Tuvo toda la razón del mundo Berthold Brecht, en "La ópera de los tres centavos", recoger aquello de "lo primero es el comer". Aunque es cierta la frase bíblica, atribuida a Cristo, según la cual "no sólo de pan vive el hombre".
Pero no hay duda que aquello que Brecht tomó de las calles, "lo primero es el comer, la moral viene después", tiene mucho fundamento. Por el hambre o por el comer, que implica la vida, el hombre puede perder la dignidad, porque hasta lo atan. Por algo, Miguel de Cervantes de Saavedra, puso a Don Quijote, decirle a Sancho, "vayamos a comer, pues para tener el control de las armas, hay que tener el de las tripas".
El hambre, de todo, hace al hombre ver fantasmas, hasta puede transformar a un indefenso en una fiera salvaje y lo menos que, en uno hace, es volverlo loco. Aunque también se dice, "ese tipo está hambriento de conocimientos y justicia" y esto es bueno y bello.
No sé exactamente cómo andan las cifras de desnutrición en Venezuela, pero sí de varias cosas. No es mentira que el nivel salarial de los venezolanos, tanto en el sector público como el privado, es de los más bajos del mundo; y hay quienes aseguran, es más bajo que el de Haití y, eso, es decir bastante.
En lo que a mí respecta, que no soy economista, poco sé de eso de medir el PIB, quizás hasta por bruto éste y uno también, sobrarán las razones para que el gobierno no aumente los salarios, dado que, según los técnicos, apegados a eso que llaman el monetarismo, según el cual, de manera sencilla y concreta, de aumentar salarios, eso implicaría rebasar la masa monetaria que admite el nivel de aquél (el PIB), que de bruto nada tiene, sobre todo en Venezuela y, en consecuencia, aumentarían los precios. Según ellos, la clave es mantener los salarios bajos para que suba la producción, ante lo que uno se pregunta: ¿quién compraría esa producción adicional con tan bajos salarios? Por eso es la locura y hasta lo bruto, que uno no sabe dónde están.
Los salarios llevan bajos unos cuantos años y la producción nada que aumenta como para que aquellos suban, de donde uno por simple experiencia sabe que eso es coba. Lo que pasa es que quienes pecan o cometen errores, sobre todo uno tras otros, deben pagar sus culpas. Aunque, en verdad, la culpa siempre termina pagándola el más idiota. Uno paga por el otro.
Pero yo, sin nada saber de economía, como ya dije, pese he leído a quienes de eso si saben y aseguran que el PIB nuestro admite muchísimo más del dinero que circula y habiendo visto como factores políticos y puramente especulativos manipulan las cifras y los precios para derrotar todo reclamo por aumento salarial, está convencido que al gobierno más que loco, le tienen un cerco de "si aumentas los salarios te aumentamos los precios al doble de aquel, manipulando los medios, las páginas que marcan y empujan la tasa cambiaria y desatamos una epidemia de aumento de precios". Y es más, "si pese eso, insistes en hacerlo y tomar medidas para que nosotros no hagamos lo que sea para derrotar tus intentos, volveremos de nuevo con las guarimbas y el poner todas las medias sobre la mesa". Mejor quédate tranquilo, así te ves y te vemos más bonito, te damos una tregua y puedes descansar, respirar hondo y mirar tu futuro en paz y tranquilo". Es decir el gobierno está, para decirlo en la jerga del béisbol, "entre primera y segunda".
Y esto es poco, pese la gente del gobierno llegó donde está bajo las banderas de Chávez y ellas dice defender, como que es antiimperialista y, en consecuencia, partidaria, "al brinco rabioso", de la soberanía, han cedido mucho en este terreno. Ver nuestro futuro personal tranquilo y en paz también es tan bueno como el comer.
