La "idea central" de este texto es lo significado y objetivo del proceso político en Revolución Bolivariana y Chavista y sobre esta "idea central" girará toda la argumentación político-ideológica que trataremos de exponer con la máxima claridad posible. Es decir, aquellos que aún no entiendan, "tirios y troyanos", que nos encontramos inmersos en un (el) proceso político-revolucionario venezolano, por favor, paren y dejen de seguir leyendo este texto porque se verán expuestos en un escenario de desarrollo sicológico de profunda amargura, bien despotricando contra quien se está permitiendo expresar y exponer su propia y personal visión de las actuales realidades revolucionarias en perfectos avatares consecuenciales. Muchas gracias por sus comprensiones.
El título propuesto ya lo dice todo, absolutamente todo y claro, en objetividad brutal, sin pelusas que obscurezcan las ideas, sin medias tintas ni excusas justificadas y justificables. Estamos y nos encontramos en el proceso revolución venezolano y, por tanto, tenemos, por obligación y necesidad, ser objetivos en su más prístina y real objetividad porque, reiteramos, nos encontramos inmersos en un proceso revolucionario profundamente diferente a todos y cada uno de los procesos revolucionarios precedentes que nos muestra con objetiva realidad la Historia; por cierto, es por ello que los historiadores somos tan incómodos porque no nos permitimos mentirnos a nosotros mismos más cuando nuestra Patria se encuentra profundamente inmersa en ese proceso revolucionario que comenzara en febrero de 1928 con sus propios desarrollos históricos llenos de contradicciones, triunfos y derrotas, con una objetividad en la ocasión real con el triunfo legítimo y legal de Hugo Rafael Chávez Frías en aquel mes de diciembre de 1998.
Es decir, aquellos que consideren que la "Revolución Venezolana" comenzara con aquel triunfo electoral de aquel diciembre en referencia (1998), está como se dice en el llano venezolano y en el llano que dice ser colombiano: "meando fuera del perol".
Un proceso revolucionario "…no nace de la noche a la mañana…" sino que es un proceso dramático con todas sus variables en el marco histórico de sus avatares que son profundas enseñanzas cuales son de obligación objetivar con esa crueldad que incide en las almas de los débiles, famélicos intelectualmente y gelatinosos fuchianos como siempre me recordaba mi amigo y pana "el Gordo Hugo" con quien compartimos tiempos en las brumosas calles londinenses.
Ese proceso histórico, como lo hemos expresado y expuesto, nace con aquel "febrero del 28" en tiempos de la dictadura de Juan Vicente Gómez, el andino. Aquel del "Gendarme necesario" de Vallenilla Lanz. Desde aquellos tiempos hemos transitado por tres gobiernos militares, una democracia chucuta junto a otra democracia de corto alcance junto con una democracia representativa tiempos históricos que nos han enseñado y mostrado cómo es la real-politik venezolana en el inconsciente colectivo como en el consciente colectivo del venezolano porque sino qué fue y realmente qué significó el "27 de febrero".
Desde que don Rómulo Betancourt expresó en una de sus epístolas sobre el necesario uso del "máuser" pasando por los años 60 y 70, fundamentalmente, hasta aquel "27 de febrero", "4 de febrero" y "27 de noviembre", los contradicciones objetivo-realistas del proceso revolucionario han mostrado un diseño de y en revolución atípico, diferente, único para Venezuela y es, en ese marco referente, que nos consideramos que el proceso actual revolucionario de la "Revolución Bolivariana y Chavista" es no solo único como modelo revolucionario sino profundamente diferente a todas y cada una de las "otras revoluciones" y, por ello, debemos objetivar las recientes elecciones presidenciales y sus reales resultados en el marco definitorio que significa nuestro proceso revolucionario y sus influencias e impactos allende nuestras fronteras al tiempo que no permitirnos distraernos "…en el qué dirán..", solo y únicamente jugar con las "realidades externas a lo Stalin".
