.
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