José Vicente Rangel (JVR) en su programa dominical: “José Vicente hoy” (Televen, 30 junio 2013) reiteró su idea central introductoria sobre la necesidad de una oposición “a la venezolana” que se expresara y ejerciera sus responsabilidades como oposición ante el desarrollo de las políticas del Gobierno Bolivariano presidido por Nicolás Maduro Moros. Tal reiteración de JVR la expresó ante las denuncias presentadas por Jorge Rodríguez, dirigente del PSUV, y Ernesto Villegas, ministro de Información, referidas a los contenidos de la conversación sostenida entre la señora diputada, María Corina Machado, y el historiador especialista en metodología histórica e Historia de Venezuela, Germán Carrera Damas, donde la señora diputada referida mencionó señalando que Ramón Guillermo Aveledo estaba en connivencia con el Departamento de Estado de los EEUU de América para “desarrollar” un proceso de “golpe de estado” en Venezuela contra el Presidente Nicolás Maduro Moros para su sustitución por “una figura” de la oposición venezolana y la sustitución del proceso de los cambios profundos en el Estado burgués en el lógico desarrollo en perfectibilidad de la Revolución Bolivariana por un estado capitalista-burgués adscrito a los paradigmas capitalistas y globales de Washington.
En primer término debemos suscribir el llamado de JVR a la oposición venezolana; en segundo término, nos permitimos sugerirle a esa oposición “cabeza caliente golpista” que atienda el sensato y serio llamado de JVR a “calmar sus propias tormentas personales de ambiciones frustradas” y estudiar con la seriedad requerida el “caso Italia”; en tercer término, Ramón Guillermo Aveledo, ante los señalamientos de la señora diputada en mención, responsablemente, tendría que aclarar sin evadir y/o marcharse por los “caminos verdes” los señalamientos mencionados más arriba además de responderle al Presidente Nicolás Maduro Moros cuando lo precisó y señaló, en lenguaje muy político, de responsable del ejercicio teórico-práctico que significa el proceso del desarrollo del “golpe de estado continuado” (Jorge Rodríguez dixit) que está, evidentemente, en curso. Por último, nos permitimos denunciar que el Departamento de Estado de los EEUU de América ha incurrido en no haber informado a la Cancillería venezolana sobre la “propuesta” expuesta por Ramón Guillermo Aveledo de llevar a cabo un golpe de estado contra el Gobierno Bolivariano constitucional y contra el Presidente Nicolás Maduro Moros elegido en elecciones extremadamente transparentes además de su reconocimiento como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela por todos los países que componen las Naciones Unidas. El Departamento de Estado al no informar a la Cancillería venezolana además de quitarle preeminencia a las conversaciones sostenidas por el Canciller Elías Jaua y el Secretario de Estado, John Kerry, en reciente fecha, estaría suscribiendo, una vez más, el escenario de la conspiración contra el Gobierno Bolivariano de Venezuela, contra su Presidente constitucional, Nicolás Maduro Moros, y contra las bases fundamentales acordadas en la reunión entre Jaua y Kerry de respeto a los asuntos interno del otro país. Es decir, los contenidos de la conversación entre la señora diputada y el historiador, ambos referidos más arriba, tienen sustento cuales nos consideramos como muy graves por las consecuencias que un escenario de golpe de estado se presentare en Venezuela con la suscripción y solidaridades de los EEUU de América en las actuales circunstancias internacionales en el marco del desarrollo de la “nueva política Obama” (JVR dixit).
Nos vamos a permitir algunos comentarios. Nos consideramos a Ramón Guillermo Aveledo un político más dado a las negociaciones que a ser considerado como el político que estuviere a la altura de un diseño de golpe de estado; sí ello se aceptare pudiera significar que más bien podríamos considerar a Aveledo más como un “go between” que como un actor fundamental en el marco de la preparación de un golpe de estado. Nos consideramos a la señora diputada, María Corina Machado, no como una señora política sino más bien como una “actor político” lo cual significa una importante diferencia porque se puede negociar con un político pero no con un “guapetón de barrio” en este caso, guapetona. Debemos considerar con la objetividad requerida las diferencias fundamentales entre aquellos políticos que estructuraron el “golpe de estado de Abril del 2002” con los actores políticos (sic) que, en las actuales circunstancias, tratan de diseñar un golpe de estado contra el Presidente Nicolás Maduro Moros y la Revolución Bolivariana. Nos queremos decir que aquel golpe de estado de abril (2002) sí lo consideramos como un “golpe de estado” mientras que los diseños actuales y presentes que estarían desarrollando, según la señora diputada Machado, Ramón Guillermo Aveledo, el entorno del señor Henrique Capriles Radosnki, el Departamento de Estado de los EEUU de América y, por su silencio, el historiador Germán Carrera Damas, más que un “golpe de estado” en el concepto tradicional de “golpe de estado” sería alcanzar el desarrollo de un escenario que podríamos titularlo como “caso Siria” cual se estaría desarrollando en aquel país del Medio Oriente actualmente según un modelo profundamente diferente al “caso Libia” por lo cual deberíamos analizar el escenario en su complejo “teatro de operaciones”. Nos explicamos.
