I

Cuando nos desempeñamos como maestros de escuela rural en el caserío La Unión (municipio Urdaneta, estado Lara) teníamos lo que se llamó en su momento La Biblioteca Escolar de Aula y había allí un librito de Pensamiento Bolivariano que en alguna de sus páginas traía una frase que nos impresionó sobre manera, viniendo sobre todo de un guerrero, un guerrero por la libertad, claro. Dice El Libertador Simón Bolívar, palabras más, palabras menos (citamos de memoria) que: "La guerra es el peor de los males …".

Impresionante, ¿verdad? Y por estos días lo hemos podido validar con lo de Ucrania, Rusia y la OTAN en cuya geografía de la Europa del este se desarrolla, precisamente, "el peor de los males"

Al guglear la frase la encontramos completa y reza de la siguiente manera: "Aunque la guerra es el compendio de todos los males, la tiranía es el compendio de todas las guerras" (Nohora M. Páez S) (en https://www.clarincolombia.info>...).

¿Cuál pudiera ser la hermenéutica más adecuada de semejante apreciación? Lástima que no tenemos a mano otro librito que en nuestra juventud de los años de 1980 comprara uno de mis hermanos en la Librería Paulina de Barquisimeto, se llama Pensamientos de El Libertador y su autor es Juan de Dios Sánchez. Recordamos debajo de cada pensamiento lo analizaba y contextualizaba, seguramente incluyó la frase que aquí nos ocupa. Tal vez lo hallemos un día de estos en las pilas de libros usados de la Plaza Pedro León Torres de Barquisimeto y volvamos a disfrutar su lectura. En la llamada Cuarta República hubo también bolivarianos notables.

II

Volvemos a fatigar "El Libro de Arena" que dizque es la internet, según pronosticó Jorge Luis Borges en su cuento citado de "Ficciones" y encontramos que tal pensamiento bolivariano "Aunque la guerra es el compendio de todos los males, la tiranía es el compendio de todas las guerras" se halla inserta en la Proclama a los Cundinamarquenses, 17 de diciembre de 1814 (véase a "Bolívar en Navidad", por Luís delgado Arria en www.aporrea.org lunes 03/01/2011).

Así, pues, no vamos a realizar un ejercicio que los profesores-historiadores del Instituto Pedagógico de Barquisimeto, al menos, suelen denominar análisis documental, que es muy interesante; sino mencionar que, en el contexto actual, en la historia reciente en el ámbito mundial, sobre todo, latinoamericano y venezolano la guerra ha herido gravemente nuestra sensibilidad en sentido individual y colectivo. Tenemos que parar la guerra.

III

También en estos últimos días, volviendo otra vez a mencionar otro libro, esta vez de Jean Francois Lyotard ("La postmodernidad explicada a los niños"), nos hemos visto obligados a explicar la guerra a los niños y en verdad no hemos podido hacerles comprender las razones de las conflagraciones bélicas, lo lógica de destrucción. Destrucción tanto de las infraestructuras físicas como edificios, puentes y demás infraestructura de servicios y el porqué de los desplazamientos de las poblaciones, mujeres, niños y ancianos; ya que los varones jóvenes en general son reclutados como soldados de tropa, un gran horror.

La antinomia paz-guerra o viceversa, sostiene el filósofo español-venezolano Federico Riu (en su obra" Historia y totalidad. El concepto de reificación en Luckács") parece representar un movimiento pendular en el devenir humano en el pasado y su proyección futura; pero a fin de tener una comprensión adecuada se requiere hacerlo a partir de una visión filosófica donde junto con ofrecer una comprensión conceptualmente –abstracción-, se requiere supeditarse a la empírea, a la factualidad o los hechos en cuanto tales, encadenando los fenómenos; más aún cuando en los días que corren de los eventos de Ucrania, Rusia y la OTAN, han surgido tantos defensores de la llamada pos verdad. Lo que no debería olvidarse, desde la perspectiva del método marxista, es que la verdad se funda en los hechos, no en las reinterpretaciones o "reificaciones" que de estos se hagan según los intereses crematísticos.

Un mal del que padecemos hoy como otra plaga más, dado que citando a Riu "La categoría de reificación aspira a ser la representación fundamental de la situación del hombre en la sociedad capitalista. A partir de su significación económica –expresa ante todo la estructura de la objetividad mercante-, y de su manifestación culminante en el trabajo, se extiende a todas las demás manifestaciones, tanto subjetivas, como objetivas, de la sociedad contemporánea" (Federico Riu: Historia y totalidad. El concepto de reificación en Lukács. Monte Ávila Editores. Caracas. 1978. P. 9).

IV

Finalmente, el corolario y un poco precario de todo lo anterior, a saber, que vivimos y padecemos hoy la guerra allá en Europa del este, Latinoamérica y Venezuela, vía convencional o militar y económica, porque vivimos la tiranía del capital: el compendio de todas las guerras.