El consumidor actualmente necesita mejores ingresos; si la Asamblea sugiere la cesta tickets, el gobierno debe apoyarla.
El Partido Comunista ha sido paradigmático en su conducta; cuando se trata del diablo mismo, si este decide favorecer al pueblo en alguna circunstancia, por contradictorio que luzca, lo apoya incondicionalmente.
No vemos justificación alguna para que el gobierno no comience a llenar los bolsillos de los trabajadores mediante inmediatos ajustes del salario mínimo y cesta ticket que son la manera más expedita de seguir dinamizando la economía a fin de que sean muchos los empresarios burgueses que opten por competir entre sí en su libre mercado.
Como sabemos, la competencia intercapitalista está suspendida; ahora todos los fabricantes y distribuidores o comerciantes intermediarios fijan los precios al unísono y hacia arriba porque su tarea por ahora no es económica, sino política.
Por ejemplo, los burgueses se ven obligados a esconder las mercancías porque al precio que pongan el consumidor les vaciaría de inmediato sus inventarios, mientras que si la exhiben corren el riesgo del saqueo ante la insuficiencia de dinero en los bolsillos del consumidor de ingresos insuficientes.
Con mejores ingresos el hambre no haría crisis y la economía progresaría. Se trata de resultados contrarios al interés político que por ahora ocupa a la oposición desde la llegada de Chávez al poder, eso, es desprestigiar al gobierno que ya no halla cómo derrumbarlo puesto que jamás han contado con los votos necesarios, según los procedimientos legales a través de elecciones. Eso le ocurrió a las izquierdas durante 40 años hasta que Chávez logró nuclearlas a su alrededor.
Si el Estado opta por nivelar de una vez por todas el salario y las pensiones al costo actual de la vida, para el Estado no significará ruina alguna ni más inflación porque sencillamente estamos usando dinero fiduciario que sólo depende de la confianza para que circule entre los vendedores y compradores, para que el patrono lo use cuando paga sus deudas y estos cuando realicen sus compras diversas.
El costo dela vida es una estadística que sólo mide la cantidad de dinero o de renta necesario para cubrir las necesidades básicas y fundamentales de alto y frecuente uso. Tampoco existe un alto salario sin que se le relaciones con el costo de la vida, y no existe un costo alto de vida sin que lo relacionemos con la renta del consumidor. Por ejemplo, para los indigentes hasta el precio de un pedazo de pan les resulta cuesta arriba, les resulta elevadísimo el costo de vida, pero a un trabajador con ingresos suficientes, ese costo le pasa inadvertido: cobra su salario, presupuesta sus gastos y ya.
Por esa razón, no hay costo de vida elevado, sino bajo poder adquisitivo, y cuando ese poder no alcanza ni para comer suficientemente, sobrevienen las enfermedades de origen nutricional que hace más cara la vida porque suma medicinas y necesidad de servicios medicoasistenciales, lo que a su vez exige mayores ingresos salariales para los trabajadores.