Toda contienda electoral en el marco de un procesos de transformación estructural, pacifico como ha sido el nuestro, es una batalla donde se decide la aceleración de la revolución u otra oportunidad para que las fuerzas de la reacción burguesa frenen el desarrollo de la historia y eso ha sido así desde la campaña electoral de 1998; quienes recordemos las otras contiendas no busquemos paralelismos con estas; en aquellas épocas era solo un escenario teatral para legitimar una democracia de oropel.

Partiendo de esa claridad hay debates que aunque necesario no es el momento, y aunque parezca un trabalenguas el momento para lograr ese momento de debate se inicia participando activamente en la búsqueda de la victoria por mayoría absoluta el 26 de Septiembre, porque si nosotros no logramos la mayoría absoluta, entonces el debate y los combates serán otros.

Ahora bien lo que si debemos cuidarnos en esta nueva contienda y fundamentalmente en los días que quedan de campaña es de dos cosas que modestamente quiero destacar;

PRIMERO: Que la contra no nos imponga la pauta; si estamos en momentos de revolución eso significa proceso de transformación continua, de ir cambiando todo lo que hay que cambiar, eso significa que revolución es sinónimo de ofensiva, de ataque, de progresión y la defensa se hace en la avanzada; cuando una revolución solo se limita a defenderse esta dejando de ser revolución y esto último no es nuestro caso; la Revolución Bolivariana tiene mucho que mostrar, entonces mostremos los logros de la revolución y si queremos más, refirmemos la revolución el 26 de Septiembre.

Que si la contra revolución nacional e internacional va a ponernos como tema electoral la inseguridad y sentarnos en el banquillo de acusados, no camaradas, en el banquillos tienen que estar ellos, hasta en ese tema la oposición es tan responsable ayer como hoy; se hace más duro combatir la delincuencia cuando un inmenso poder mediático esta en todo momento, a cada segundo tratando de invertir los valores morales; convirtiendo los vicios en virtudes, elogiando el delito, por ejemplo, a una persona que se declara especulador o sea acaparador o como lo aprendemos del diccionario; “persona que efectúa operaciones comerciales o financieras, con la esperanza de obtener beneficios basados en las variaciones de los precios o de los cambios en forma deshonesta” ¿Cómo le dice la oposición mediática a estos delincuente? “honestos empresarios”; a estafadores como el señor Nelson Mezerhane que se llevo miles de millones de dólares de los venezolanos ¿Como los califica la oposición mediática? “perseguidos del régimen” como le dice la oposición a los criminales que cumplen condena por los acontecimientos de abril de 2002? “presos políticos”; como le dice la oposición a los políticos delincuentes prófugos de la justicia? “exiliados políticos”; coño, razón tiene el viejo Roberto que me dijo “si tu quieres que se acabe la delincuencia en este país, que todos los delincuentes se declaren anti chavistas, para que veas que la prensa burguesa nacional e internacional los llamara luchadores por la libertad”.

A esos temas específicos respondamos con toda el arsenal de argumento con que contamos, como lo hace una revolución en ascenso y pasemos a lo que tiene que ser un debate integral, sistémico, de un modelo social en construcción que ha dado mayor bienestar a los venezolanos que 160 años de la cuarta republica y remitámonos a las pruebas que son tan grandes como el cielo.

SEGUNDO: No hagamos campañas individualistas, no caigamos en la trampa del liderazgos neoliberal, que nos enseñaron a través de cursos y literaturas sobre gerencia empresarial, corporativista, y toda esa pendajada de la que hacia alarde la tristemente célebre meritocracia de la vieja PDVSA; no camaradas, aquí se trata de un proyecto colectivo y quienes estén optando a legisladores, tienen que estar bien claros que no estamos eligiendo cargos sino voceros, hilos comunicantes entre el pueblo y la Asamblea Nacional, y quien no cumpla ese rol o no tenga la intención de hacerlo no crean que van a aislar al pueblo del Poder Legislativo, los que se van aislar serán ellos, porque el pueblo de todos modos va a llegar a la Asamblea; en ese sentido la campaña es buscar los voto para el colectivo revolucionario, un candidato a la Asamblea Nacional aunque en el circuito donde este solo se elija un diputado, tiene que en todo momento hacer campaña por la alianza PSUV-PCV , tantos por los candidatos nominales, lista, Parlamento Latino Americano como la representaciones indígenas si corresponde el caso.
Vamos a esta nueva contienda CON TODO Y CON TODOS, tenemos el compromiso de arrasar, que la oposición sienta la sensación que debieron hacer lo mismo de las elecciones legislativas pasadas, no participar.


PATRIA SOIALISTA O MUERTE



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