Y esto de la soberanía no lo digo yo, pues de eso nada sé. Lo dice Luis Britto García, en su último artículo, titulado "Manual de defensa contra medidas coercitivas", donde sentencia que, "Evitemos entregar la soberanía. Retiremos de nuestras normas, tales como la Ley Antibloqueo y la de Zonas Económicas especiales, disposiciones que someten los litigios sobre cuestiones de interés público interno a tribunales o árbitros extranjeros, pues ello es contrario a la inmunidad de jurisdicción consagrada en los artículos 1 y 151 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y los tribunales foráneos nos condenan sistemáticamente".
https://www.aporrea.org/tiburon/a315699.html
Para Luis Britto, la soberanía está en peligro y esto piensa, habiendo de por medio un gobierno que dice ser antiimperialista. ¿Qué haría aquella gente, si llegase al gobierno, teniendo esa "manguangua" en las manos?
Los del gobierno no creo que estén locos, aunque pudieran tenerlos locos, tanto como que unos "izquierdistas, marxistas" de marca y abolengo, como Jesús Farías, eso es lo que creo por su cuna, la de su casa, su escuela, la de "Economía" de la UCV, la del barcelonés Maza Zabala, el carupanero Héctor Malavé Mata, el cumanés Francisco Mieres y el merideño Domingo Alberto Rangel, entre otros y habiendo sido Farías, para remate, del PCV, se hagan monetaristas, neoliberales y se opongan a todo trance a las luchas de los trabajadores por el salario. Pero en este caso, no creo que eso lo motive el hambre, esa de la calle, porque "no sólo de pan vive el hombre".
Y es que el hambre, como tantas vainas, tiene muchos niveles, decibeles y escalones. El hambre de poder, lujo y la codicia que es un hambre desesperada y hasta de alcurnia o mejor con apetito por ella, vuelve loco a más de uno, que no es decir, a cualquiera. Pero también enloquece y desespera, sentirse acorralado, derrotado, porque ante el ataque incesante del contrario, no se tuvo certeza en la defensa y menos se aseguraron salidas honorables.
Y es que, por equivocarnos en aquello que podíamos derrotar a Goliat como David, pelo a pelo, hasta dejaron a un lado la honda. Olvidaron que David en la honda llevaba una piedra y en ella la fuerza de Jehová o Dios. Por eso David, pequeñito, sólo con una honda y unas cinco piedras, de las cuales sólo usó una, derrotó y dio muerte al gigante. David no desafió a Goliat pelo a pelo, pues sabía que haciéndolo así, el gigante lo trituraría.
Como dice ahora el técnico petrolero Einstein Millán Arcia, en lo que envuelve a más de uno, y por supuesto no escapa Ramírez, Raimundo y todo el mundo, "la esperanza de PDVSA y Venezuela parece hoy más que nunca reposar en el destino de Europa y Norteamérica, y no en el apoyo y solidaridad de sus otrora protectores Rusia y China, quienes hoy se han unido en una especie de alianza que promete dejar a un lado el interés por el hidrocarburo criollo". Y luego agrega en relación con la alegoría que hemos usado de un David desarmado, sin honda, enfrentando a Goliat, "Venezuela jamás debió haber perdido el mercado norteamericano; menos por complejos personales y/o diferencias políticas. De haber mantenido la cuota de exportación a EEUU de cerca de 1,400,000 BPD y 1,600,000 BPD que tenía PDVSA antes que R. Ramírez pusiera en práctica su plan macabro en 2008". https://www.aporrea.org/energia/a315728.html
No es suficiente que Putin diga ahora "Venezuela es un socio estratégico y aliado fiable de Rusia en América Latina y en el mundo en general" https://www.entornointeligente.com/putin-venezuela-es-un-socio-estratgico-y-aliado-fiable-de-rusia-en-amrica-latina-y-en-el-mundo-en-general-2/ , pues en ese tipo de relaciones siempre terminamos nosotros siendo fieles por demás a quien no lo es con uno y además "hay que verle el queso a la tostada".
Y es que los del gobierno, se dieron cuenta que eran como David, pequeñitos y sin su Jehová en la mano, el pecho o en la frente, cuando ya era tarde y el gigante les tenía guindando por el gañote. Y para ser justo, pues siempre procuro serlo y me cuesta hacer lo contrario, al buscar la responsabilidad de todo esto, hay que echar unos cuantos pasos hacia atrás. Tanto como qué, si Ramírez tiene culpa, que bastante la tiene, hay también culpables que hicieron causa común con él. Y conste que no hablo de robar o corrupción, pues eso no me hace falta para saber cuánto daño éste hizo al país.
