Si alguien tenía dudas de cuál modelo económico, entre el neoliberal y de Estado de Bienestar, lleva más felicidad a los pueblos, solo basta pasearse por la Argentina de los tiempos de Alberto Fernández que se inician, y los tiempos de Mauricio Macri que culminan. ¿Qué legado deja Mauricio Macri, tras 4 años de ejercicio de gobierno neoliberal? Lo explica el propio Alberto Fernández, en su discurso de asunción al tener ya, una evaluación del gobierno anterior, cuyas cifras son totalmente desoladoras: "Más de 15 millones de personas sufren de inseguridad alimentaria en un país que es uno de los mayores productores de alimentos del mundo…Uno de cada dos niñas y niños es pobre en nuestro país…Hoy nuestros compatriotas tomaron créditos para comprar alimentos y remedios o para pagar las facturas de los servicios públicos. Las abuelas y abuelos se endeudaron para comprar medicamentos y empezaron a comer menos y peor. La situación de las PyMEs tiene también proporciones dramáticas, requiriendo un alivio fiscal y estímulos apropiados. La capacidad ociosa de nuestras fábricas, industrias y comercios también constituye un despilfarro de energías productivas…Hoy el desempleo afecta a casi un 30 por ciento de los jóvenes y, aún en tasas más altas, a las mujeres jóvenes. Hay más de 1.200.000 jóvenes que no estudian ni trabajan…La inflación que tenemos actualmente es la más alta de los último 28 años. Desde 1991 la Argentina no tenía una inflación superior al 50 %. La tasa de desocupación es la más alta desde 2006. El valor del dólar pasó de $ 9 a $ 63 en solo cuatro años. La Argentina no para de achicar su economía. El PBI de 2019 es el más bajo de la última década. La pobreza actual está en los valores más altos desde 2008. Retrocedimos más de diez años en la lucha por reducir la pobreza. El PBI per cápita es el más bajo desde el año 2009. La deuda externa en relación al PBI está en su peor momento desde el año 2004. La indigencia actual está en los valores más altos desde 2008. El nivel de producción industrial hoy es equivalente al del año 2006: retrocedimos 13 años. El empleo industrial registrado tiene el nivel de 2009. La cantidad de empresas es equivalente al nivel registrado en 2007: retrocedimos 12 años. Se cerraron 20 mil empresas en 4 años. De ellas, 4.229 eran empresas industriales…En estos 4 años se perdieron en la industria más de 141 mil empleos registrados del sector privado. En términos interanuales, el empleo industrial registrado lleva 42 meses consecutivos de destrucción. Detrás de estos terroríficos números, hay seres humanos con expectativas diezmadas. Tenemos que decirlo con todas las letras: la economía y el tejido social hoy están en estado de extrema fragilidad, como producto de esta aventura que propició la fuga de capitales, destruyó la industria y abrumó a las familias argentinas…" (Discurso del Presidente Electo Alberto Fernández, 10-12-2019). Tal panorama, nos atrevemos a compararlo con el tránsito del Estado Islámico por Siria y toda la destrucción que dejó a su paso por esa hermana República de la mano de EEUU.
