No pudiendo darse el lujo de perder el control de nuestro destino y nuestras instalaciones petroleras el gobierno y las mega corporaciones de los EEUU, apoyados por la burguesía pitiyanqui local y regional, atacan a la Venezuela chavista con un coctel de agresiones virtuales y materiales, ya ensayadas en otras partes del mundo.
En estos últimos años, han arreciado la destrucción silenciosa de la juventud, sector más frágil y maleable del país, iniciada desde la IV República a través de una pseudo educación que ni informa ni forma, la naturalización del consumismo y la violencia, el consumo de drogas, la incitación al facilismo y la delincuencia, la organización de bandas, etc.
Utilizan la industria de comunicación, las redes virtuales y las autoridades de organismos y países sometidos al gran capital para trasmitir al mundo una imagen destinada a justificar una intervención "humanitaria" en nuestro país y a sumergir a una población desclasada en una realidad paralela, en una realidad dictatorial creada a imagen y semejanza de la que quisieran imponer los conspiradores.
Financian el turismo conspirativo de la burguesía apátrida y sus adjuntos. Facilitan y publicitan su conexión con la hez política de países colonizados con el doble propósito de sumar seudo líderes nacionales a la campaña internacional de descrédito emprendida contra el chavismo y de tener excusas para apretarles las tuercas en el supuesto negado de que alguno de ellos llegase al poder. O es que alguien cree que los amos del gran capital y el gobierno estadounidense son tan torpes como para confiar en politicuchos capaces de traicionar a su Patria, de mandar a matar a sus conciudadanos o de calificarlos de peste, de enfermedad contagiosa…
Mantienen en vilo a todos los venezolanos. Bloquean y entorpecen la producción y distribución de bienes indispensables para la supervivencia de la población y sabotean la prestación de servicios básicos. Tanto para desmoralizar y exasperar al pueblo, como para obligar al Gobierno a invertir tiempo y a desviar recursos que podrían destinarse a fortalecer las Misiones y el desarrollo productivo del país.
Estimulados por una victoria pírrica en el 2002 continúan tratando de seducir a la FANB para sacar por la fuerza a Nicolás Maduro Moros de la Presidencia y erradicar nacional y regionalmente al chavismo, sin necesidad de poner en práctica la intervención extranjera contemplada en informes estadounidenses oficiales y oficiosos.
Pero, en todos sus cálculos no han tomado en cuenta la madurez e integridad de los venezolanos decididos defender en la calle o cualquier otra trinchera a nuestro presidente, a los principios y derechos establecidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y a nuestro proceso de empoderamiento popular revolucionario.
Viviremos y Venceremos
