Decíamos que urge un nuevo modelo económico, un modelo de desarrollo de iniciativa social, un modelo soberano de desarrollo, independiente, no estatista, cooperativizado, asociado, democrático y socialista, de carácter endógeno, ajustado a las necesidades locales, regionales y nacionales, pero sobre todo un modelo que no sea objeto de monopolios, ni privado ni del Estado, sino un modelo económico popular, a tono con aquello del art. 113, de la CRBV, "No se permitirán monopolios. Se declaran contrarios a los principios fundamentales de esta Constitución cualquier acto, actividad, conducta o acuerdo de los y las particulares que tengan por objeto el establecimiento de un monopolio o que conduzcan, por sus efectos reales e independientemente de la voluntad de aquellos, a su existencia, cualquiera que fuere la forma que adoptare en la realidad".
Esos "particulares" son quienes pregonan la libre iniciativa empresarial, la empresa privada, el capital privado, quienes promueven el capitalismo, ellos precisamente son los responsables de realizar prácticas monopolista, no solo en lo productivo, en los mercados, en la distribución, prohibidas por la CRBV, quienes violan el derecho al acceso a los bienes básicos, y esto se debe, a su capacidad económica, al poder económico de los monopolios, en el caso de Venezuela, son los protagonistas de la Guerra Económica, al decir de Pascualina Curcio, los promotores "contra el pueblo venezolano, dirigida por sectores que hacen oposición al Gobierno constitucional, es un buen ejemplo del funcionamiento de los mercados y del poder de los grandes capitales, cada vez más concentrados en pocas manos, quienes en busca de su propio interés, económico y político, pueden con solo manipular visiblemente un par de variables y fijando precios que no se ajustan a la realidad, distorsionar economías y afectar a un pueblo entero, incluso sin ver comprometidas sus ganancias, a pesar de la situación de Guerra".
La Constitución prohíbe entonces, los Monopolios como grandes capitales concentrados en pocas manos, "quienes en busca de su propio interés, económico y político", por encima del interés social (art. 112, CRBV). Incluso por encima del interés nacional, ya que "La concentración de la producción, de las importaciones y de la distribución de los bienes y servicios en pocas manos, es decir la presencia de monopolios y oligopolios (especialmente en mercados de bienes de primera necesidad o requeridos en la producción y para el transporte), y la alta dependencia de las importaciones, son el Talón de Aquiles de la economía venezolana, colocándola en una situación de alta vulnerabilidad…".
Mejor dicho, si el Estado que concibe la revolución bolivariana no debe permitir "monopolios", porque ocurre que de acuerdo con Pascualina Curcio, "Los productos que escasean (o en términos correctos, que no se encuentran disponibles en los anaqueles de manera regular, generándose una percepción de desabastecimiento que deriva en largas colas) tienen características específicas y cumplen con unos requisitos muy particulares, estén o no sujetos a regulaciones de precios. En primer lugar, son de alto consumo, imprescindibles en la dieta del venezolano, forman parte de la cultura del venezolano (la harina de maíz precocida, el café, el arroz, el azúcar, las carotas, las pastas alimenticias, los huevos de gallina). En segundo lugar, además de ser de alto consumo, su producción y distribución se encuentra en manos de pocos empresarios, por lo general son alimentos procesados por monopolios u oligopolios".
Los monopolios económicos son empresas de alto poder económico, de capital concentrado, responden a intereses estrictamente económico, de rentabilidad, no conciben la idea del desarrollo social, sino el crecimiento de la riqueza acumulada, el lucro capitalista, el interés económico por encima del interés social, del interés económico por encima del interés nacional y público, mejor dicho que "Los Monopolios" son de acuerdo con el artículo 113, contrarios "a dichos principios el abuso de la posición de dominio que un particular, un conjunto de ellos o una empresa o conjunto de empresas, adquiera o haya adquirido en un determinado mercado de bienes o de servicios, con independencia de la causa determinante de tal posición de dominio, así como cuando se trate de una demanda concentrada". ¿Porque subsisten en la Venezuela democrática, en la Venezuela chavista?.
