“Los jóvenes no pueden elegir libremente su profesión, porque las condiciones de nacimiento del hombre predeterminan su profesión, así como, en sentido general, su concepción del mundo”.
(El alumno Carlos Marx)
“Se dice que la infancia es la época más feliz de la vida. ¿Lo es realmente? Lo es más que para algunos, muy pocos. Este mito romántico tiene su origen en la literatura de los privilegiados. Para la inmensa mayoría de los hombres es la evocación de una época llena de frío, hambre y sujeción. La vida descarga sus golpes sobre el más débil y nadie es más débil que el niño”.
(León Trotski)
La formación del ser humano en el mundo occidental comienza en el entorno familiar, encargado básicamente de inculcar los valores tradicionales y doctrinas religiosas, luego pasa por el sistema educativo en sus distintos niveles y simultáneamente se ve sometido al bombardeo incesante de los medios masivos de información. Ambos, sistema educativo y medios de información, se han encargado desde el final del siglo XIX, todo el siglo XX y ahora el siglo XX a fortalecer los antivalores del sistema capitalista, se trata del adroctinamiento capitalista que ha inculcado el consumismo y tergiversado los principios, la ética, la cultura e identidad de los pueblos.
El adoctrinamiento capitalista impone un sistema económico egoísta que aparenta una sociedad “abierta” y “libre”, con una “educación para todos”; “que el mercado lo defina” en “libre competencia”, donde la solidaridad y la voluntad de compartir esta vedada o restringida por la sociedad.
Lo anterior resume de manera sucinta los preceptos que rigen al sistema educativo venezolano actual y a la Ley de Educación Vigente , una Ley ya caduca que no cumple los lineamientos y mandatos emanados de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y una deuda colosal con el pueblo llano que ya llegó a 10 años:
Artículo 102. La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como función indeclinable y de máximo interés en todos sus niveles y modalidades, y como instrumento del conocimiento científico, humanístico y tecnológico al servicio de la sociedad. La educación es un servicio público y está fundamentada en el respeto a todas las corrientes del pensamiento, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo de cada ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad en una sociedad democrática basada en la valoración ética del trabajo y en la participación activa, consciente y solidaria en los procesos de transformación social consustanciados con los valores de la identidad nacional, y con una visión latinoamericana y universal. El Estado, con la participación de las familias y la sociedad, promoverá el proceso de educación ciudadana de acuerdo con los principios contenidos de esta Constitución y en la ley.
En consecuencia, no es tiempo de permitir chantajes del oposicionismo venezolano, lacayo de la rancia y retrógrada burguesía venezolana que pretende demorar aun mas la promulgación de la nueva Ley de Educación. Es imperativo entonces que la Asamblea Nacional no pierda mas tiempo y se dedique a legislar en la materia, con plena urgencia parlamentaria.
Patria, Socialismo o Muerte.....Venceremos.
(*) Director General de Investigación y Desarrollo en Telecomunicaciones