No es fácil entender los cambios que esta exigiendo la revolución al hombre que viene de una sociedad descompuesta, como la mayoría de nosotros; somos hijos de adecos y copeyanos, por lo tanto nuestra estructura mantiene vicios de descomposición, (quedo demostrado el daño que causo los cuarenta años de desastre) aunque la intención de nuestros padres dentro de la ignorancia (no es brutalidad) no fue contaminarnos, cargarnos con esta culpa.
El diez por ciento de los comunistas de siempre, no es ni será suficiente para hacer marchar la revolución, hay que ayudar en la formación del hombre nuevo, que tendrá la responsabilidad de desaparecer los vicios que arrastramos por herencia y sembrar valores auténticos que nos permitan decir mañana, que somos una verdadera propuesta.
Estamos buscando caminos, esta elección interna es una demostración contundente de esfuerzo para la unidad; la claridad de los participantes, que es toda la fuerza que conforma el PSUV, tiene un compromiso a pesar de la elección, por encima de las controversias que se manifestaran en el debate, hay una exigencia por encima de todo lo necesario que pueda pasar y es mantener LA UNIDAD.
La responsabilidad que exige este reto, tiene que ser evaluada por la conciencia de la individualidad, el colectivo tiene otro compromiso, ayudar a equilibrar las conductas cuarto republicanas que aun arrastramos y que es necesario erradicar porque no funcionaran en el futuro que estamos construyendo.
Lo que estamos haciendo en estas tres semanas, no quiere decir que estemos listos, pero es un adelanto inmenso para la propuesta del HOMBRE QUE EMPUJA, empeñado en la participación y la construcción de una sociedad de iguales, donde el tiempo juega un papel determinante en la intención del revolucionario nuevo; un despertar lleno de voluntad, que nos permita sin mezquindad ser de verdad UNIDAD, aunque estemos en competencia por encontrar quien es el más apto para demostrar amor al prójimo, sin esconder los símbolos de la traición en actitudes que solo servirían para mostrar que nada ha cambiado y de tener el apoyo de las comunidades, que su conducta forme parte de lo que se busca en revolución y que no tiene otra intención en este esfuerzo, que encontrar revolucionarios; de lo contrario se perderá el esfuerzo y tendremos que empezar de nuevo, pero estamos comprometidos a lograrlos es un compromiso, porque este camino empezó y no hay nada que nos detenga, PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
HAZTE CONCIENCIA.
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