Habiendo sido responsables del "desabastecimiento de los bienes básicos del población" venezolana, ¿Por qué el Estado, no haya adoptado una política antimonopolios? Vale decir concebir un nuevo modelo antimonopolios, puesto que "En todos los casos antes indicados, el Estado adoptará las medidas que fueren necesarias para evitar los efectos nocivos y restrictivos del monopolio, del abuso de la posición de dominio y de las demandas concentradas, teniendo como finalidad la protección del público consumidor, los productores y productoras y el aseguramiento de condiciones efectivas de competencia en la economía" (art. 113). Evitar efectos nocivos, en este caso de desabastecimiento, de concentrar "su producción y distribución que se encuentra en manos de pocos empresarios", que sacrifican al pueblo por intereses económicos de extorsión política mediante chantaje económico.
Contrarrestar estos efectos nocivos implica concebir un nuevo modelo económico, socializado, democrático, en manos del Poder Popular, del poder obrero, campesino, trabajadores y profesionales, incluso con la cooperación del Estado sobre la base del interés nacional, popular, donde se acabe las posiciones hegemónicas de la economía, de "las manos visibles e invisibles del mercado", los efectos nocivos de "las concentraciones de oferta y demanda", sustituir el principio de la competencia por la cooperación económica, crear la economía solidaria con la sociedad. Requerimos un nuevo dominio social y no individual, sustituir el dominio de los monopolios por la economía social, que responda a las necesidades sociales, que responda al soberano, a la voluntad del pueblo, no puede existir "actividad económica" sobre suelo nacional que no responda a los fines sociales, fines públicos y nacionales y no a los intereses corporativos, nacionales y transnacionales.
Una observación final, para descartar los monopolios económicos, son nocividad para la sociedad, de acuerdo con Luis Salas R. y Patricia Zambrano, la causa del desbarajuste de los precios, aparte del desabastecimiento, es otro de los males económicos, por ejemplo, ellos indican mediante un estudio que "aquellos productos que más aumentaron de precios –independientemente de su carácter regulado o no–, son en realidad los procesados por la gran agroindustria donde los niveles de concentración y oligopolización –causa reconocida por todas las escuelas de pensamiento económico como estimuladora de especulación de precios por abuso de posición de dominio– son ampliamente conocidos. Esto es lo que explica, por ejemplo, que la mortadela, siendo un producto no regulado, varíe en un promedio equivalente a las pastas, el arroz, el pollo o el pan. En el caso de los siete alimentos restantes no regulados, los niveles de concentración son menores (lo que no quiere decir que no exista), y, por tanto, la posibilidad de imponer los precios especulativamente es menor, pues hay una mayor variedad y competencia. Incluso eso puede ser lo que explique por qué en el caso del café y los huevos la variación no es igual, pese a existir empresas con posición de dominio (El Tunal, por ejemplo, en el caso de los huevos). La relativa baja complejidad de su producción ha hecho posible que en últimos tiempos prolifere una oferta más variada".
Al mismo tiempo, estamos contrario a la idea "monopolista de carácter público", tal cual la esgrime el señor Visconti, "La producción, obtención, acopio, importación, transportación, almacenamiento, comercialización y distribución de los bienes y servicios necesarios para la satisfacción de las necesidades propias, específicas, esenciales y fundamentales de la población venezolana es responsabilidad del Estado, dándole prioridad para su cumplimiento, tal como hemos señalado con anterioridad, a las áreas de alimentación, salud, educación y seguridad", ello genera burocratización, inflexibilidad económica, consideramos que hay espacio para la iniciativa social, para el socialismo, reservando al Estado las áreas estratégicas de índole nacional.
Fuente consultada:
.-Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
.-Curcio, Pascualina, "La mano invisible del mercado" en 15 y Ultimo
.-Visconti, O., Francisco "Algunas consideraciones de orden económico", Aporrea, 03/11/2017
.-Salas Luis y Zambrano Patricia, "Desbarajuste de precios", 15 y ultimo, 30/10/2017