Esta loquera de ahora, que nada mejor para definirla con el reclamo de Luis Britto, viene desde tiempo atrás y no ha habido la manera, forma ni liderazgo que le halle una salida distinta al meollo en el cual estamos envueltos. Y este meollo sólo se podría desenrollar en favor nuestro y como reclama Luis Britto, formando una fuerza nada excluyente, ni siquiera con respecto a a las fuerzas del gobierno que, no son nada insignificantes, pese lo que cada quien piense y crea, que pueda rediseñar una estrategia por la soberanía, los derechos de la gente, empezando por el salario, que infunda respeto en la comunidad internacional, empezando por América Latina misma y rescate nuestros derechos a desenvolver nuestra economía, empezando por la petrolera. Lo que implica también nuestro derecho a resolver nuestras controversias sin injerencia extraña. Pues con Leyes como la relativas a las inversiones extranjeras y la contra el bloqueo económico, lo que hacemos es como poner el retroceso y meterle chola a fondo.
Pero la loquera es grande y desatada está. Antes, un tiempo atrás, atraído por la campaña estadounidense y sus aliados, fundamentada en falsas ilusiones, ofertas engañosas, los venezolanos se desataron en diáspora. Se fueron hacia donde fuese más fácil e inmediato. Perú, Chile, Colombia, cuyos gobiernos le ofrecían facilidades de entrada sólo por generar un tumulto que llamase la atención sobre Venezuela. Allí se llegaba hasta sin pasaporte y visa. Otros, en menor cantidad corrieron hacia EEUU, pero en este país, muy pronto, por conocedores de lo de Cuba en el pasado y la imparable avalancha centroamericana y mexicana, pusieron muy pronto su cerrojo. Y establecieron trámites más estrictos; aquel como simplismo o chiste de mal gusto de los "asilados políticos", terminó siendo una muy mala jugada. Pues la gran mayoría de quienes se fueron a los países suramericanos antes nombrados, convencida que les habían caído a coba, también optaron por irse al país del norte. Y eso fue una loquera, locura o un destape.
Pero la locura no para. Ahora, como no hay visa ni pasaporte y EEUU se dejó de esa pendejada de estar ofreciendo asilo a todo venezolano que quisiese y hasta necesitase irse, porque esto es de locura, de Venezuela y quienes están más abajo, Perú, Chile, toman rumbo a Panamá para meterse en la selva del Darién, para salidos de allí, entrar en una nueva tragedia, como otro episodio de serie violenta, de la interminable caravana centroamericana que marcha a México, allí unirse con la original de este país, entonces para ir a enfrentarse al río Bravo y, toda esa dantesca épica y hasta "hazaña", cosa de locos, se justifica por este manicomio en el cual estamos conviviendo.
Y la loquera o locura es tal que, ahora por la muerte de la reina Isabel, muchos venezolanos de vaina no se han puesto luto y lloran y comentan con insistencia, más que del asunto de los salarios y las pensiones, por lo menos por estos días, de la tristeza que les embarga, no un ser humano, como que recientemente murió Fruto Vivas y todos los días se mueren venezolanos desasistidos, sino la reina; más que si hubiese muerto el Papa, "toda una gran señora benefactora de la humanidad". Y hay hasta quienes quieren tener una. Y para más, dándose golpes de pecho, unos cuantos agradecen a Dios que les quedó de rey, quien hasta hace unos dos o tres días era el príncipe Carlos. Y lo agradecen doble, pues con este rescatan al Emérito de España, Juan Carlos, quien tuvo que irse antes de tiempo, desacreditado por sus feos vicios y corrupto.
La loquera pudiera llegar a más, como que de repente salgan a la calle grupos y guarimbas lanzando piedras con hondas y gritando ¡abajo Simón Bolívar! ¡Muera la república! ¡Anexémonos al gobierno inglés y con esa jugada recuperamos El Esequibo! Pues Guyana, al fin de cuenta, sigue siendo como lo mismo. Y no es extraño, pues ya tenemos Ley de Inversiones Extranjeras, Antibloqueo y salarios congelados, hasta que suba la producción, como decir; "cuando San Juan baje el deo".