Impresionante la estulticia que muestran quienes desde el Lunes 30 de Noviembre culpan al gobierno de Maduro, y hacen ruido diciendo a diestra y siniestra, "este Presidente nos va a matar con la flexibilización económica todo Diciembre, abriendo negocios. Analistas de logroño que de lo que dicen no tienen ni un retoño ni NPI, ni pequeña idea en el fondo de sus palabras, los veíamos hace pocas semanas muy alarmados relatando el presunto empeño de Maduro en "ocultar los muertos por el coronavirus".
Con asombrosa facilidad pasan de una opinión "trua trua lorito" a la nueva que les siembran así sea totalmente contraria, dichos calcados con tal de hacerle oposición a la revolución bolivariana que "nos tiene, pasando hambre, sin luz y sin agua, ni gas ni gasolina, ni aumentos de sueldo", quejosos sin dejar de indagar si pagaron el nuevo bono. Uno termina dándole la razón a quienes no les extrañan las idioteces que expresan, inoculando gente sencilla pero bocona, porque Maduro se lo debe dar a Raimundo y todo el mundo.
Expresan disconformidad a granel, y a cara lavada miran a todos lados en forma desafiante, sin condenar a empresas privadas estafadoras, causantes de la hiperinflación que mata chicos y grandes, cobrando millones por medicinas que antes eran excesivamente baratas, y servían de gancho para el contrabando a países vecinos, con anuncios públicos de extraordinarios descuentos de hasta 40 a 45 % en medicamentos de fácil industrialización.
Nada mejor que una campaña electoral para descubrir la politiquería mentirosa y la abismal diferencia entre aspirantes a Diputados con sincera intención por Venezuela, y los arribistas que sueñan con la miel de los cargos de elección popular, frotándose las manos igual que lo hizo el asesino Julio Borges, al enterarse de una multimillonaria donación monetaria que empresas y organismos desde Norteamérica, envían en dólares para seguir dándole vida a mantenidos, quienes desde fuera de su tierra piden que nos invadan.
El desgaste de poder y las fallas, así como corruptelas presentes en la quinta república tienen muchas aristas, lo peor es que ensombrecen el socialismo siglo XXI, legado de Hugo Rafael Chávez Frías, quien cobijado bajo el auténtico antiimperialismo bolivariano, predijo hace dos siglos la vil entrega de los liberados de la colonia y la conquista entonces en manos de los Reyes de España, porque desde el norte de América, armados y amenazantes vendrían peligrosos neo conquistadores salvajes.
En la recta final hacia elecciones parlamentarias, observando a insolentes que dan la espalda a Venezuela y se les cae la baba de admiración por EEUU, resulta difícil que no puedan entender a los imperialismos que no cambian, sus intenciones son las mismas. Lo más reciente es perjudicarnos en el internet, sancionando EE UU a empresas oriundas de China porque una corporación asiática da servicio a internautas venezolanos, otro asco neoliberal salvaje.
Desde Pekín por la portavoz de la Cancillería china Hua Chunying, expresó sobre el abuso de sanciones estadounidenses, "Pekín apoya al gobierno de Caracas para defender su soberanía", prueba repetitiva, Venezuela no está sola ante los monigotes del capitalismo salvaje.