Debemos dejar la confusión mental reinante por las ideologías, la sociedad industrial, en sus versiones capitalistas y comunista, no es conducente a la desaparición de la pasión idolátrica, sino que, por el contrario, la fomenta. Freud elaboró una teoría sobre el desamparo del hombre y las posibilidades de superarlo, para eso se creó la ilusión religiosa, pues sin ella no soportaría las penas de la vida, la realidad cruel.
El hombre contemporáneo contempla a individuos que tienen necesidad de ídolos, porque es un rasgo natural y común de la esencia humana, en este sentido, se nos habla de transferencia de algunos fenómenos de poder que busca difundir la conducta humana. El fenómeno de la transferencia debe entenderse como manifestación, de que, en lo hondo del inconsciente, la mayoría del genero humano se siente como niños y, por tanto, anhelan una figura poderosa en la que confiar y a la cual rendirse.
La cuestión, entonces es la necesidad del ídolo. El presidente Hugo Rafael Chávez Frías no es un ídolo, siempre reflejo una conducta de líder como Martín Luther King y Gandhi. Entendemos, entonces, que la transferencia en la cuestión psicoanalítica nos centra, sobremodo, en un rasgo humano que se moviliza por ciertas condiciones posteriores y siempre dependiente de la estructura total de carácter en la persona.
El caso iraní esta tras la máscara del gran desconocido, Irán a la final nos traerá obstáculos en el mercado, el caso y muerte del futbolista nos lleva a una profunda reflexión, estamos levantando falsos ídolos en el mundo político e ideológico.
Así cuidado con el pesimismo. El género humano necesita otra dimensión de la verdad, todo, no puede ser una conducta mecánica. Cada ciudadano oculta algo en su interior. Nos han conducido a aislar nuestra libertad y soberanía de los pueblos.
De modo que no hay, en lo absoluto, nada imparcial. Y surge la opresión y una concepción de la historia distinta, Est5amos abordando zonas de conflictos de confrontación y criterios objetivizados que salen de las tumbas para engañar a toda una colectividad. Dejemos atrás el romanticismo.
Lo cierto que, de Chávez al presente, nuestros presidentes han fracasado. Es el pensamiento de Lula desde el Foro de Sao paulo que nos descubre como florece, la intencionalidad
Es cierto, no estamos a la Antigüedad y debemos aplicar lo concinierte en el modo jurídico. Nos encontramos dentro del conflicto de quienes gobiernan al mundo. Somos parte de un gran discipulado argentino.
Desde allí se marca la historia con el General San Martin y con Simón Bolívar, en Venezuela. Las reformas del Estado nunca se ejecutaron y, los gobiernos se rigieron por Europa, buscando originalidad, contemplando nuestra realidad social y, así nuestras necesidades presentes y futuras. Ya la luz de Colombia, no se encuentra brillando en Colombia.