La campaña que realizó Nicolás Maduro Moros (aka: NICO) se realizó a lo largo y ancho de todo el territorio nacional, muy dura, agotadora pero constante y persistente, expresando en su discurso realidades, ante las objetivas y crueles realidades, que se han vivido y se viven en nuestra Patria, Venezuela, como son los efectos consecuenciales que los gobiernos globales de derechas han mantenido, mantienen y mantendrán sobre el proceso revolucionario venezolano; es decir, esas derechas mundiales están muy y profundamente claras que en Venezuela está en curso un proceso revolucionario que significa que esta golpeando seriamente los paradigmas significativos del capitalismo aún y cuando solo el proceso revolucionario venezolano "apenas ha tocado la puerta y se encuentra en el zaguán" del "socialismo a la venezolana", en el significado real de ese concepto que muestra y significa que "nuestra Revolución Bolivariana y Chavista" es única en su expresión político-social-ideológica. Nos explicamos.
La "Revolución Bolivariana y Chavista" tiene particularidades a considerar en real objetivación sustentada en su análisis conceptual-revolucionario en la Historia demostrable en sus análisis históricos.
Cuando nos trasladamos a los textos históricos paseándonos por la Rusia Bolchevique, China Revolucionaria, Vietnam Guerrero, Cuba Digna y Guerrillera, entre otras referentes, nunca menos dignas, percibimos una "idea central" en sus procesos revolucionarios como son estar todas ligadas a "lo militar-en-realidad-efectiva-en-guerra-revolucionaria". Este concepto, fundamental para esos procesos revolucionarios, en mención, fueron expresiones necesarias y temporal-históricas e inevitables en considerando las realidades y contradicciones en las cuales se encontraba el sistema mundial-capitalista.
Cuando expresamos que la "Revolución Bolivariana y Chavista" es profundamente diferente a las arriba en mención, es porque exponemos que aunque "lo militar" ha sido fundamental en el proceso revolucionario venezolano, la "Revolución Venezolana" no alcanzó el Poder por la vía militar sino por la vía del voto en el marco del propio juego democrático de lo significativo del Estado burgués-capitalista y bajo sus propias normas legales y constitucionales; es decir, el triunfo revolucionario venezolano no llegó al Poder por la "vía armada" sino por la "vía del voto" según los paradigmas impuestos en las sociedades globales desde los primeros pinitos del "asalto al Poder" por las burguesías nacionales, es decir, objetivamente, la burguesía lleva controlando el Poder desde hace varios siglos con lo cual el propio y significado proceso "Revolucionario Venezolano" es único y sin copia alguna como modelo en revolución.
Lo inmediato anterior significa que una vez alcanzado el Poder, la "Revolución Venezolana" debía de tomar decisiones fundamentales para proceder, objetivamente, a desarrollar el propio proceso revolucionario por lo que significó que era fundamental "golpear" a y en la super-estructura" por ser lo fundamental para el mantenimiento del capitalismo de Estado imperante en Venezuela e instalado con sus fortalezas, en lo histórico, durante la denominada como 4ta. República. ¿En qué fallamos?
Reitero, en recuerdo, nuestra conversación sobre vista las realidades en pleno desarrollo que se gestaban en Moscú, realidades referidas a la "perestroika y glasnost", y conociendo de primera mano las realidades en Beijing sobre las decisiones políticas referidas a la "reforma y apertura" junto a las objetivas y reales consecuencias con relación a los factores en debilidades que mostraba el "modelo soviético" sobre dos variables: hambre y corrupción, se debía proceder, necesariamente, a buscar un obligante equilibrio que permitiera evitar "el hambre" y controlar "la corrupción".
En ese marco en referencia, sería nuestra sugerencia al Comandante Chávez Frías, en su oportunidad, de tratar de alcanzar un acuerdo de Estado con el factor industrial-empresarial referido a la Empresa Polar. Consideramos que ese fue una variable importante y fundamental que debilitó, seriamente, la gobernanza revolucionaria.