Trataremos de exponer los escenarios que se están desarrollando en el “caso Siria”. En primer lugar, es extremadamente curioso que el escenario de violencia en Siria haya tenido sus comienzos en y alrededor de la ciudad y región de Alepo, espacio geográfico limitante con El Líbano e Israel. Acá se nos presentan dos (2) interrogantes: la primera ¿Por qué Alepo?; la segunda ¿Por qué en frontera con un país vecino como lo es El Líbano? En segundo lugar, ¿es la población de Alepo de religión cristiana y/o islámica? En tercer lugar, ¿cuál es la realidad estratégica de Alepo? En cuarto lugar ¿cómo estaría representada la población originaria de Alepo en países no islámicos; es decir, cómo estaría representada la migración siria en países como los EEUU de América, Panamá, Colombia, Venezuela, Brasil solo por mención? En quinto lugar ¿cuál es la política oficial de El Líbano y de Turquía frente y ante el escenario de guerra civil en la región fronteriza de Siria con ambos países referidos? En sexto lugar ¿cómo definiríamos la importancia que tiene, geográficamente, Siria para los intereses de los EEUU de América e Israel al tiempo que “sacamos del tintero” la importante presencia histórica que ha tenido Gran Bretaña en aquella región del Medio Oriente conjuntamente con aquellas negociaciones petroleras donde participó el británico-armenio, Calouste Sarkis Gulbenkian?
¿Qué significaría para los EEUU de América el suscribir, apoyar y participar en la grave propuesta en escenario de “guerra civil” que se produciría por el desarrollo de un aparente “golpe de estado” que habría puesto sobre la mesa de negociaciones en el Departamento de Estado estadounidense, Ramón Guillermo Aveledo, según la señora diputada María Corina Machado, al tiempo que preguntar cómo se desarrollaría ese escenario y cuáles actores-países tendrían, necesariamente, que participar y en cuáles regiones geográficas venezolanas se promocionarían las mismas excusas que se están aplicando en el “caso Siria”?
Tenemos sobre la mesa de análisis varias realidades que enumeramos: la reunión Santos-Capriles; la información y el acuerdo de la participación de Colombia en la OTAN; la adquisición de aeroplanos artillados en los EEUU de América (San Antonio, estado de Texas) por parte de opositores venezolanos; el traslado de dichos aeroplanos artillados a aeropuerto militar colombiano en gerencia compartida con el Pentágono; la exposición de la señora diputada, María Corina Machado al historiador Germán Carreras Damas sobre la exposición en solicitud de Ramón Guillermo Aveledo al Departamento de Estado de los EEUU de América sobre el desarrollo de un golpe de estado hacia su desarrollo en “guerra civil”; y, por último, el “profundo silencio” de todos y la señora diputada sobre los contenidos en conversación expuestos públicamente por Jorge Rodríguez y Ernesto Villegas.
Es demostrable que sectores que se están militantemente oponiendo a la Revolución Bolivariana y, en consecuencia, al Gobierno Bolivariano presidido por Nicolás Maduro Moros tendrían que exponer sus criterios consecuenciales y referentes a lo anterior expuesto ante la sociedad venezolana y, sí el caso así lo ameritara, ante los órganos jurisdiccionales correspondientes. Es de total comprensión la paciencia heredada que viene demostrando Nicolás Maduro Moros pero nunca se ha olvidado que como “hijo de Chávez” y responsable-heredero de esta Revolución Bolivariana actuará en la medida que se vayan desarrollando las circunstancias; es decir, como bien lo propone José Vicente Rangel Vale todo dependerá de las actitudes que la oposición venezolana como oposición al proceso revolucionario actúen.