Aquí en el Táchira si se recorren los diferentes comercios nos encontramos que recién anunció el presidente las nuevas medidas para la fijación del Precio Máximo de Venta al Público, en las que se disponía que el marcaje de dichos precios sería hecho por las empresas productoras y/o por las importadoras según el caso, la cuerda de vivos en que se han convertido la mayoría de dueños de los establecimientos comerciales, raudos y veloces llenaron las vitrinas de sus negocios con cartelitos ofreciendo al publico descuentos de 10, 20, 30 y hasta 50 por ciento.
Quizá lo hicieron aprovechando que en la decisión del gobierno se olvidó incluir una disposición que estableciera qué hacer con la mercancía que ya está dentro de los negocios y que forma parte del inventario, a sabiendas de que la misma está siendo vendida a precios especulativos tan altos, que los descuentos que ofrecen no significan nada para lo que se quiere regular que es que las ganancias no excedan en 30 por ciento, pues ha sido comprobado hasta la saciedad que los especuladores han llegado hasta el colmo de aumentarle el 100, 300, 500 y hasta más del 1000 por ciento a todo lo que venden, por lo cual esos descuentos engañosos en nada se deben al cumplimiento de la norma, pues aun con ello, el delito de especulación sigue campante,
Es así como por ejemplo en el sector de prendas de vestir para damas y caballeros incluyendo zapatos, nos encontramos que una blusa para dama sigue costando 11 mil bolívares, un par de zapatos hasta 22 mil bolívares y no se diga de la ropa para niños, lo cual no es otra cosa que un exabrupto tan grande, que ni que los hilos con que se elaboran esos productos fuesen de oro, e incluyeran piedras preciosas en su confección.
Igual o peor sucede con los medicamentos, repuestos, griferías, pinturas, alimentos para animales, pues con los de humanos ya sabemos lo que pasa, y que ahora incluye el pan de jamón e incluirá seguramente las hallacas etc.
Entonces, al constatar que la grosera especulación permanece inalterable, hay que preguntarse: ¿Por qué el organismo responsable de evitarlo no procede por ejemplo a convocar de manera obligatoria a todos los dueños de establecimientos comerciales, para que se presenten con las listas de todos los productos que venden y el respaldo documental de facturas de compra y certificados de origen en caso de los importados, para así a partir de una reunión en la que se les informe de los alcances de la Ley y las consecuencias de infringirla, se fijen los precios reales que deben establecer las ganancias no más allá del 30 por ciento que está fijado por la Ley?.
De esa manera sin necesidad de ir establecimiento por establecimiento, pues ello se llevaría lo que queda del año y mucho tiempo del próximo, se podría meter en cintura a los comerciantes que como sabemos están sumados a la guerra económica, unos a conciencia, otros porque ve, pescando en río revuelto, la forma de ganar mucho más y con mayor facilidad; pero además emprender una campaña comunicacional que informe, ojalá en cadena, desde los sitios de reunión gobierno-comercios, al pueblo, a fin de que se incorpore a defender lo que se acuerde y sumarse en la defensa, no del sector oficial, sino de su bolsillo y de su estómago, que como sabemos ya no da para más pues los precios son tan escandalosos que como vemos en el caso de la blusa para dama o los zapatos para nombrar solo estos dos artículos, se requiere de más de un sueldo mínimo para poder adquirirlos.-
Vimos cómo el Vicepresidente Arreaza, in situ, informaba sobre los verdaderos precios, por ejemplo de los cauchos y baterías para vehículos y entonces ¿por qué aquí en el Táchira siguen los precios especulativos para estos productos que superan, las primeras, hasta los 25 mil bolívares por unidad y los segundos hasta los 50 mil bolívares?.
¿Le queda muy difícil a la autoridad respectiva en todos los estados del país, llamar a los expendedores de esos rubros y por escrito hacerles firmar una caución en la cual se comprometan a respetar los precios fijados por la Ley, o simplemente producir una circular en la que se les conmine a cumplir lo dispuesto en la Ley?
La verdad que son cuestiones a las cuales no se le consiguen respuestas a no ser las que ya conocemos y que tienen que ver con complicidad de funcionarios, lo que ha sido lamentablemente una realidad dolorosa que afecta gravemente la confianza de muchos en la Revolución y sirve de acicate para que sus enemigos hagan fiesta.
A estas alturas, no ha sido posible conseguir una audiencia con el Director del ente regulador para presentarle el proyecto "SUNDDE BARRIO ADENTRO", que de aplicarse establecería un control permanente y efectivo en las bodegas y demás establecimientos comerciales de los barrios, donde está la gente y los votos, descongestionaría los supermercados porque la gente encontraría los productos a precio justo cerca de su casa y se le daría un duro golpe a la especulación, amén de que se controlarían los intermediarios que surten los comercios barriales e incluso de las urbanizaciones.
Igual suerte ha corrido el proyecto elaborado por el FUS (Frente Universitario Socialista del Táchira) denominado " Plan de Abastecimiento Seguro" (PAS), que tampoco ha podido ser entregado al director del ente regulador.-
Dios quiera que el 06D, por la noche podamos constatar que esta guerra económica y mediática, nacional e internacional a que estamos sometidos no hizo mella en las huestes revolucionarias, y como en otras oportunidades podamos superar los escollos y se imponga de nuevo la verdad, haciendo bueno aquello que tanto repetía nuestro eterno Comandante “Dios está con la Revolución” y por lo tanto el mal no pasará.