En ese orden de ideas trasladándonos a nuestras actuales realidades y escenarios políticos debemos expresar con objetiva realidad que Nico ha logrado equilibrar las profundas consecuencias de "errores revolucionarios" con lo cual, objetivamente, las realidades consecuenciales de las votaciones del próximo pasado día "20 de mayo" (2018), han sido las mejores a las cuales se han podido llegar y alcanzar vista la "matriz de opinión-no-expresada" por el pueblo. Pero analicemos.
¿Era de toda lógica que la abstención fuera tan alta? ¿Era de toda lógica que no se alcanzaran los 10 millones de votos a favor de Nico y, en consecuencia, a favor del proceso revolucionario? ¿Era de toda lógica que no fue la apatía sino la arrechera la que pautará norma en el propio proceso revolucionario en el día de las votaciones?
Objetivemos porque nos estamos jugando el propio proceso revolucionario venezolano.
Reiteramos y repetimos, el esfuerzo brutal que realizara Nicolás Maduro Moros durante la campaña electoral es de todo nuestro reconocimiento y respeto. El contenido de sus discursos no podía ser otro sino el que, machaconamente, expresó y le propuso como reflexión a las masas revolucionarias. Es cierto que, según cifras actuales del CNE, Nico sacó más de SEIS (6) millones de votos lo que podría significar que los cuadros del PSUV, en su gran mayoría, se movilizaron, como una primera aproximación, por lo que habría que esperar los cómputos que proporcione el CNE para poder realizar un análisis más objetivo. Pero en el marco de esta reflexión significaría, probable y posiblemente, que el PSUV se habría convertido en el partido político más sólido de una "democracia en transición revolucionaria" en lo referido a la objetivación de que, actualmente, nos encontramos inmersos en el proceso de transformación del Estado burgués. Ello, evidente, tiene un significado y una responsabilidad como sería el consolidar la estructura del PSUV, profundizar en la conciencia revolucionaria, profundizar en las explicaciones lógicas que contienen todo proceso de "cambios profundos" y lo significado del "nuevo Estado comunal".
Objetivemos con lógica crueldad revolucionaria, algo más allá de la objetividad; es decir, "pisemos callos".
Hemos fallado en varias realidades objetivas sin excusas.
En primer lugar, no se ha combatido mucho menos derrotado a la corrupción latente que viene socavando las bases fundamentales del proceso revolucionario. Nos va a pasar como a Chiang Kaishek que por permitir la corrupción campante en su gobierno, el estratega Mao Zedong captó esas significadas debilidades que le permitieron, militarmente, socavar las conciencias de las tropas del Guomindang. Es decir, se popularizó la corrupción transversalmente en toda la sociedad china de los años 40.
En segundo lugar, otra de las debilidades de Chiang Kaishek fue no comprender menos saber como confrontar a la burocracia corrupta que irían "poniéndole palos a las ruedas" para que el Gobierno se fuera desgastando paulatinamente. Las órdenes se encontraban en segundo lugar a los intereses personales de cada uno de los burócratas del Gobierno de Nanjing. En tercer lugar, las debilidades expresadas en el Poder Legislativo producto de la "votación al unísono" sin profunda discusión revolucionaria-nacionalista como lo demuestra la Historia de las debilidades del Gobierno de Chiang Kaishek.
Pero en la "acera de enfrente", es decir, en territorio revolucionario, en las montañas de la provincia de Shanxi, donde residía Mao Zedong, Zhu De, Zhou Enlai, Deng Xiaoping, Lin Biao, también se expresaban debilidades importantes, particularmente, durante el proceso de la "Guerra Civil", cuando a ciertos intelectuales y factores políticos no militares, se vio Mao Zedong en la imperativa necesidad de tener que desterrarlos a las provincias nororientales para que realizaran sus obligantes reflexiones en conciencia revolucionaria. Eran tiempos cuando "lo militar", necesariamente, imperaba en el propio proceso revolucionario. Las desviaciones intelectual-conceptuales provocaban contradicciones en lo conceptual revolucionario chino; es decir, la necesaria objetivación conceptual sobre cómo se debía desarrollar el proceso permanente de revolución en la consecución del Poder provocaron fuertes enfrentamientos conceptuales y personales sobre el proceso en desarrollo revolucionario. Es decir, Mao impuso su modelo de revolución con todas sus contradicciones.
