“S.O.S. Venezuela”, era la consigna de los fascistas, opositores, guarimberos y otras malas hierbas, que en su locura irracional y sus delirios de polvo blanco, instalaron sus barricadas de la muerte y el terror en 18 municipios del país. En pancartas colocadas en las barricadas y en los parabrisas de sus vehículos de lujo, grupos de la extrema derecha mostraban el S.O.S, tal vez, digo yo, sin ni siquiera saber que significaban esas tres letras. Si las mismas se leyeran en latín “Si Opus Sit”, traducirían: “Si fuera necesario”, pero no fue necesario, ellos solitos se hundieron en las llamas fétidas de la basura incendiada y se elevaron a las alturas del desprecio colectivo. Igualmente, si a las mismas se les buscara un significado en inglés, tal vez como “save our souls” (salven nuestras almas), tampoco se pudiera hacer nada, porque esas almas están condenadas a permanecer en los abismos de la oscuridad política y los basureros del infierno, donde por años les será cuesta arriba volver a ver la luz infinita de la libertad.
Sabemos que S.O.S, es la señal de socorro mas utilizada internacionalmente desde principios del Siglo XX, cuando fue aprobada en Berlín en 1906. Desde entonces es una señal internacional que se usa mas que todo para pedir socorro, auxilio en una situación de emergencia marítima o aérea. No obstante, los fascistas, guarimberos y barricudos, empezaron a escribir en sus pancartas mortecinas y los parabrisas de sus vehículos: “S.O.S”, sin ni siquiera imaginarse que en el colectivo venezolano y la gracia de este pueblo noble, estas tres palabras hace rato vieron la luz de la revolución, tal como me lo dijo mi amigo Astroberto Salisburry, mejor conocido cariñosamente como Caramiche e Perro. Déjate de vaina Eduardo -me dijo- en estos días cuando hablé con él. No le busques más significados, ni revises tantos libros, que te vas a volver más loco de lo que ya estas. Por ley de Caramiche e Perro, S.O.S significa: Socialismo o Socialismo. No hay otro camino, la revolución es el camino.
Me quedé pensando un rato y al final dije mi amigo Caramiche e perro tiene razón, porque ante esta arremetida del fascismo colmilludo, el socialismo debe afincar todo su peso para aplastar cualquier vestigio de violencia y de ataque de los enemigos opositores, quienes se han aliado con las fuerzas del mal para incendiar este país. Tal como lo señala James Petra “Hay que derrotar al fascismo antes que sea demasiado tarde”; por ello el Estado debe activarse y utilizar todos sus mecanismos de defensa constitucional y militar para hacerle frente a los grupos terroristas que vienen aplicando estrategias de guerra. En ese sentido, el gobierno revolucionario debe diseñar sus estrategias y empezar ya, a atacar en sus guaridas a estos grupos terroristas que se esconden detrás de las barricadas.
Hay que llegar hasta el tablero del ajedrez y revisar todas las piezas, saber sus movimientos y determinar quién las mueve. Sabemos que detrás de todo esto hay un gentío, tal como el imperio norteamericano, Álvaro Uribe Vélez y todos los corruptos que operan desde Miami. No obstante, hay que atrapar a los de aquí, a los que ejecutan las acciones, los que mueven y entregan los dólares, los que planifican los atentados, los que movilizan a los terroristas. Nada de contemplaciones, el gobierno y el Estado venezolano tienen que defenderse. Socialismo o Socialismo.
