Hasta el día que pude confirmar y reconfirmar --- para estar absolutamente seguro --- que Maduro es un mentiroso, lo apoyé, así como Chávez nos lo pidió, pero eso se ha terminado, no lo apoyo más, ni como presidente, ni como persona, en absoluto, por nada, de ninguna manera, ni lo apoyaré jamás, y menos todavía como líder de nuestra Revolución.

No se puede hacer Revolución con mentiras.

Es más, la Revolución no es de Maduro, ni del PSUV, es nuestra.

Apoyo y trabajo para la Revolución, para Chávez, para los pobres, siempre a favor de los más necesitados, de los marginados, de los explotados, y siempre a favor de la verdad, nunca a favor de la mentira, ni de un partido político, ni para un prepotente presidente de la burocracia corrupta del gobierno de Venezuela.

Así debo decirlo, porque esa es la verdad.

No me importa, ni me interesa la ideología, sea socialista, PSUVista, religiosa, teológica, filosófica, o sobre conceptos de paz, bla, bla, bla, o de cualquiera tipo, y menos todavía cualquier porquería relacionada con la política, bla, bla, bla, lo que me importa es la Revolución, la cual solamente se puede hacer con la verdad, y con acciones, no con mentiras y habladera de paja.

La verdad es la piedra fundamental de nuestra Revolución, y ya que Maduro miente, no puede, ni debe ser el líder de la Revolución --- Maduro puede ser el líder de la maquinaria gubernamental, eso sí, pero no de la Revolución, no podemos permitirlo.

Lo que me llevó a decir estas palabras fue la inmensa rabia que me dio al leer las increíbles palabras prepotentes que salieron de la boca de Maduro, ayer creo que fue:

“Hoy se instaló en la sede de la Asamblea Nacional el Parlamento Comunal, y yo le voy a dar todo el poder al Parlamento Comunal, todo el poder y ese parlamento va a ser una instancia legislativa del pueblo desde la base”.

Ver: http://www.aporrea.org/poderpopular/n282874.html

¿YO LE VOY A DAR todo el poder al Parlamento Comunal?

¿Qué tipo de comentario es ese?

Eso es un comentario excepcionalmente prepotente, y masivamente arrogante, típico de las clases media explotadoras. Es más, es un comentario totalmente contradictorio, y demuestra claramente que Maduro pone la Revolución en segundo plano --- primero él, y después, tal vez, la Revolución.

Pregunto:

¿Quién es Maduro para darle el poder al Pueblo?

¿Quién le dio esa potestad?

¡Nadie!

Es más, en caso que el mismo Maduro no se haya dado cuenta todavía, él no es ningún Dios todopoderoso, ni es el jefe del gran universo, y menos todavía, el jefe de la Revolución.

¿No se ha dado cuenta Maduro que alrededor de 50% de los Revolucionarios votaron directamente o indirectamente contra él, el pasado 6 de diciembre?

¿Entonces?

Maduro es sencillamente el muy-mal-elegido presidente del país, es jefe del la corrupta maquinaria del gobierno, y así lo ha demostrado desde que fue electo en el 2013, es simplemente otro gran burócrata con una boca de cualquier politiquero común y corriente, es decir, un mentiroso.

Es más, Maduro no es el dueño de la Revolución, es decir, aunque tal vez pensara que sí lo es --- por ser el jefe del PSUV --- Maduro no es el jefe de la Revolución, es simplemente el jefe de un partido político cualquiera, en este caso el PSUV, repleto de corruptos y politiqueros mentirosos, y eso también se ha demostrado ampliamente en los últimos 2 años.

¿Entonces?

¿Quién le dio a Maduro esa potestad?

¿Él mismo?

Ahora, si Maduro tuvo las bolas para autodenominarse como la persona que tiene la potestad --- o la superioridad --- para darle el poder al Parlamento Comunal, esto significa que ese Parlamento Comunal no servirá para nada, será simplemente otra fachada política, porque ese poder no ha sido dado por el mismo Pueblo, sino que más bien ha sido dirigido bajo supervisión política, por un arrogante y prepotente politiquero para satisfacer y proteger su propio ego político.

Para decirlo de otra manera, si de verdad Maduro fuera un líder digno de encabezar la Revolución --- pero no lo es --- él mismo ya habría pedido que se lleve a cabo un referéndum revocatorio contra él mismo, poniendo así al frente la Revolución en vez de él mismo, pero no lo hizo, y ahora, como cualquier típico arrogante de la clase media venezolana que se cree mejor que los pobres, se autodenominó el todopoderoso, y eso es muy negativo, muy contrario, y muy contraproducente para la Revolución.

Maduro no tiene la potestad para darle poder al Pueblo Revolucionario.