El proceso de cambios en que Venezuela actualmente está imbuida cada vez se afianza más al contar con la robusta espiritualidad de la mayoría de un pueblo que lo apoya y que lucha por lograr su ideal, basado éste en la creación de una verdadera unidad que evitará se abuse de él como fue lo habitual. El pueblo ve la voluntad de entrega de su máximo gobernante, ve su vitalidad admirable y contagiosa, ve como transmite a toda la población un amor incesante, y advierte en él a una persona de alma pulcra, noble y generosa proyectada en una etapa de su vida fulgurante. Esto es lo hermoso que predomina en la conciencia del pueblo, él sabe que nunca será traicionado por su líder, y aunque hay una escuálida minoría que niega y despotrica de manera enfermiza de lo evidente, la inmensa mayoría sabe que en Hugo Chávez existe una sentida búsqueda de libertad, justicia, democracia y progreso para todos; absolutamente para todos quienes viven en esta patria.
Todo empezó con un sentimiento metido en lo más profundo del cuerpo, sentimiento que estuvo tan adentro del pueblo que llegó a su mismísima existencia, y aprovechando esta fuerza eliminó el Pacto de Punto Fijo que lo tenía hastiado por su injusto trato ya que solo lo llamaba a participar en las contiendas electorales para con su voto simular que aquí existía democracia. Hoy, aquel sentimiento se ha visto retribuido en transformaciones que no cesan ni un momento, que cada vez se amplían más a favor del pueblo, razón por lo que ya ese sentimiento se convirtió en confianza por el proceso de cambios, el cual substituye a la desilusión que el pueblo sintió por aquellos hombres y mujeres que gobernaron este país desde 1.958 hasta 1.998; 40 años de saqueos, vicios, vagabunderías e inmoralidades llevado a cabo sin el más mínimo recato. Fue tanta la corrupción, que el mismísimo presidente vitalicio del partido Acción Democrática, principal ideólogo de esa tolda política, con un compañero de su partido en ejercicio de la presidencia de Venezuela se atrevió a acuñar la siguiente obscena y cínica frase: “En Venezuela se roba porque no hay razón para no hacerlo”
En parte los venezolanos ya han sido reivindicados, pero no hay que confiarse porque la oposición política y malsana cuenta con inmensos recursos económicos y técnicos provenientes de los Estados Unidos, ésto se ha comprobado fehacientemente, ellos cuentan con el apoyo de ese poderoso imperio y sus gobernantes son capaces de todo, por lo tanto hay que continuar luchando para que se imponga definitivamente la anhelada transformación social, ética, política y económica en esta patria vendita por Dios, siendo por eso que se ha invitando a profundizar en multitudinarias asambleas el plan político que debe seguir el país; éste, cimentado en los criterios soberanos de las personas que asistan a esos eventos. Ya el pueblo venezolano mayoritariamente aceptó la invitación y es por ello que se sigue inscribiendo como aspirante a militante de una hermosa organización política, cosa que el mismo pueblo provocó cuando el 3 de diciembre de 2.006 manifestó que los partidos políticos tradicionales quedaban fuera de toda posibilidad de llegar al poder y confirmó su respaldo mayoritario al primer mandatario para que continuara su camino hacia la victoria final.
La victoria definitiva habrá de llegar y por eso el venezolano debe dar por cierto que muy pronto será abolida la corrupción administrativa y entonces se impondrá una frase que dirá: EN VENEZUELA NO SE ROBA PORQUE LA CONCIENCIA DE SU GENTE SE LO IMPIDE. Obsérvese como en la inmensa mayoría de la población cada vez se le mete en lo más profundo de su espíritu aquello que escribiera el Libertador Simón Bolívar, el 26 de Octubre de 1.826, al general Andrés de Santa Cruz: “PRIMERO EL SUELO NATIVO QUE NADA: ÉL HA FORMADO CON SUS ELEMENTOS NUESTRO SER; NUESTRA VIDA NO ES OTRA COSA QUE LA ESENCIA DE NUESTRO PAÍS; ALLÍ SE ENCUENTRAN LOS TESTIGOS DE NUESTRO NACIMIENTO, LOS CREADORES DE NUESTRA EXISTENCIA Y LOS QUE NOS HAN DADO ALMA”
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