El modelo neoliberal derechista, requiere de la mentira para ganar adeptos que luego despiertan de un sueño terrible y dinamizados para enfrentar la lucha por la supervivencia, como hoy, lo están haciendo los pueblos chilenos, colombianos y ecuatorianos. Pero, ¿Qué ofrecía Mauricio Macri, cuatro años antes, en su toma de posición?: "La mayoría de los argentinos que votó por nuestra propuesta lo hizo basada en tres ideas centrales. Ellas son: pobreza cero, derrotar el narcotráfico y unir a los argentinos… Nuestra prioridad será lograr un país donde cada día haya más igualdad de oportunidades, en el que no haya argentinos que pasen hambre, en el que todos tengamos la libertad de elegir dónde vivir y desarrollar nuestros sueños. Quiero darles una vez más la confirmación de que vamos a cuidar a todos. El Estado va a estar donde sea necesario para cada argentino, en especial para los que menos tienen. (Aplausos). Vamos a universalizar la protección social para que ningún chico quede desprotegido…Vamos a cuidar los trabajos que hoy existen, pero sobre todo a producir una transformación para que se multipliquen las fuentes de trabajo porque esa es la única forma de que haya prosperidad donde hoy hay una pobreza inaceptable…Se viene un tiempo nuevo: el tiempo del diálogo, del respeto y del trabajo en equipo; tiempo de construcción con más justicia social…Creemos en la unidad y la cooperación de América Latina y el mundo, en el fortalecimiento de la democracia como única posibilidad de resolver los problemas de sociedades diversas. Es necesario superar el tiempo de la confrontación…" (Discurso de toma de posesión de Mauricio Macri, 10-12-2015). A los cien días de su toma de posesión, marzo 2016, el empresario Mauricio Macri, recibe la bendición imperial de la mano de Barack Obama, presidente de EEUU, quien le encomienda: "Macri me impresionó favorablemente. Se movió rápido para realizar reformas que generan crecimiento económico. Argentina está tomando su papel de líder en la región. Macri es un ejemplo para los países de la región" (Video Conferencia de Prensa del Presidente Obama, Buenos Aires, 22-03-2016). En el intermedio a esa vista, Macri, se casó con el FMI y dejó a un lado sus promesas de la toma de posesión, y emprendió el camino de las reformas de mercado, que iniciaba con políticas de ajuste macroeconómico que impulsaban la flexibilidad laboral, desempleo, tarifazos y desmantelamiento del Estado de Bienestar, construido en la época de los Kirchner, Néstor y Cristina. El neoliberalismo, retornaba así, de la mano de Macri a la Argentina. El pueblo argentino, no dejó jamás las calles en esos cuatro años de duro malestar social, con sus protestas. El gobierno de empresarios para beneficio de los empresarios, que representó el empresario Mauricio Macri, cierra su ciclo con el descontento generalizado de la población argentina, en su contra. Al punto, que la mayoría de la población optó por votar la opción opuesta, cercana al modelo de Estado de Bienestar que representaron los Kirchner. Al extremo, que hoy, Alberto Fernández, reivindica en su toma de posesión el rol del Estado: "Queremos un Estado presente, constructor de justicia social, que le dé aire a las economías familiares…" Y, Fernández, va mucho más allá, al manifestar su desacuerdo pleno con el modelo neoliberal o de supremacía del mercado: "Estoy seguro de que todos vamos a coincidir en que hemos llegado a esta situación porque se han aplicado muy malas políticas económicas. Esa serie de decisiones económicas fueron determinantes para que el Pueblo Argentino, en su mayoría, las descalificara en las últimas elecciones…"
En política exterior, Fernández, también rompe con la política de sometimiento a los dictámenes de Washington, en esa materia: "Seguimos apostando por una América Latina unida, para insertarnos con éxito y con dignidad en el mundo. En 1974, el general Juan Domingo Perón señalaba que "a niveles nacionales, nadie puede realizarse en un país que no se realiza. De la misma manera, a nivel continental, ningún país podrá realizarse en un continente que no se realice"…"En cualquier escenario, la Argentina levantará alto sus principios de paz, de defensa de la democracia, de plena vigencia de los derechos humanos. Defenderemos la libertad y autonomía de los pueblos a decidir sus propios destinos." Atrás quedará, para el juicio de la historia, el nuevo coloniaje que representó para la Argentina de los tiempos de Macri, alinearse como un "perrito" faldero más de Donald Trump. Sin duda, el camino trazado por Alberto Fernández, en su discurso de toma de posesión, ha hecho renacer las esperanzas libertarias del pueblo San Martiniano y de la Patria Grande, en general. ¡Argentina, está de plácemes! Tanta felicidad, es inconmensurable. Felicidad, compartida por el pueblo venezolano, tanto, como lo refería el Comandante Hugo Chávez: "Me siento como un argentino más", y le agregamos, cuente esa nación hermana en qué puede ayudarla Venezuela, y allí nos tendrá, como una mano amiga de su pueblo, Gobierno y Fuerza Armada Bolivariana, para superar el desmadre en que los ha dejado la bomba atómica del neoliberalismo!...