¿Qué tratamos de exponer?
Es demostrable que durante la campaña electoral se expusieron diferentes debilidades importantes.
En primer lugar, el Gran Polo Patriótico no tuvo una presencia importante en el propio proceso electoral que podremos contrastar una vez que el CNE nos presente los resultados definitivos por partido político. Además, el Gran Polo Patriótico es "un arroz con mango", no expone una ideología más allá de los normales slogans que se han venido expresando a lo largo de estos años desde su conformación como un "Frente Unido" (sic) de partidos políticos sin ejercicio de Poder y del Poder. Objetivemos y permítasenos una odiosa comparación.
En primer lugar, ese concepto-en-diseño-y-praxis, NO es un concepto proveniente de la Tercera Internacional y punto. Fue un diseño personal que el Comandante consideró era el apropiado para el proceso temporal-histórico por el cual transitaba el proceso revolucionario venezolano y su expresión extra-territorial con todas las influencias provenientes de allende nuestras costas caribeñas. En segundo lugar, nunca jamás, hasta ahora, el Gran Polo Patriótico ha expuesto sus objetivos ideológico-conceptuales más allá de frases hechas; es decir, ¿se sustenta ideológicamente el Gran Polo Patriótico en el marxismo, en cuál marxismo, es blanquismo, cuál es su base ideológica y conceptual-gubernamental? En tercer lugar, más se parece a un órgano multi-partidista con objetivos propios y no de conjunto revolucionario frentista.
Otra de las objetivas debilidades con las cuales nos hemos confrontado es con la objetiva debilidad real de la "unión cívico-militar" que es más bien "militar" que "civil" independiente de los laburos que se vienen realizando en la consecución de poder alcanzar lo significado militar en función de la "seguridad del Estado" con fuerzas asimétricas en lo interno militar. Es decir, se objetivan (perciben) ciertas contradicciones sobre el real significado de la "unión cívico-militar" en ambos lados de las aceras, sin excusas más producto de "lo histórico" que del propio proceso actual-revolucionario.
En ese orden, una vez se conozcan los resultados por provincia se podrá comprender aquello de "…seguir el ejemplo que Caracas dio…".
Por último, fueron unas elecciones limpias, transparentes, personales en la decisión del votante y no votante, participativas y legales y legítimas.
El triunfo de Nico fue contundente cuando objetivamos las realidades socio-económicas contra las cuales se tuvo que enfrentar. Su esfuerzo fue valiente y generoso, patriótico y revolucionario y ello hay que decirlo sin miedo ni tapujos. No fue fácil, fue agotador, con trabajo permanente, constante y necesario siempre acompañado de Cilia y de los cantantes que realizaron una interesante labor de levantar los ánimos y logras "masificar conciencias". El slogan "Vamos Nico" fue fundamental porque "…así piensa el pueblo, así es como le agrada comunicarse con su líder…", de manera sencilla y directa.
Nicolás Maduro Moros "le metió medio guaranei" a todos los triunfadores presidenciales de América Latina del campo de las derechas conjuntamente con Donald Trump y sus "socios comunitario-europeos". Su porcentaje ganador fue "solamente" (sic) de "solo" (sic) 68% de los votos ejercidos y escrutados.
"Ahí pongo mi gallo" contra cualquier "gallo cubano-mayamero".
Ganó la Revolución Bolivariana y Chavista pero debemos ser objetivos, también ganó Nicolás Maduro Moros por su esfuerzo, trabajo, pasión y visión de futuro. Ahora solo queda tomar decisiones duras y dramáticas y al "Gran Polo Patriótico" sentarse a la reflexión revolucionaria sin excusas.
Un punto aparte pero de extremada importancia. Ver a los cuadros de la FANB votando, no tiene precio. Felicitaciones a nuestra FANB.
UNIDAD, LUCHA, BATALLA, VICTORIA.