István Mészáros, discípulo de uno grande como lo fue György Lukács, ganador de un premio al “Pensamiento Crítico” junto con su tajada de dólares, firma junto a otro pensador de referencia internacional como es James Petras, un manifiesto que a todas luces como una intromisión a nuestra soberanía, y a nuestro principio de autodeterminación.
La supuesta izquierda internacional, convertida en “turistas ideológicos”, donde viajan a países a cobrar por sus intervenciones y exponencias, piensa tener los pelos de la barba de Marx en sus manos. Se han convertido en una especie de “tribunal de la inquisición revolucionaria”. Cualquier evento soberano, de cualquier país, más aun si este está en una transformación de la superestructura capitalista, que no coincida con sus acabados pensamientos del siglo XVIII y XIX, ya es producto de difamación, de injuria, y de intervención a través de constantes ataques comparado solo a un terrorismo ideológico. Hemos visto como periódicos de la ultra derecha, acertadamente publican los panfletos sectarios de estos izquierdosos, en congratulación contra el Proceso Bolivariano.
Es lamentable esta situación, donde la injerencia internacional de grupos subversivos que no han podido en más de medio siglo lograr sus propósitos revolucionarios de cambios, ahora traten de enrostrarnos sus fracasos históricos.
De igual manera, pensadores de gran talla internacional, busquen congratularse con enemigos históricos de las Revoluciones Americanas, para sembrar el descontento y la apatía entre nuestro pueblo. La Revolución Bolivariana no tiene vuelta atrás, es irreversible, en momentos apremiantes hemos vencido, ahora nos toca luchar contra el chisme, la falta de ética, y de convicciones…. Venceremos
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